La artritis reumatoide (AR) es una enfermedad en la que el sistema inmunitario ataca las articulaciones, sobre todo las de las manos y los pies. Esa inflamación puede acabar dañando o destruyendo el cartílago y el hueso. No existe cura para la AR, pero hay formas de controlar los síntomas y la progresión de la enfermedad.
La mayoría de las personas con AR tendrán síntomas en los pies y los tobillos en algún momento. En aproximadamente el 20% de los casos, el dolor de pie o tobillo es el primer signo de la enfermedad. La cirugía no es la primera línea de tratamiento para la AR en pies y tobillos. Su médico probablemente le sugerirá cambios en el estilo de vida, medicamentos, plantillas personalizadas para los pies y otros tratamientos.
Pero si éstos no ayudan, la cirugía puede ser una opción.
Cuáles son las cirugías para la AR del pie o del tobillo?
Fusión: La cirugía más común para la AR del pie o del tobillo es la fusión. El cirujano toma dos huesos que forman una articulación y los une con tornillos y placas para hacer una sola pieza de hueso. También elimina el cartílago que queda en la antigua articulación.
Esto puede limitar el movimiento de la articulación. Pero muchas de las articulaciones del pie, especialmente la del mediopié, no se mueven mucho para empezar, así que no hay mucho impacto.
En el tobillo, sin embargo, hay mucho movimiento. Por ello, la cirugía de fusión allí suele provocar cambios notables en su rango de movimiento. Alivia el dolor, pero otras articulaciones tienen que compensar el cambio en la amplitud de movimiento del tobillo (normalmente se pierde el movimiento ascendente y descendente de las articulaciones).
La AR puede causar a veces graves daños en el cartílago y los ligamentos. Esto puede reducir la eficacia de los tratamientos de fusión. Sin embargo, los nuevos medicamentos que ralentizan la progresión de la enfermedad han contribuido en gran medida a mejorar los resultados de estas cirugías.
Otras cirugías: Aunque la fusión es lo más común, hay otras cirugías que los médicos pueden realizar, dependiendo de sus síntomas, nivel de actividad, salud general y otros factores.
En algunas personas, los cirujanos pueden corregir los dedos en martillo y los juanetes en la parte delantera del pie (el antepié) y mantener la articulación intacta. Estas cirugías, conocidas como resecciones de la articulación del dedo del pie, eliminan la parte doblada del hueso, dejando la articulación tal como está. Los tendones pueden cortarse y volverse a unir durante la cirugía. Algunas versiones de la cirugía, como la artroplastia de implante, sustituyen el hueso eliminado por una pequeña pieza de silicona u otro material fabricado en laboratorio.
En otros casos, los cirujanos pueden sugerir una sustitución completa de la articulación con una versión mecánica, conocida como sustitución articular total.
La sustitución total de la articulación puede ser posible en algunos casos. Su cirujano puede sugerirla si ya se ha sometido a una cirugía de fusión o si tiene múltiples problemas articulares en la zona del talón. Esta cirugía es más seria, pero suele evitar los problemas de sobrecompensación que pueden surgir de la cirugía de fusión.
Cómo se prepara la cirugía de pie o tobillo con AR?
Muchos de los medicamentos que tratan la AR también cambian la forma en que su cuerpo combate las infecciones y se cura. Es posible que tenga que cambiar el tipo o la dosis antes de la cirugía para que pueda recuperarse de forma segura después.
Esto puede ser bastante difícil para las personas que tienen varias articulaciones afectadas por la AR. Su cirujano colaborará estrechamente con su reumatólogo y su médico de cabecera para elaborar un plan de medicación antes y después de la intervención.
La mayoría de las personas pueden volver a tomar la medicación para la AR una vez que se curan las heridas quirúrgicas.
Cómo es la recuperación de la cirugía de pie o tobillo por AR?
La recuperación de la cirugía del pie puede llevar bastante tiempo. Es posible que tenga que llevar un zapato especial o una escayola en el pie durante varios meses. Pueden pasar de 6 meses a un año antes de que vuelvas a realizar las actividades que hacías antes de la cirugía. Por ejemplo, no se puede ejercer ninguna presión sobre el pie durante al menos 6 semanas después de muchas cirugías de fusión.
Su equipo médico le ayudará a aprender a utilizar las muletas que necesitará después de la operación. Su médico le recetará los medicamentos para el dolor que sean necesarios. Siga al pie de la letra las indicaciones de su equipo médico sobre la medicación y los ejercicios de fisioterapia. Esto le ayudará a recuperarse rápidamente.
Es probable que tenga que mantener el pie elevado por encima del nivel del corazón al menos durante la primera semana después de la operación. Esto suele significar pasar mucho tiempo en el mismo sitio. Si es posible, es una buena idea tener a un amigo cercano o a un familiar cerca para que le ayude con las comidas y otras tareas diarias básicas.
Cuáles son los riesgos de la cirugía de pie o tobillo en la AR?
Todas las cirugías conllevan riesgos. La infección es uno de ellos. En los casos graves, puede necesitar antibióticos por vía intravenosa para tratar la infección.
También hay problemas potenciales específicos de este tipo de cirugías de pie o tobillo. Por ejemplo, una fusión puede no curarse y requerir medicación o más cirugía. O en algunos casos, los clavos, tornillos y placas que mantienen unida la articulación pueden aflojarse. Esto podría provocar otra lesión y probablemente necesitaría más cirugía para repararla.
En raras ocasiones, en casos muy graves, las complicaciones pueden llevar a la amputación de los dedos o los pies.