Los medicamentos pueden ayudar a la mayoría de los hombres con próstata agrandada, pero para algunos no siempre son suficientes para aliviar síntomas como el flujo de orina débil y el goteo.
Si usted es uno de esos hombres, tiene opciones quirúrgicas para tratar su hiperplasia prostática benigna o HPB.
5 preguntas que debe hacerse antes de la cirugía
Mientras piensa en las opciones de la cirugía, haga estas preguntas a su médico:
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Hay una buena probabilidad de que mi condición mejore?
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Cuánto mejorará?
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Qué posibilidades de efectos secundarios tiene un tratamiento?
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Cuánto durarán los efectos?
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Tendré que repetir este tratamiento?
Con las nuevas tecnologías, los médicos pueden realizar algunos procedimientos mínimamente invasivos con pequeños cortes (incisiones) o utilizar instrumentos tipo tubo que introducen en usted. Puede que estos procedimientos no traten los síntomas en el mismo grado o con la misma duración que las opciones quirúrgicas más invasivas, pero tienen recuperaciones más rápidas, menos dolor posterior y menos riesgos.
Otras veces, puede ser necesaria la cirugía tradicional y más invasiva. Todo depende de su caso y de lo que usted y su médico decidan que es lo mejor para usted.
Los médicos pueden elegir entre estos procedimientos mínimamente invasivos, endoscópicos o cirugías abiertas para tratar los síntomas moderados o graves. Estos procedimientos también se utilizan si las pruebas muestran que su capacidad para orinar está gravemente afectada.
Procedimientos mínimamente invasivos
Con las nuevas tecnologías, los médicos pueden utilizar procedimientos mínimamente invasivos con cortes diminutos (incisiones) o utilizar instrumentos tipo tubo que introducen en la uretra. Alivian los síntomas de la HBP mejor que los medicamentos. Otras ventajas son una recuperación más rápida y menos dolor que con la cirugía tradicional abierta y menos riesgos. Estos procedimientos no implican la extirpación ni el corte de la próstata. Su médico tendrá en cuenta el tamaño de su próstata y su estado de salud general para determinar si la cirugía mínimamente invasiva es adecuada para usted.
Algunos de los tipos de cirugía mínimamente invasiva son:
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Terapia de vapor de agua Rezm: se introduce un dispositivo en la uretra, el conducto de la orina, y una pequeña aguja suministra vapor de agua para tratar el exceso de tejido prostático. Suele realizarse en la consulta del médico.
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Terapia transuretral por microondas (TUMT). Este procedimiento no invasivo utiliza una antena de microondas unida a un tubo flexible que el médico introduce en la vejiga. El calor de las microondas elimina el exceso de tejido prostático.
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Sistema UroLift: se trata de un dispositivo colocado de forma permanente para levantar y mantener el tejido prostático agrandado fuera del camino, de modo que ya no bloquee la uretra. Suele realizarse con anestesia local o general en la consulta del médico, en un centro de cirugía ambulatoria o en un quirófano. Los pacientes suelen volver a casa el mismo día sin sonda.
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Ablación transuretral con aguja (TUNA). Este procedimiento ya no se recomienda para el tratamiento de la HBP. Se trata de un procedimiento realizado en el consultorio en el que el médico introduce una aguja calentada en la próstata a través de la uretra, el conducto que transporta la orina y el semen a través del pene. La aguja calentada utiliza ondas de radiofrecuencia para calentar y destruir el exceso de células en la glándula prostática.
Las cirugías mínimamente invasivas... realizadas con anestesia general incluyen:
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Resección transuretral de la próstata (RTUP): es la cirugía más habitual para tratar la HBP. El médico extirpa las partes de la próstata que afectan al flujo de orina. No se producen cortes ni se ven cicatrices externas, ya que se introduce un endoscopio a través de la uretra para eliminar el exceso de tejido. Con la RTUP, algunos hombres pueden sufrir lo que se denomina eyaculación retrógrada (eyaculación del semen en la vejiga en lugar de a través de la uretra).
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Incisión transuretral de la próstata (TUIP)... Esta cirugía no implica la extracción de tejido prostático. Se realizan unos pequeños cortes en la próstata para reducir la presión de la glándula sobre la uretra, facilitando la micción. Este procedimiento es una opción para algunos hombres, como los que tienen próstatas más pequeñas. Con la TUIP, el riesgo de eyaculación retrógrada es mucho menor que con la TURP. Sin embargo, suele proporcionar un alivio de los síntomas igual al de la RTUP. Hay un posible inconveniente: Algunos hombres necesitan repetir la TUIP. Los médicos deciden cuál utilizar basándose principalmente en el tamaño de la próstata.
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Cirugía láser: el médico utiliza energía láser para eliminar el tejido de la próstata y reducir el tamaño de la glándula. Esto puede no ser tan eficaz en próstatas más grandes. Los procedimientos con láser suelen aliviar los síntomas y mejorar el flujo urinario de forma similar a la RTUP. Sin embargo, algunas terapias con láser producen menos efectos secundarios que otras y también reducen el riesgo de hemorragia. Se necesitan estudios a largo plazo para averiguar si los tratamientos con láser son tan eficaces como la RTUP.
Cirugía invasiva
Puede ser necesaria una cirugía más invasiva. Usted y su médico decidirán qué es mejor para usted. Los médicos suelen considerar que la cirugía invasiva es la mejor solución a largo plazo para aliviar los molestos síntomas urinarios. La mayoría de ellas consisten en extirpar la parte agrandada de la próstata. La cirugía suele recomendarse en el tratamiento de los síntomas moderados o graves de la HBP en estas condiciones:
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No puede orinar en absoluto.
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Los cambios en el estilo de vida, los medicamentos o los tratamientos mínimamente invasivos no le han funcionado.
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Encuentras sangre en la orina que no mejora.
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Tienes piedras en la vejiga.
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Tienes muchas infecciones del tracto urinario.
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Tienes daños en los riñones.
Tipos de cirugía
Los tipos de cirugías que podría hablar con su médico podrían incluir:
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Prostatectomía abierta: el médico suele realizarla cuando la próstata está muy agrandada, cuando hay complicaciones o cuando la vejiga está dañada y hay que repararla. En la cirugía abierta, el cirujano realiza un corte y extrae el tejido agrandado de la próstata.
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Prostatectomía laparoscópica y robótica: la cirugía laparoscópica o robótica se diferencia de la cirugía abierta tradicional por la realización de cuatro pequeñas incisiones en lugar de una grande para llevar a cabo la cirugía de extracción del tejido agrandado de la próstata.
Otras cosas a tener en cuenta
Antes de someterse a uno de estos procedimientos, hable con su médico sobre si le darán algo para adormecer la zona (anestesia local) o si le darán algo para que no esté despierto (anestesia general) durante el procedimiento. Lo que se le administre y el lugar donde se le aplique dependerá del procedimiento.
Su médico le dará instrucciones sobre cómo prepararse para cualquiera de ellas.
La cirugía puede aliviar muchos de los síntomas de la HBP, pero es posible que no los alivie todos. Si existen ciertas complicaciones, como la debilidad de la vejiga, pueden seguir existiendo problemas urinarios después de la cirugía, aunque esto es poco frecuente.
Con cualquier cirugía de HBP, puede haber efectos secundarios o complicaciones como hemorragias, estrechamiento del conducto de la orina también conocido como estenosis uretral, incontinencia o pérdidas de orina, disfunción eréctil y eyaculación retrógrada.
El mejor tratamiento para el agrandamiento de la próstata no es el mismo para todos los hombres. Hable con su médico sobre los riesgos y beneficios de cada procedimiento.
