A veces a tu bebé le salen ampollas en los labios. Esto puede deberse a cosas sencillas, como aprender a dar el pecho, o puede ser un signo de infección. Hay cosas que puedes hacer para asegurarte de que tu bebé esté cómodo y se cure.
Causas de las ampollas en el labio del bebé
Una ampolla es un bulto elevado en la piel que está lleno de líquido. La piel es sensible y puede doler si se presiona o se rompe, lo que puede hacer que tu bebé esté de mal humor.
Los bebés pueden tener ampollas de lactancia en el interior de los labios. La acción de succión puede causar un callo en la piel. A veces los bebés nacen con estas ampollas si se han chupado los dedos en el útero.
El herpes labial provoca ampollas en los labios. El herpes labial, a veces llamado ampolla de fiebre, puede aparecer en el labio del bebé y está causado por el virus del Herpes simplex 1. Si tienes una llaga activa, debes mantenerla cubierta y no besar a tu bebé, ya que puedes transmitirle el virus. Una infección por herpes puede ser muy peligrosa para los recién nacidos.
Las ampollas pueden ser a veces una reacción alérgica. Tu bebé podría ser alérgico a los ingredientes de las lociones, cremas o bálsamos labiales utilizados en los labios o cerca de ellos. Si a tu bebé le salen ampollas después de introducir un alimento, podría tener una alergia alimentaria.
El impétigo es una infección causada por la bacteria Staphylococcus o Streptococcus que provoca ampollas en el labio y alrededor de la boca. Pueden reventar y perder líquido, y luego se forma una costra encima. También pueden parecer ampollas más grandes y transparentes llenas de líquido que no se revientan.
La candidiasis oral provoca ampollas blancas en los labios del bebé. Las manchas blancas también se encuentran dentro de la boca, en la lengua, las mejillas y el paladar. Tienen el aspecto de requesón o leche y pueden hacer que duela chupar o tragar. La causa es un crecimiento excesivo de levaduras.
Señales de ampollas en los labios de tu bebé
Una ampolla es un bulto elevado en la piel lleno de líquido claro. Puede romperse y gotear, y la piel puede doler. Esto puede hacer que tu bebé tenga problemas para comer o esté de mal humor porque le duele...
Sin embargo, si las ampollas están causadas por el aprendizaje de la lactancia o por la succión, es posible que no haya ningún otro síntoma.
Si las ampollas de tu bebé están causadas por una infección, es posible que tenga otros síntomas. Estos incluyen:
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Fiebre
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Dolor
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Cansancio
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Salida de líquido maloliente de la ampolla
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Manchas blancas o ampolla blanca
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Piel con costra
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Hinchazón
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Dolor
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Ampollas que se extienden
Tratamiento para las ampollas en los labios de tu bebé
El tratamiento de las ampollas de tu bebé depende de la causa. Las ampollas de la lactancia o de la succión desaparecen por sí solas y no necesitan tratamiento.
Debes seguir alimentando a tu bebé como siempre y hablar con un asesor de lactancia que te ayude a conseguir un buen agarre. Cuando tu bebé se acostumbre al movimiento de succión, las ampollas desaparecerán. A veces esto puede tardar unos meses.
Una vez que tu bebé tenga el virus, las ampollas del herpes labial aparecerán y desaparecerán a medida que crezca. El herpes labial no tiene cura. Puedes ayudar a tu bebé protegiendo su piel con loción, protector solar y bálsamo labial antes de salir a la calle. Algunos tratamientos pueden ayudar a que tu bebé se sienta mejor mientras tiene un herpes labial activo.
Estos incluyen:
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Una toallita fría o tibia para aliviar el dolor
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Alimentación regular para mantenerse hidratado
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Evitar los alimentos ácidos, como los cítricos y los tomates, si el bebé consume alimentos
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Analgésicos
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Bálsamos o cremas labiales de venta libre contra el herpes labial para niños
Si tu bebé tiene impétigo, el médico le dará una crema antibiótica para tratar la infección. Si la infección está también alrededor de la boca, el médico puede sugerirte que utilices un vendaje para evitar que las bacterias se propaguen.
La candidiasis bucal puede tratarse con un medicamento antimicótico que se pinta en la lengua y los labios del bebé. Si das el pecho a tu bebé y tienes los pezones doloridos y enrojecidos, es posible que también tengas aftas. La infección puede transmitirse entre tú y tu bebé, por lo que también deberás ponerte el medicamento en los pezones. Si tu bebé tiene edad suficiente, también puedes darle yogur probiótico. Es posible que tengas que esterilizar los chupetes, los juguetes de dentición y los biberones.
En general, si tu bebé tiene ampollas en los labios, asegúrate de:
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Mantener la piel limpia y seca
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Seguir alimentándolos como de costumbre
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Dales mucho líquido
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Vigila los cambios en las ampollas y cómo se siente tu bebé
Cuando las ampollas son una emergencia
A veces las ampollas en los labios de tu bebé pueden ser un signo de algo más serio. Acude al médico si tu bebé tiene ampollas y los siguientes síntomas:
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Deja de tomar el pecho, de alimentarse o de beber líquidos
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Tiene llagas cerca de los ojos
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Piel roja, caliente e hinchada
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Convulsiones
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Fiebre alta
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Llagas que se extienden
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Problemas para respirar
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Respiración rápida
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Gruñidos
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Piel azul
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Períodos cortos de ausencia de respiración
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Coloración amarillenta de la piel o de los ojos
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Sangrado
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Erupción
