Los bebés dependen de la leche materna o de la leche de fórmula para alimentarse durante los primeros cuatro o seis meses de vida. Cada bebé es diferente, por lo que hay muchas opciones disponibles para las madres preocupadas. Independientemente del tipo de leche de fórmula que elijas, debe estar enriquecida con hierro para proporcionar a tu bebé la cantidad recomendada de ese nutriente cada día. Es probable que tu bebé consuma 24 onzas al día cuando cumpla un mes...
A base de leche de vaca. Los preparados a base de leche de vaca utilizan leche tratada con calor y otros métodos que hacen que las proteínas de la leche sean seguras para el consumo de los bebés. Los preparados para bebés elaborados con leche de vaca están enriquecidos con hierro y una cantidad de lactosa equivalente a la que se encuentra de forma natural en la leche materna. La grasa de mantequilla se elimina de la leche de vaca y se sustituye por aceites o grasas más fáciles de digerir.
Ampliamente hidrolizada. Una fórmula ampliamente hidrolizada es aquella en la que las proteínas se han descompuesto en componentes más pequeños que son más fáciles de manejar para el sistema digestivo del bebé. Este tipo de fórmula también se conoce como predigerida. Los bebés con alergias u otros problemas de salud suelen beneficiarse de una fórmula muy hidrolizada. Los padres pueden pedir recomendaciones a un pediatra si los problemas de salud de sus bebés interfieren con su capacidad de consumir otros tipos de fórmula.
Soja. La leche de fórmula de soja contiene una combinación de proteínas e hidratos de carbono diferente a la de la leche de fórmula. El médico puede recomendar que se le dé al bebé una fórmula infantil a base de soja si es intolerante a la lactosa. Los bebés que tienen problemas con los preparados para bebés a base de leche de vaca suelen tener más facilidad con los preparados para bebés a base de soja.
Fórmulas especializadas. Los bebés que nacen con enfermedades cardíacas u otros problemas médicos pueden beneficiarse de los preparados para bebés elaborados teniendo en cuenta su condición.
Los preparados para bebés se suelen encontrar en las siguientes formas:?
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En polvo. La fórmula en polvo suele venir en un recipiente con una cuchara. Se mide la cantidad correcta de fórmula para bebés en un biberón, se añade agua y se agita hasta que el polvo se disuelve y crea un líquido lechoso...
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Concentrado líquido. La fórmula líquida concentrada funciona de forma similar a la fórmula en polvo. Se mide la cantidad correcta de concentrado y agua antes de mezclar. El costo de la fórmula líquida concentrada para bebés tiende a ser más alto que lo que pagas por la fórmula en polvo?
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Listo para la alimentación. Las fórmulas listas para la alimentación no necesitan ser medidas ni mezcladas. Puedes encontrar estas fórmulas en envases de varios tamaños. Por lo general, pueden conservarse a temperatura ambiente y luego refrigerarse hasta 48 horas después de abrirlos. Esa comodidad suele tener un coste más elevado?
Consejos para elegir una leche de fórmula para bebés
Todas las fórmulas comerciales para bebés reciben la supervisión de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) para garantizar que cumplen los requisitos nutricionales y las normas de seguridad establecidas. Para cualquier fórmula que compres, asegúrate de que no haya pasado la fecha de caducidad y que el envase no tenga fugas y esté, por lo demás, en buen estado...
La Academia Americana de Pediatría (AAP) y la FDA desaconsejan dar a los bebés leche de fórmula casera, ya que podría provocar problemas de salud en el bebé. Es posible que la fórmula casera no contenga el equilibrio adecuado de nutrientes, vitaminas y minerales para mantener al bebé.
También hay que tener cuidado al comprar preparados para bebés fabricados en el extranjero. Aunque puede ser tentador comprar un producto de otro país que promete ingredientes totalmente naturales u orgánicos, no hay pruebas de que esos productos sean mejores para los bebés. Una leche de fórmula importada ilegalmente que no haya sido enviada o almacenada en condiciones ideales podría acabar perjudicando a tu bebé. ?
Mezcla la leche de fórmula sólo con agua obtenida de una fuente segura. Si te preocupa la procedencia del agua, hiérvela durante un minuto y espera a que vuelva a la temperatura ambiente (no más de 30 minutos). Para asegurarte de que el agua no está demasiado caliente para tu bebé, puedes probar unas gotas en el interior de tu muñeca. Después de este proceso, el agua debería ser segura para su uso en la fórmula del bebé.
La mayoría de los bebés pueden empezar a tomar leche de vaca enriquecida a partir de los 12 meses. Evita dar a los bebés menores de 12 meses cualquier bebida destinada a los niños pequeños, y en su lugar sigue dándoles leche de fórmula infantil para asegurarte de que tienen todas sus necesidades nutricionales cubiertas. ?
