Hipotonía es un término médico que designa el bajo tono muscular. Si su bebé tiene hipotonía, es probable que se sienta flácido en sus brazos, como un muñeco de trapo. Por eso se le llama también síndrome del bebé flácido.
Los médicos pueden diagnosticar esta enfermedad en los primeros minutos de vida. Realizan controles rutinarios del tono muscular de los recién nacidos al minuto y a los 5 minutos de nacer. A veces la hipotonía aparece un poco más tarde, pero suele ser perceptible a los 6 meses de edad.
Un tono muscular deficiente suele indicar un problema en el cerebro, la médula espinal, los nervios o los músculos. Pero la fisioterapia y otros tratamientos pueden ayudar a tu hijo a desarrollar músculos más fuertes y una mejor coordinación.
Síntomas
La mayoría de los bebés llegan al mundo con un buen tono muscular. Esto les permite flexionar y agitar sus pequeñas extremidades. Los recién nacidos con hipotonía no tienen movimientos fuertes de brazos y piernas.
A medida que crecen, los bebés con hipotonía no alcanzan hitos importantes, como ser capaces de levantar la cabeza cuando están boca abajo. Otros síntomas comunes son:
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Mal control de la cabeza. Cuando tu bebé no puede controlar los músculos del cuello, su cabeza caerá hacia delante, hacia atrás o hacia un lado.
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Sentirse flácido, sobre todo al levantarlos. Si los levantas con las manos por debajo de las axilas, sus brazos pueden levantarse sin resistencia, como si pudieran deslizarse entre tus manos.
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Los brazos y las piernas cuelgan rectos. Los bebés suelen descansar con los brazos y las piernas flexionados: hay una ligera flexión en los codos, las caderas y las rodillas. Pero los niños con hipotonía no lo hacen.
A veces, esta afección puede causar problemas de succión y deglución. Además, las articulaciones del niño pueden ser extremadamente flexibles, como si tuvieran doble articulación.
Muchas causas
El síndrome del bebé flácido puede ocurrir sin una razón clara, lo que los médicos llaman hipotonía congénita benigna. Pero lo más frecuente es que esté relacionado con otro problema de salud. Hay muchas causas. Algunas son:
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Daño cerebral por falta de oxígeno justo antes o después del nacimiento
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Problemas con la forma en que se formó el cerebro en el útero
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Trastornos que afectan a los nervios
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Acondroplasia
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Lesión de la médula espinal
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Parálisis cerebral
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Infecciones graves
La hipotonía no siempre es un signo de un problema grave. Cuando los bebés nacen demasiado pronto, pueden tener un tono muscular deficiente porque su cuerpo no ha tenido tiempo suficiente para desarrollarse adecuadamente. En este caso, las cosas deberían mejorar mucho con el paso de las semanas y los meses. Sólo tienes que asegurarte de que tu bebé cumple los hitos y recibe el tratamiento que necesita.
Cómo obtener el diagnóstico correcto
Como hay muchas cosas que pueden causar hipotonía, puede llevar algún tiempo averiguar lo que hay detrás de la enfermedad de su hijo. El médico querrá conocer los antecedentes médicos y genéticos de su familia y le hará un examen físico a su bebé. Es posible que compruebe su:
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Habilidades motrices
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Habilidades sensoriales
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Equilibrio
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Coordinación
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Estado mental
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Reflejos
El médico también puede pedir varias pruebas, como:
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TAC o resonancia magnética del cerebro.
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Análisis de sangre
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Electromiografía (EMG) para medir el funcionamiento de los nervios y los músculos
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Electroencefalograma (EEG) para medir la actividad eléctrica del cerebro
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Punción lumbar, que puede medir la presión dentro de la columna vertebral y permitir al médico obtener una muestra del líquido que rodea la médula espinal para su análisis
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Biopsia muscular, en la que el médico obtiene una muestra del tejido muscular de su hijo para estudiarlo al microscopio
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Pruebas genéticas
El médico también querrá saber si hubo algún problema antes de que el bebé naciera o durante el parto.
Tratamientos
Una vez que el médico averigüe la causa de la hipotonía de tu hijo, intentará tratar esa afección en primer lugar. Por ejemplo, puede recetar un medicamento para tratar una infección que haya causado sus problemas musculares. Pero a veces no hay cura para el problema que causa la hipotonía. Si la causa de la hipotonía es una enfermedad hereditaria, el niño la padecerá de por vida.
Independientemente de la causa de la hipotonía, su hijo puede recibir terapia para fortalecer sus músculos y mejorar la coordinación. Hay muchas opciones, incluyendo:
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Programas de estimulación sensorial: Estos ayudan a los bebés y niños pequeños a responder a la vista, el sonido, el tacto, el olor y el gusto.
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Terapia ocupacional: Esto ayudará a tu hijo a conseguir habilidades motoras finas, que son (o serán) esenciales para las tareas diarias.
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Fisioterapia: Al igual que la terapia ocupacional, puede ayudar a tu hijo a conseguir un mayor control de sus movimientos. También puede mejorar la fuerza y el tono muscular con el tiempo?
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Terapia del habla y del lenguaje: Ayuda con los problemas para respirar, hablar y tragar.
Un niño con hipotonía congénita benigna puede no necesitar ningún tipo de terapia, aunque es posible que tenga que acudir al médico por problemas relacionados, como la dislocación de las articulaciones...