Seguro que has oído alguna historia al respecto: una mujer que no sabía que estaba embarazada hasta que se puso de parto. ¿Qué es lo primero que piensas? ¿Cómo es posible no saber que llevas un bebé? No es imposible, dice el doctor Michael Cackovic, ginecólogo y obstetra del Centro Médico Wexner de la Universidad Estatal de Ohio. Hay mujeres que no mantienen relaciones sexuales de forma habitual, no tienen menstruaciones de forma habitual y no acuden al médico con regularidad, dice. En esas circunstancias, es posible que no se den cuenta de que están embarazadas.
Otras mujeres tienen problemas de salud mental que les impiden reconocer o aceptar que van a tener un bebé.
Algunos estudios han calculado que una de cada 400 o 500 mujeres lleva 20 semanas, o unos 5 meses, de embarazo antes de darse cuenta de que está embarazada...
Una de cada 2.500 mujeres llega hasta el parto antes de comprender que va a tener un bebé. Eso es tres veces más frecuente que la posibilidad de que una mujer tenga trillizos.
Cómo se produce
Hay varias cosas que pueden hacer que una mujer no note los cambios en su cuerpo:
El miedo o el estrés. La idea de ser madre es tan estresante para algunas mujeres que entran en una profunda negación, tan profunda que no saben que están embarazadas. La negación es un mecanismo de defensa muy poderoso, que hace posible que te convenzas a ti misma de todos los síntomas que puedas tener. Por ejemplo, el movimiento del abdomen es sólo gas, dice Cackovic.
Por ejemplo, una adolescente puede negar o ignorar un embarazo porque no quiere que sus padres sepan que ha tenido relaciones sexuales. Una mujer casada puede hacer lo mismo porque se ha quedado embarazada de alguien que no es su pareja. Algunas mujeres pueden negar un embarazo debido a un problema de salud mental, como el trastorno bipolar o la esquizofrenia.
No hay síntomas. Algunas mujeres no presentan los síntomas físicos del embarazo, como aumento de peso, náuseas matutinas, ardor de estómago o fatiga. O son tan leves que la mujer no los nota. Según el tipo de cuerpo, es razonable que una mujer llegue a las 30 semanas sin parecer embarazada, dice Cackovic.
Cambios de peso. Si una mujer tiene sobrepeso o su talla sube y baja con frecuencia, es posible que no note el peso extra del bebé. Si es obesa, dice Cackovic, es posible que no tenga la sensación física de estar embarazada que sienten las mujeres no obesas.
Problemas de menstruación. Una mujer puede tener periodos irregulares debido al estrés, a algunos medicamentos (como las píldoras anticonceptivas o los fármacos para la epilepsia), a la obesidad o a problemas de salud como el síndrome de ovario poliquístico (SOP), la diabetes no controlada o un trastorno alimentario. Por eso, cuando no les viene la regla, lo primero que piensan es que no están embarazadas.
No pueden sentir el movimiento del bebé. Por lo general, la futura madre empezará a sentir que el bebé da patadas o se mueve entre las semanas 18 y 20 de embarazo. Pero si la placenta se encuentra en la parte delantera del útero, es posible que no sienta esos movimientos, dice Cackovic.
Las investigaciones sugieren que una mujer bien adaptada puede tener un embarazo negado y seguir siendo una buena madre, sobre todo si es capaz de asumir el hecho de que va a tener un bebé, dice Cackovic. Por ejemplo, algunas mujeres lo entienden y aceptan cuando ven una imagen de su hijo en la ecografía. Pero los médicos suelen recomendar una evaluación de salud mental para averiguar qué les hizo negar su embarazo. También es un paso importante para prevenir el abuso y la negligencia infantil, que son más frecuentes tras los embarazos negados que los normales.
Por qué es importante
Las mujeres pueden dar a luz, y de hecho lo hacen, a bebés sanos tras un embarazo negado, afirma Cackovic. Pero no saber que se está embarazada tiene sus riesgos:
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Podrías perderte los cuidados prenatales que pueden garantizar tu salud y la de tu bebé, como los exámenes físicos, los análisis de sangre y las ecografías.
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No conocerás tu riesgo o el de tu bebé de sufrir complicaciones, como anemia, un tipo de hipertensión arterial llamado preeclampsia, diabetes gestacional o defectos de nacimiento.
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No sabrás que ha llegado el momento de hacer cambios saludables que ayuden a tu bebé a crecer y desarrollarse, como alimentarse bien, evitar el alcohol y dejar de tomar ciertos medicamentos.
Conozca los primeros signos
Es difícil predecir quién puede tener un embarazo negado. Pero si crees que puedes pasar por alto algunos de los signos clásicos, como el aumento de peso o la ausencia de la regla, puedes estar atenta a otras señales tempranas, como:
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Pechos sensibles e hinchados
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Orinar con más frecuencia
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Sentirse muy cansado
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Náuseas, a veces con vómitos
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No soportar ciertos alimentos u olores
