Cuál es el tratamiento del embarazo ectópico?
Un embarazo ectópico se produce cuando un óvulo fecundado se implanta fuera del útero. También se denominan embarazos tubáricos porque la mayoría de ellos se producen en las trompas de Falopio. Tanto si hay un problema con el óvulo como con la trompa, el óvulo se queda atascado en su camino hacia el útero.
Un embarazo no puede sobrevivir fuera del útero, por lo que todos los embarazos ectópicos deben terminar. Antes, alrededor del 90% de las mujeres con embarazos ectópicos tenían que ser operadas. Hoy en día, el número de cirugías es mucho menor, y muchos más embarazos ectópicos se tratan con medicación que impide que progresen.
Si se le diagnostica un embarazo ectópico, el tratamiento que le dé su médico dependerá del grado de avance del embarazo, de la ubicación del embrión y de la gravedad de sus síntomas.
Medicación
Un embarazo ectópico temprano puede tratarse con medicamentos. Si tienes niveles bajos de hCG (una hormona que tu cuerpo produce cuando estás embarazada y no hay daños en la trompa de Falopio), tu médico puede darte una inyección de un medicamento llamado metotrexato (Trexall).
El metotrexato detiene el crecimiento de las células y permite a tu cuerpo absorber el embarazo.
Pero el fármaco tiene algunos efectos secundarios, como náuseas, vómitos, mareos, diarrea y estomatitis (úlceras en la boca y los labios). Y la mayoría de las mujeres tienen dolor abdominal un par de días después de la inyección.
Las mujeres solían permanecer en el hospital para recibir una serie de inyecciones de metotrexato. Ahora es un procedimiento ambulatorio, pero tu médico controlará de cerca tus niveles de hCG durante las semanas posteriores para asegurarse de que vuelvan a cero.
Una inyección podría ser suficiente, pero si las cifras no bajan como deberían, es posible que haya que poner más inyecciones.
Cirugía
Si el tratamiento con metotrexato no funciona, el siguiente paso es la cirugía. También es la única opción para las mujeres con niveles altos de hCG, síntomas graves y trompas de Falopio rotas o dañadas.
Es posible que se le practique una cirugía laparoscópica que implica un corte muy pequeño y una cámara diminuta. Los cirujanos prefieren utilizar este método en lugar de realizar la cirugía con un corte más grande. Pero a veces eso no es posible, sobre todo si se trata de una operación de urgencia. Si la trompa se ha roto o está muy dañada, es posible que los cirujanos tengan que extirpar la trompa de Falopio. A veces, la trompa puede salvarse si el daño es mínimo. Después de la operación, los médicos vigilarán tus niveles de hCG para asegurarse de que bajan y de que el embarazo se ha eliminado correctamente. Algunas mujeres también necesitan una inyección de metotrexato para que todo vuelva a la normalidad.