Una parte importante de la gestión del Parkinson es el cuidado de la salud mental. Más de dos tercios de las personas con esta enfermedad tienen ansiedad, depresión, alucinaciones, delirios o problemas de comportamiento. Con el tratamiento adecuado, puede mantener a raya estos problemas.
Si tienes ansiedad, depresión, alucinaciones, delirios u otros problemas de salud mental, no te lo guardes para ti. Habla con tu médico. Puede que le sugiera una combinación de asesoramiento, medicación y cambios en el estilo de vida.
Encontrar un terapeuta
Hay diferentes tipos de profesionales de la salud mental que pueden ayudarte.
Un psiquiatra es un médico que puede recetar medicamentos. Algunos psiquiatras, pero no todos, también hacen psicoterapia, lo que puedes oír llamar terapia de conversación.
Los trabajadores sociales, los consejeros profesionales autorizados y los psicólogos ofrecen psicoterapia, pero no recetan medicamentos.
Los neuropsicólogos, los neuropsiquiatras y los psicólogos sanitarios están especializados en cuestiones relacionadas con la salud.
Puedes optar por un equipo de médicos, como un psicoterapeuta y un psiquiatra.
Para encontrar un terapeuta, pregunte a su médico, a un ser querido o a alguien que viva con Parkinson si hay alguien que pueda recomendarle. Si forma parte de un grupo de apoyo, pida consejo a sus miembros. También puede consultar a su compañía de seguros y obtener una lista de médicos.
Algunos terapeutas ofrecen una reunión telefónica o una cita introductoria antes de empezar la terapia. Es una oportunidad para saber si te sientes cómodo con ellos antes de empezar el tratamiento. Si no te llevas bien con el primer terapeuta con el que hables, sigue buscando hasta que encuentres a alguien que se adapte mejor.
Cómo funciona la terapia
Un terapeuta puede enseñarle a manejar sus miedos, pensamientos y sentimientos sobre la vida con Parkinson. Puede ayudarle a resolver los problemas con los que está luchando y a mejorar su calidad de vida.
Muchos terapeutas utilizan la terapia cognitivo-conductual (TCC), una forma de ayudarle a reconocer y reformular su pensamiento para manejar mejor la vida con la enfermedad y aliviar sus síntomas. Otros tipos de terapia son la terapia interpersonal, que explora tus relaciones con otras personas y contigo mismo, y la terapia de apoyo, en la que el terapeuta desempeña un papel de apoyo y estímulo en tu vida.
Puede hacer terapia individual, de grupo o ambas. El terapeuta puede sugerirle que traiga a su pareja o cónyuge de vez en cuando.
Cuando se reúna por primera vez con el terapeuta, lleve una lista de sus medicamentos. Piense en llevar a un amigo o a un ser querido para que comparta sus ideas. Pida a su terapeuta y a su neurólogo que hablen entre ellos para tener un enfoque equilibrado de su salud.
Tomar la medicación
Su médico o psiquiatra puede sugerirle antidepresivos, ansiolíticos o cambios en su actual medicación para el Parkinson.
Cada persona es diferente, y encontrar la mezcla y las dosis adecuadas de medicación es un proceso que lleva tiempo. Es posible que tengas que probar diferentes medicamentos y dosis antes de encontrar el adecuado. Tenga paciencia. Pueden pasar semanas o meses antes de que un medicamento empiece a funcionar.
El médico puede sugerir la medicación y la psicoterapia. Las investigaciones demuestran que funciona mejor que la medicación sola... Obtenga más información sobre las opciones de tratamiento, así como sobre los requisitos para la discapacidad con la enfermedad de Parkinson.
Una sólida red de amigos, familiares y profesionales de la salud es clave para controlar su salud mental.
Puede que evites las situaciones sociales porque te preocupa que la gente te mire y se dé cuenta de tus síntomas. Pero esto suele ser contraproducente. Retirarse de las situaciones sociales puede hacer que te sientas peor y provocar una depresión.
Intente ser activo. Manténgase en contacto con sus amigos y familiares. Participe en organizaciones, clubes, equipos o grupos religiosos de su zona. Formar parte de una comunidad te ayuda a tener una sensación de normalidad y a ver tu vida como algo más que Parkinsons.
Grupos de apoyo
Considere la posibilidad de unirse a un grupo de apoyo, donde podrá conectarse con otras personas en una situación similar, aprender a vivir con Parkinsons, compartir puntos de vista, ser social y sentirse comprendido y menos aislado.
Para encontrar un grupo de apoyo cercano, hable con su neurólogo o con un miembro de su personal. Los hospitales locales pueden tener listas de grupos cercanos. Su periódico puede incluir una lista de grupos de apoyo en su zona. Llame a la línea de ayuda de la Fundación Parkinsons al 800-4PD-INFO (800-473-4636). Visite los sitios web de organizaciones como la Parkinsons Foundation y la American Parkinson Disease Association, donde puede buscar grupos en su zona.
También puede unirse a un grupo de apoyo en línea. Muchos sitios web, grupos y foros sobre el Parkinson tienen lugares en los que puedes conectar con otras personas y compartir información e inspiración. Busque grupos en los sitios web de las fundaciones de Parkinson nacionales o locales, en plataformas de redes sociales como Facebook o pida sugerencias a su médico.
Puedes elegir entre grupos pequeños, grupos grandes, grupos informales o reuniones formales. Sigue buscando hasta que encuentres uno que sea adecuado para ti, o considera la posibilidad de crear tu propio grupo.
Cambios en el estilo de vida
Tomar decisiones saludables puede ayudarte a controlar tu salud mental. Haz ejercicio con regularidad. Sigue una dieta saludable. Asegúrate de que duermes lo suficiente. Encuentra tiempo para relajarte y hacer las cosas que te gustan, como leer o escuchar música. Pruebe las técnicas de relajación, la aromaterapia, la meditación o los masajes.