Cómo se diagnostica el cáncer de páncreas?
Para diagnosticar el cáncer de páncreas, el médico solicitará determinadas pruebas de imagen, como una ecografía pancreática o una tomografía computarizada del abdomen. La ecografía endoscópica (EUS) utiliza un dispositivo de ultrasonidos conectado al extremo de un pequeño tubo flexible que se introduce en la boca y tiene una precisión de entre el 85% y el 90% para diagnosticar el cáncer de páncreas. Si es necesario, se utiliza la colangiopancreatografía retrógrada endoscópica (CPRE). Con la CPRE, se obtienen imágenes detalladas introduciendo un endoscopio en la boca hasta el páncreas, inyectando un tinte y tomando luego radiografías. También se puede extraer una muestra de tejido para una biopsia a través del endoscopio. Si la biopsia confirma la presencia de cáncer, se realizan más pruebas para determinar el grado de avance de la enfermedad. Puede utilizarse una laparoscopia. En esta técnica, se introduce en la cavidad abdominal un pequeño tubo con una pequeña cámara de vídeo y una fuente de luz. Así se puede ver el tumor. En ocasiones, es necesario realizar una cirugía exploratoria. El cirujano puede entonces estudiar directamente el tumor, determinar si los ganglios linfáticos cercanos son cancerosos y tomar muestras de tejido para examinarlas al microscopio.
Cuáles son los tratamientos para el cáncer de páncreas?
El cáncer de páncreas es muy difícil de controlar. Pero si se detecta a tiempo y el cáncer no se ha extendido más allá del páncreas, puede tratarse con cirugía. Esto ofrece el mejor resultado para el cáncer de páncreas. La cirugía se denomina "procedimiento de Whipple", o pancreaticoduodenectomía, y lleva el nombre del Dr. George Hoyt Whipple, el cirujano que fue pionero. Si es posible, el cirujano extirpa el tumor maligno, dejando la mayor parte posible del páncreas normal para permitir que continúe la función pancreática. Con menos frecuencia, hay que extirpar todo el páncreas. Si un paciente se somete a una pancreatectomía total, debe administrarse un régimen de enzimas y hormonas de sustitución, incluida la insulina, de por vida.
Por desgracia, los cánceres de páncreas presentan síntomas sutiles y vagos. Por ello, la enfermedad suele diagnosticarse cuando ya ha avanzado y se ha extendido. Sin embargo, incluso en estadios más avanzados, el tratamiento puede mejorar la calidad de vida al controlar los incómodos síntomas y las complicaciones de la enfermedad.
Según el tipo y el estadio del cáncer de páncreas, los pacientes pueden recibir tratamientos de quimioterapia solos o en combinación con la radiación. Tanto si el tumor se ha extirpado quirúrgicamente como si se ha extendido a los ganglios linfáticos, estas terapias pueden administrarse después de la intervención quirúrgica en un esfuerzo por prolongar el tiempo de supervivencia. Estos tratamientos también pueden administrarse antes de la cirugía para reducir el tamaño del tumor y hacer posible la realización de la cirugía o utilizarse como medio para aliviar los síntomas, como el dolor. Los medicamentos recetados, generalmente narcóticos, se administran para ayudar a controlar el dolor asociado al cáncer de páncreas avanzado.
Cómo puedo prevenir el cáncer de páncreas?
El cáncer de páncreas no es fácil de prevenir, pero puede tomar medidas para reducir su riesgo. Si trabaja cerca de ciertos productos químicos, tintes o pesticidas que se sabe que aumentan el riesgo de cáncer de páncreas, tome precauciones para evitar la exposición innecesaria a ambos materiales y a los gases. El consumo de cigarrillos duplica el riesgo de cáncer de páncreas en comparación con los no fumadores. Así que si fuma, déjelo ya.
