Algunos expertos creen que la dieta y la nutrición pueden tener un impacto directo en los síntomas del TDAH. Aprende más sobre qué alimentos debes consumir más, y cuáles debes evitar.
Entonces, ¿hay ciertas cosas que no deberías comer si tienes la enfermedad? O si su hijo la padece, ¿debe cambiar lo que come?
A continuación encontrará las respuestas a las preguntas sobre las dietas de eliminación, los suplementos y los alimentos que pueden aliviar los síntomas del trastorno. Pero recuerde que debe consultar a su médico para asegurarse de que estos alimentos y dietas no afectan a su medicamento o a la forma en que se absorbe.
Qué es una dieta para el TDAH?
Puede incluir los alimentos que comes y los suplementos nutricionales que puedas tomar. Lo ideal es que tus hábitos alimenticios ayuden a que el cerebro funcione mejor y disminuya los síntomas, como la inquietud o la falta de concentración. Es posible que oiga hablar de estas opciones en las que podría centrarse:
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Nutrición general: Se parte de la base de que algunos alimentos que consumes pueden mejorar o empeorar tus síntomas. También es posible que no esté comiendo algunas cosas que podrían ayudar a mejorar los síntomas.
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Dieta de suplementación: Con este plan, añades vitaminas, minerales u otros nutrientes. La idea es que podría ayudarte a compensar la falta de estos a través de lo que comes. Los partidarios de estas dietas piensan que si no obtienes suficiente cantidad de ciertos nutrientes, esto puede agravar tus síntomas.
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Dietas de eliminación: Consisten en no consumir alimentos o ingredientes que crees que pueden desencadenar ciertos comportamientos o empeorar tus síntomas.
Coma alimentos nutritivos
Las dietas para el TDAH no se han investigado mucho. Los datos son limitados y los resultados son contradictorios. Sin embargo, muchos expertos en salud creen que lo que se come y bebe puede ayudar a aliviar los síntomas.
Los expertos dicen que todo lo que es bueno para el cerebro es probable que sea bueno para el TDAH. Es posible que quieras comer:
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Una dieta rica en proteínas. Las judías, el queso, los huevos, la carne y los frutos secos pueden ser buenas fuentes de proteínas. Coma este tipo de alimentos por la mañana y como tentempié después del colegio. Puede mejorar la concentración y posiblemente hacer que los medicamentos para el TDAH funcionen durante más tiempo.
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Más hidratos de carbono complejos. Estos son los buenos. Cárgate de verduras y algunas frutas, como naranjas, mandarinas, peras, pomelos, manzanas y kiwis. Come este tipo de alimentos por la noche, y puede ayudarte a dormir.
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Más ácidos grasos omega-3. Puedes encontrarlos en el atún, el salmón y otros pescados blancos de agua fría. Las nueces, las nueces de Brasil y los aceites de oliva y canola son otros alimentos que los contienen. También puedes tomar un suplemento de ácidos grasos omega-3. La FDA aprobó un compuesto de omega llamado Vayarin como parte de una estrategia de gestión del TDAH.
Alimentos que hay que evitar con el TDAH
Hidratos de carbono simples. Reduzca la cantidad de éstos que come:
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Caramelos
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Jarabe de maíz
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Miel
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Azúcar
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Productos elaborados con harina blanca
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Arroz blanco
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Patatas sin la piel.
Más información: Qué comer (y evitar) para mejorar los síntomas del TDAH
Suplementos nutricionales para el TDAH
Algunos expertos recomiendan que las personas con TDAH tomen un suplemento de vitaminas y minerales al 100% cada día. Otros expertos en nutrición, sin embargo, piensan que las personas que siguen una dieta normal y equilibrada no necesitan suplementos de vitaminas o micronutrientes. Dicen que no hay pruebas científicas de que los suplementos de vitaminas o minerales ayuden a todos los niños que padecen el trastorno.
Aunque un multivitamínico puede estar bien cuando los niños, adolescentes y adultos no llevan una dieta equilibrada, las megadosis de vitaminas pueden ser tóxicas. Hay que evitarlas.
Los síntomas del TDAH varían de una persona a otra. Colabora estrechamente con tu médico si estás pensando en tomar un suplemento.
Dietas de eliminación para el TDAH
Para seguir una de ellas, eliges un alimento o ingrediente concreto que crees que puede estar empeorando tus síntomas. Entonces no comes nada que contenga eso. Si los síntomas mejoran o desaparecen, sigue evitando ese alimento.
Si elimina un alimento de su dieta, ¿puede mejorar sus síntomas? La investigación en todas estas áreas está en curso y los resultados no son claros. Sin embargo, la mayoría de los científicos no recomiendan este enfoque para controlar el TDAH. Aun así, a continuación se exponen algunas áreas comunes de preocupación y lo que sugieren los expertos:
Aditivos alimentarios: En 1975, un alergólogo propuso por primera vez que los colorantes, sabores y conservantes artificiales podrían provocar hiperactividad en algunos niños. Desde entonces, los investigadores y los expertos en comportamiento infantil han debatido acaloradamente esta cuestión.
Algunos dicen que la idea de eliminar todos esos elementos de la dieta carece de fundamento y no está respaldada por la ciencia. Pero un estudio ha demostrado que algunos colorantes alimentarios y un conservante hacen que algunos niños sean más hiperactivos. Pero los efectos variaban según la edad y el aditivo.
Basándose en este y otros estudios recientes, la Academia Americana de Pediatría está ahora de acuerdo en que eliminar los conservantes y colorantes alimentarios de la dieta es una opción razonable para los niños con TDAH. Algunos expertos recomiendan que las personas con TDAH eviten estas sustancias:
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Colores artificiales, especialmente el rojo y el amarillo
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Aditivos alimentarios como el aspartamo, el GMS (glutamato monosódico) y los nitritos. Algunos estudios han relacionado la hiperactividad con el conservante benzoato de sodio.
Azúcar: Algunos niños se vuelven hiperactivos después de comer dulces u otros alimentos azucarados. Sin embargo, ninguna evidencia sugiere que esto sea una causa del TDAH. Para una mejor nutrición general, los alimentos azucarados deben ser una pequeña parte de la dieta de cualquier persona. Pero puedes probar a reducirlos para ver si los síntomas mejoran.
La cafeína: Los estudios han demostrado que pequeñas cantidades de cafeína pueden ayudar a aliviar algunos de los síntomas del TDAH en los niños. Pero los efectos secundarios de la cafeína pueden superar cualquier beneficio potencial. La mayoría de los expertos recomiendan comer o beber menos cafeína o simplemente evitarla. Si tomas medicación para el TDAH, la cafeína puede empeorar algunos efectos secundarios.
