El dolor de cuello y hombros puede clasificarse de muchas maneras diferentes. Algunas personas experimentan sólo dolor de cuello o sólo dolor de hombros, mientras que otras experimentan dolor en ambas zonas.
¿Qué causa el dolor de cuello?
Las causas del dolor de cuello incluyen:
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Anomalías en el hueso o en las articulaciones
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Traumatismos
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Mala postura
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Enfermedades degenerativas
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Tumores
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Tensión muscular
Qué causa el dolor de hombro?
El hombro es una articulación esférica con un gran rango de movimiento. Una articulación tan móvil tiende a ser más susceptible a las lesiones. El dolor de hombro puede provenir de una o más de las siguientes causas:
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Tensiones por sobreesfuerzo
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Tendinitis por exceso de uso
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Inestabilidad de la articulación del hombro
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Dislocación
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Fracturas del cuello o de los huesos del brazo
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Hombro congelado
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Pinzamiento de los nervios (también llamado radiculopatía)
Cómo se diagnostican los dolores de cuello y hombros?
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Rayos X:
Las radiografías simples pueden revelar el estrechamiento del espacio entre dos huesos de la columna vertebral, enfermedades similares a la artritis, tumores, hernias discales, estrechamiento del canal espinal, fracturas e inestabilidad de la columna vertebral.
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RESONANCIA MAGNÉTICA:
La resonancia magnética es un procedimiento no invasivo que puede revelar el detalle de los elementos neuronales (relacionados con los nervios), así como los problemas de los tendones y los ligamentos.
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Mielografía/tomografía computarizada:
A veces se utiliza como alternativa a la resonancia magnética.
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Estudios de electrodiagnóstico:
La electromiografía (EMG) y la velocidad de conducción nerviosa (VCN) se utilizan a veces para diagnosticar el dolor de cuello y hombro, el dolor de brazo, el entumecimiento y el hormigueo.
Cómo se trata el dolor de cuello y de hombros?
El tratamiento del dolor de cuello y hombros de tejidos blandos suele incluir el uso de medicamentos antiinflamatorios como el ibuprofeno (Advil o Motrin) o el naproxeno (Aleve o Naprosyn). También pueden recomendarse analgésicos como el paracetamol (Tylenol). Dependiendo del origen del dolor, pueden ser útiles fármacos como los relajantes musculares e incluso los antidepresivos. El dolor también puede tratarse con una aplicación local de calor húmedo o hielo. Las inyecciones locales de corticoides suelen ser útiles para la artritis del hombro. Para el movimiento del dolor de cuello y hombro, los ejercicios pueden ayudar. Para los casos en los que las raíces nerviosas o la médula espinal están afectadas, pueden ser necesarias intervenciones quirúrgicas. Su médico puede indicarle cuál es el mejor tratamiento para usted.
