Los nervios del cerebro y la médula espinal están protegidos por... tres membranas circundantes: la duramadre, la aracnoides y la piamadre. La aracnoiditis es un trastorno de dolor que se desarrolla cuando la aracnoides se inflama. Se caracteriza por un fuerte escozor, dolor ardiente y problemas neurológicos.
Síntomas de la aracnoiditis
Los síntomas de la aracnoiditis pueden variar, pero el más común es el dolor en la parte baja de la espalda o en las piernas que suele describirse como un dolor ardiente o punzante. Otros incluyen:
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Debilidad, entumecimiento u hormigueo... en las piernas.
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Sensación de alfileres y agujas (parestesia)
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Dolor en las articulaciones
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Zumbidos... en los oídos (tinnitus)
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Fatiga
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Problemas de vejiga
A medida que la enfermedad avanza, los síntomas pueden ser más graves o incluso permanentes. Muchas personas con aracnoiditis no pueden trabajar y sufren una incapacidad importante por tener un dolor constante.
Causas de la aracnoiditis
La inflamación de la... aracnoides puede ser desencadenada por una serie de irritantes diferentes, entre ellos:
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Lesión de la médula espinal:... En la mayoría de los casos, está relacionada con complicaciones de una cirugía o procedimiento de la columna vertebral, como la inyección epidural y la punción lumbar.
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Infección: los virus o las bacterias, como la meningitis bacteriana de la columna vertebral, pueden desencadenar la inflamación.
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Compresión del nervio espinal: La enfermedad discal degenerativa crónica o la estenosis espinal avanzada (estrechamiento de la columna vertebral) pueden provocar la compresión de los nervios espinales, desencadenando la inflamación de la aracnoides.
Diagnóstico de la aracnoiditis
El diagnóstico de la aracnoiditis puede ser difícil, pero pruebas como la TAC (tomografía axial computarizada) o la RMN (resonancia magnética) han ayudado al diagnóstico. Una prueba llamada electromiograma (EMG) puede evaluar la gravedad del daño en curso en las raíces nerviosas afectadas utilizando impulsos eléctricos para comprobar la función del nervio.
Nota: Los mielogramas con el contraste radiográfico que se utilizan actualmente, combinados con la tomografía computarizada, no se consideran responsables de provocar la aracnoiditis ni de agravarla.
Tratamiento de la aracnoiditis
La aracnoiditis no tiene cura. Las opciones de tratamiento para la aracnoiditis son similares a las de otras condiciones de dolor crónico. La mayoría de los tratamientos se centran en aliviar el dolor y mejorar los síntomas que impiden las actividades diarias. A menudo, los profesionales sanitarios recomiendan un programa de control del dolor, fisioterapia, ejercicio y psicoterapia. La cirugía para la aracnoiditis es controvertida, porque los resultados pueden ser pobres y proporcionar sólo un alivio a corto plazo. Se necesitan ensayos clínicos de inyecciones de esteroides y estimulación eléctrica para determinar si esos tratamientos son eficaces.
