¿Por qué mi hijo se golpea la cabeza?

¿Alguna vez has visto a tu hijo dándose golpes en la cabeza sin motivo aparente? Descubra las razones de este comportamiento tan común y lo que puede hacer para ayudarle.

Si notas que esto ocurre, lo mejor es abordar lo que está molestando a tu hijo. Protéjale de las lesiones en la medida de lo posible. Intenta no darle importancia a los golpes en la cabeza ni regañarle por este comportamiento.

Los golpes en la cabeza son habituales y no suelen ser motivo de preocupación. Sin embargo, en algunos niños puede indicar un problema de desarrollo. Si un niño que se golpea la cabeza con frecuencia también muestra algún tipo de retraso en el desarrollo o interacciones sociales anormales, se recomienda que acuda al médico.

¿Qué es golpear la cabeza?

Movimientos rítmicos. Los golpes de cabeza y el balanceo del cuerpo suelen producirse al mismo tiempo. Se consideran movimientos rítmicos. Pueden consistir en el balanceo repetitivo de todo el cuerpo o en el golpeo repetitivo de la cabeza.

La forma típica en que los niños pequeños se golpean la cabeza es cuando están boca abajo, golpeando la cabeza contra una almohada o un colchón, o en posición vertical, golpeando la cabeza contra la cabecera. Estos movimientos a veces van acompañados de zumbidos u otros sonidos vocales. Los golpes en la cabeza suelen cesar cuando el niño se distrae o cuando se queda dormido.

Razones por las que un niño pequeño se golpea la cabeza

Hasta un 20% de los niños pequeños se golpean la cabeza a propósito. Los niños son más propensos a hacerlo que las niñas. Los golpes en la cabeza suelen comenzar durante la segunda mitad del primer año de vida. Este comportamiento puede continuar durante varios meses o incluso años. Los niños pequeños suelen dejar de golpearse la cabeza a los 3 años.

Los niños pequeños se golpean la cabeza por varias razones:

Por comodidad. La mayoría de los niños que se golpean la cabeza lo hacen para relajarse. El movimiento rítmico les ayuda a sentirse cómodos. Suelen hacerlo cuando se duermen, cuando se despiertan en mitad de la noche o, a veces, mientras duermen...

Alivio del dolor. ¿Tu bebé tiene una infección de oído o le están saliendo los dientes? Es posible que se golpee la cabeza para distraerse del dolor.

Frustración. Los niños pequeños a menudo no han aprendido a expresar sus emociones con palabras. En su lugar, pueden utilizar una expresión física a través de los golpes en la cabeza. Esta es una de las formas en que los niños pequeños se tranquilizan tras un acontecimiento estresante.

Necesidad de atención. Si ves a tu hijo haciendo algo autodestructivo, este comportamiento llamará tu atención por razones obvias. Tu hijo puede empezar a notar que cuando hace esta actividad, tú vienes corriendo. Entonces puede utilizarlo como una forma eficaz de llamar tu atención.

Problema de desarrollo. Golpear la cabeza puede asociarse a veces con el autismo u otros trastornos del desarrollo. Sin embargo, los golpes de cabeza por sí solos no significan que tu hijo tenga un problema grave.

Debo preocuparme si un niño pequeño se golpea la cabeza?

Si su hijo está sano y sólo se golpea la cabeza o se balancea durante la noche o la siesta, no hay que preocuparse. Los niños suelen hacer estas cosas para conciliar el sueño.

Los golpes en la cabeza y el balanceo del cuerpo sólo se consideran un trastorno si interfieren notablemente con el sueño o provocan lesiones corporales.

Cómo ayudar a un niño pequeño que se golpea la cabeza

Cuando notes que tu hijo pequeño se golpea la cabeza, puedes intentar algunas cosas:?

Presta atención a tu hijo. Debes prestarle mucha atención positiva, pero no cuando se golpea la cabeza. Si te das cuenta de que se golpea la cabeza para llamar tu atención, intenta no darle importancia. Tu fuerte reacción podría reforzar el comportamiento y hacer que sea más probable que siga haciéndolo.

Dado que tu hijo aún es muy pequeño, evita gritarle o regañarle con dureza. Es demasiado joven para entender la situación.

Protege a tu hijo de las lesiones. Comprueba los tornillos y pernos de la cuna de tu hijo para asegurarte de que los golpes con la cabeza no han aflojado nada. Intenta colocar una manta o colcha entre la cuna y la pared para reducir el ruido y proteger la pared del desgaste...

No pongas una almohada o mantas en la cuna porque pueden suponer un peligro de asfixia. Si quieres utilizar topes en su cuna para suavizar el golpe cuando se golpee la cabeza, asegúrate de que sean finos, firmes y estén bien atados a las barandillas de la cuna...

Incorpora el ritmo de otras maneras. Si tu hijo disfruta con el ritmo de los golpes en la cabeza, es probable que le gusten otros ritmos como la música, el baile o los tambores. Intenta divertirte con ellos e incorpora diferentes actividades. Asegúrate de que tu hijo hace mucho ejercicio físico durante el día para ayudarle a gastar parte de esa energía acumulada.

Crea una rutina relajante para la hora de acostarse. Puedes ayudar a tu hijo a relajarse antes de irse a la cama estableciendo una rutina constante. Prueba a darle un baño caliente, a mecerlo tranquilamente en tu regazo, a contarle un cuento o a ponerle música suave. Mientras se duerme, prueba a frotarle suavemente la espalda o acariciarle la frente.

No te preocupes. Los golpes en la cabeza suelen ser autorregulados, lo que significa que tu hijo conoce su tolerancia al dolor. Si le duele, lo más probable es que deje de golpearse o lo suavice por sí mismo.

Cuándo acudir al médico

Si tu hijo se golpea mucho la cabeza durante el día o sigue haciéndolo aunque se haga daño, puede ser motivo de preocupación.

Aunque es poco frecuente, los golpes en la cabeza pueden estar asociados al autismo y a otros trastornos del desarrollo. A veces, éstos se manifiestan durante los años de la infancia y la edad preescolar.

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