Por Alexandra Benisek
Se puede tener cáncer de ovario pero tener pocos o ningún síntoma en las primeras etapas. Uno de los signos de advertencia que puede pasar por alto es el aumento de peso. Los kilos de más son tanto un factor de riesgo de padecer cáncer de ovario como un efecto secundario de la enfermedad o sus tratamientos.
El papel del peso extra en el cáncer de ovario
Tener sobrepeso u obesidad aumenta las posibilidades de padecer muchos tipos de cáncer. Eso incluye claramente el cáncer de ovario. Demasiada grasa en el cuerpo puede conducir a altos niveles de hormonas como el estrógeno y la insulina que alimentan los tumores cancerosos o ayudan a su propagación. El peso extra también puede causar inflamación o interferir en el crecimiento de las células y los vasos sanguíneos.
Razones del aumento de peso con el cáncer de ovario
El peso extra puede ser algo más que un factor de riesgo, también puede ser un efecto secundario de su cáncer de ovario o de su tratamiento. Otras razones para el aumento de peso con el cáncer de ovario pueden ser:
Los tumores... El cáncer puede hacer que su vientre se hinche y que se sienta hinchada. Usted podría descartar estos signos como un aumento de peso que viene con la edad. Pero la hinchazón persistente o el dolor de vientre podrían ser posibles síntomas de cáncer de ovario. Un tumor en su ovario puede estar abarrotando su cavidad abdominal.
Tratamiento. La quimioterapia y la terapia hormonal pueden causar retención de líquidos. El agua extra que su cuerpo retiene puede hacer que su peso aumente y que su ropa le quede ajustada.
Algunos tratamientos para el cáncer de ovario también pueden ralentizar el metabolismo. Esto significa que su cuerpo quema menos calorías para obtener energía. Esto puede hacer que aumente de peso.
Menos actividad física. El cáncer puede minar su energía y también cansarla más fácilmente que antes. Ambas cosas pueden hacer que se ejercite menos, lo que puede provocar un aumento de peso.
Cambios en la dieta. La quimioterapia a veces puede hacer que le apetezcan ciertos alimentos, como los dulces, el pan y otros carbohidratos. También es posible que comas más porque un estómago lleno puede disminuir las náuseas de los tratamientos contra el cáncer.
Cómo mantener un peso saludable
Puede ser un reto comer bien y mantenerse activo durante sus tratamientos contra el cáncer. Estos consejos pueden ayudar:
No se limite. La quimioterapia y la radioterapia pueden alterar el sabor de los alimentos o provocar llagas que dificulten la alimentación. Lo mejor es comer una variedad de alimentos saludables, a menos que su médico le diga que debe evitar algo.
Coma porciones razonables. Intente comer cantidades iguales de frutas y verduras, carne magra y carbohidratos. Hable con su médico sobre las mejores opciones de alimentos y tamaños de ración para usted.
Informe a su médico de todas las vitaminas y suplementos que esté tomando. Suele ser mejor obtener los nutrientes a través de los alimentos porque no interfieren con los medicamentos contra el cáncer.
Muévete todo lo que puedas. Incluso un paseo puede ayudarle a mantener un peso saludable durante el tratamiento del cáncer. Intente realizar alguna actividad física todos los días.
No se apresure. Si quiere perder algo de peso tras el diagnóstico de cáncer, pregunte a su médico cuál es la forma más segura de hacerlo. Perder peso demasiado deprisa puede ser duro para su cuerpo justo cuando necesita estar más fuerte mientras se somete a los tratamientos.
