Aprenda más del médico sobre cómo se diagnostica la osteoartritis.
No existe un análisis de sangre para el diagnóstico de la artrosis. Los análisis de sangre se realizan para excluir enfermedades que pueden causar artrosis secundaria, así como para excluir otras afecciones artríticas que pueden imitar la artrosis.
Las radiografías de las articulaciones afectadas son la principal forma de identificar la artrosis. Los hallazgos radiográficos habituales de la artrosis incluyen la pérdida de cartílago articular, el estrechamiento del espacio articular entre los huesos adyacentes y la formación de espolones óseos. Las pruebas radiográficas sencillas pueden ser muy útiles para excluir otras causas de dolor en una articulación concreta, así como para ayudar a tomar decisiones sobre cuándo debe considerarse una intervención quirúrgica.
La artrocentesis suele realizarse en la consulta del médico. Durante la artrocentesis, se utiliza una aguja estéril para extraer líquido articular para su análisis. El análisis del líquido articular es útil para excluir la gota, la infección y otras causas de artritis inflamatoria. La extracción de líquido articular y la inyección de corticosteroides en las articulaciones durante la artrocentesis pueden ayudar a aliviar el dolor, la hinchazón y la inflamación.
La artroscopia es una técnica quirúrgica mediante la cual el médico introduce un tubo de visualización en el espacio articular. A través del artroscopio se pueden detectar y, en ocasiones, reparar las anomalías y los daños en el cartílago y los ligamentos. Si tiene éxito, los pacientes pueden recuperarse de la cirugía artroscópica mucho más rápidamente que de la cirugía articular abierta.
Por último, un análisis cuidadoso de la localización, la duración y el carácter de los síntomas articulares y el aspecto de las articulaciones ayuda al médico a diagnosticar la artrosis. El agrandamiento óseo de las articulaciones por la formación de espolones es característico de la artrosis. Por lo tanto, los nódulos de Heberden y los nódulos de Bouchard de los dedos y los juanetes de los pies pueden ayudar al médico a realizar un diagnóstico de artrosis.