Suplementos nutricionales para la artrosis

Obtenga más información del médico sobre el uso de los suplementos de condroitina y sulfatos de glucosamina para la artrosis.

Los métodos de tratamiento habituales no modifican la progresión de la artrosis. Sin embargo, se han estudiado dos suplementos nutricionales, la glucosamina y los sulfatos de condroitina, para determinar si pueden aliviar el dolor o quizás ralentizar la degradación del cartílago, que es una parte importante de la artrosis.

¿Qué es el cartílago?

El cartílago es un material firme y gomoso que recubre los extremos de los huesos en las articulaciones normales (Ver Figura 1). Su función principal es reducir la fricción en las articulaciones y servir de "amortiguador". La cualidad de amortiguador del cartílago normal se debe a su capacidad de cambiar de forma cuando se comprime.

El cartílago puede cambiar de forma porque tiene más de un 70% de agua, que puede redistribuirse con el movimiento. Por ejemplo, cuando se aplica una fuerza a una rodilla, como al estar de pie o caminar, parte del agua del cartílago entra en la articulación y la recubre. Cuando deja de ejercerse la fuerza, como al sentarse, el agua se reabsorbe y el cartílago recupera su forma normal. Como el cartílago no contiene nervios, no se siente dolor cuando se producen estos cambios de forma.

La artrosis hace que el cartílago de una articulación se vuelva rígido y pierda su elasticidad, lo que lo hace más susceptible de sufrir daños. Con el tiempo, el cartílago puede desgastarse en algunas zonas, lo que disminuye en gran medida su capacidad para actuar como amortiguador. A medida que el cartílago se desgasta, los tendones y ligamentos se estiran, causando dolor. Si la afección se agrava, los huesos pueden rozarse entre sí.

El cartílago está formado por cuatro sustancias: colágeno, proteoglicanos, agua y condrocitos (véase la figura 2).

Colágeno:

Además de ser un componente clave del cartílago, la proteína colágeno también se encuentra en la piel y los tendones. El colágeno proporciona al cartílago su fuerza, y crea un marco que alberga los otros componentes del cartílago.

Proteoglicanos:

Esta sustancia es una combinación de proteínas y azúcar. Los proteoglicanos se tejen alrededor y a través del colágeno, permitiendo que el cartílago cambie de forma cuando se comprime. Los proteoglicanos atrapan el agua en el cartílago, que se redistribuye con el movimiento.

El agua:

El cartílago sano contiene más del 70% de agua. Además de funcionar como amortiguador en el cartílago, lubrica y nutre el cartílago.

Condrocitos:

Estas células producen nuevo colágeno y proteoglicanos en el cartílago. Los condrocitos también liberan enzimas que ayudan a descomponer y eliminar el colágeno y los proteoglicanos envejecidos.

Tratamientos de la artrosis

Los objetivos del tratamiento de la artrosis son disminuir el dolor y la rigidez articular, mejorar la movilidad y la estabilidad de las articulaciones y aumentar la capacidad de realizar las actividades cotidianas. La artrosis suele tratarse con medicamentos, ejercicio, aplicación de calor y frío en la articulación dolorida, uso de dispositivos de apoyo como muletas o bastones, y control del peso. La cirugía puede ayudar a aliviar el dolor de la artrosis cuando otras opciones de tratamiento no han sido eficaces.

El tipo de tratamiento de la artrosis que se prescriba dependerá de varios factores, como la edad de la persona, su nivel de actividad, su ocupación, su estado de salud general, su historial médico y la gravedad de la enfermedad.

Sin embargo, los tratamientos tradicionales para la artrosis no cambian la progresión de la enfermedad. Dado que la degradación del cartílago es una parte importante de la artrosis, los investigadores han centrado sus esfuerzos en la búsqueda de agentes que prevengan esta degradación. La glucosamina y los sulfatos de condroitina son dos suplementos nutricionales que se están estudiando para determinar su utilidad en el tratamiento de la artrosis.

Qué son el sulfato de glucosamina y el sulfato de condroitina?

El sulfato de glucosamina y el sulfato de condroitina son componentes del cartílago normal. Estos suplementos nutricionales están disponibles en farmacias y tiendas de alimentos saludables sin receta médica. Son los componentes básicos de los proteoglicanos y parecen estimular a los condrocitos para que produzcan nuevo colágeno y proteoglicanos. Los suplementos son bien tolerados y seguros.

Dado que estos suplementos estimulan la producción de nuevos componentes del cartílago, se cree que pueden ayudar al organismo a reparar el cartílago dañado por la artrosis. Sin embargo, gran parte de la investigación sobre el sulfato de glucosamina y el sulfato de condroitina se ha realizado in vitro (en tubos de ensayo fuera del cuerpo) y en animales. Hasta la fecha, no ha habido ninguna prueba convincente en humanos de que la glucosamina y el condroitín sulfato puedan ayudar a reconstruir el cartílago o a prevenir su daño.

Cómo pueden la glucosamina y los sulfatos de condroitina ayudar al dolor de la osteoartritis?

Aunque no se ha demostrado que la glucosamina y los sulfatos de condroitina reconstruyan el cartílago, hay pruebas de algunos estudios que indican que estos compuestos pueden reducir el dolor de la artrosis, normalmente en un plazo de varias semanas a meses después de iniciar la terapia. Cada vez son más los pacientes con artrosis que prueban la glucosamina y los sulfatos de condroitina.

La seguridad y la eficacia a largo plazo del sulfato de glucosamina y el sulfato de condroitina para la artrosis deben ser confirmadas por estudios más amplios.

Los suplementos se comercializan bajo diferentes nombres, con distintas concentraciones y niveles de pureza. Lamentablemente, en este momento no existe ningún control gubernamental que garantice la pureza de estos productos.

Es importante consultar con su médico antes de iniciar cualquier tratamiento nuevo para la artrosis. Su médico puede revisar los otros medicamentos que está tomando y ayudarle a decidir si estos suplementos son o no adecuados para usted. Además, siga siempre las instrucciones de la etiqueta del medicamento. No tome más suplementos de los recomendados.

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