¿Te sabe la boca a metal? Descubre qué puede estar causando este síntoma.
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Ignorar tu salud dental puede provocar infecciones en los dientes o en las encías, como la gingivitis o la periodontitis. Una afección más grave, llamada gingivitis necrosante aguda ulcerosa, puede aparecer de forma repentina. Junto con otros síntomas, estos problemas pueden provocar mal aliento y un sabor metálico en la boca.
Problemas de sinusitis
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Los sentidos del olfato y del gusto están estrechamente relacionados. Así que cualquier problema con tus senos paranasales puede afectar a tus papilas gustativas. Una vez que hayas eliminado la infección que obstruye tus senos paranasales, tu boca debería volver a la normalidad.
Medicamentos con receta
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Los cambios en el gusto y la sequedad de la boca (que pueden dar lugar a ese sabor metálico) son efectos secundarios de algunos medicamentos. Los culpables más comunes son los antibióticos como la tetraciclina, el medicamento para la gota alopurinol, el fármaco psiquiátrico litio y algunos medicamentos para el corazón.
Vitaminas
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Los multivitamínicos cotidianos con metales pesados como el zinc, el hierro o el cobre pueden dejar un regusto metálico. Lo mismo ocurre con las vitaminas prenatales, los suplementos de hierro y calcio y los remedios para el resfriado que contienen zinc. El problema suele desaparecer una vez que el cuerpo procesa el medicamento.
Indigestión
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Acidez, hinchazón, exceso de gases, reflujo... estos síntomas de indigestión pueden provocar un sabor metálico en la boca. Una vez que trates tu indigestión, el problema debería desaparecer.
Embarazo
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Estás creciendo otro ser humano. Y todas esas hormonas que recorren tu cuerpo pueden hacer mella en tus papilas gustativas. Es posible que pierdas el gusto por tus comidas favoritas o que te apetezcan aperitivos extraños. También es posible que tengas un sabor metálico en la boca.
Demencia
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Aunque tu lengua es la que saborea las cosas, es tu cerebro el que te dice de qué sabor se trata. La demencia puede afectar a las partes del cerebro que controlan esto. Cuando no funcionan bien, puedes tener un sabor metálico en la boca.
Tratamiento del cáncer
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La radiación y la quimioterapia pueden provocarle un sabor amargo o metálico en la boca. Puedes aliviar un poco el problema cepillándote bien los dientes y manteniendo la boca limpia con enjuagues. Este efecto secundario suele desaparecer cuando se termina el tratamiento.
Insuficiencia renal
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La insuficiencia renal crónica causada por daños en los nervios a causa de la diabetes, la hipertensión, el lupus, las infecciones crónicas o las enfermedades renales puede provocar múltiples problemas en su cuerpo, como un sabor metálico en la boca.
Boca de pino
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También conocido como síndrome de los piñones, es un trastorno poco frecuente que provoca un intenso sabor amargo o metálico después de comer piñones. El sabor metálico puede tardar de 1 a 3 días en aparecer, y dura varias semanas. Normalmente desaparece por sí solo.
Cirugía cerebral
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No es habitual, pero el sentido del gusto puede cambiar después de una operación cerebral para extirpar un tumor. El motivo puede ser la propia cirugía. O puede deberse a daños en los nervios que provocan trastornos como la parálisis de Bells, una enfermedad que adormece temporalmente los nervios de la cara.
Productos químicos
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Si tu trabajo te pone en el camino de los humos metálicos como el óxido de zinc, podría estropear tu sentido del gusto. Los soldadores corren un alto riesgo de padecer una afección llamada fiebre por humos metálicos. Te da mucha sed y te provoca un sabor metálico en la boca. Suele desaparecer en 6-12 horas.