Conozca la relación entre la esclerosis múltiple y la neuralgia del trigémino, que puede causar un dolor facial punzante y ardiente. Infórmese sobre otros síntomas, desencadenantes y tratamiento.
Las personas que no tienen EM a veces tienen neuralgia del trigémino, pero es más común con la EM. Entre el 4% y el 6% de las personas con EM la padecen, es decir, unas 400 veces más que las personas sin EM.
La relación entre la EM y la neuralgia del trigémino
La neuralgia del trigémino puede ser un síntoma temprano de la EM. En un estudio, el 15% de las personas la tenían antes de que se les diagnosticara EM.
Cuando se tiene EM, el sistema inmunitario ataca la mielina. La mielina es una sustancia que rodea las fibras nerviosas y las ayuda a enviar impulsos eléctricos rápidos al cerebro.
Cuando la vaina de mielina está dañada, lo que se denomina desmielinización, pueden aparecer manchas o placas sin mielina. Esto puede provocar síntomas neurológicos como la pérdida de visión, sensaciones y funciones motoras. Cuando los nervios del trigémino están dañados, se llama neuralgia del trigémino.
Cuanto más tiempo se tenga la EM, más probabilidades hay de desarrollar una neuralgia del trigémino. Es más frecuente a partir de los 50 años. Es raro que los menores de 40 años la padezcan. Cuando la padecen, lo más probable es que esté relacionada con la EM. Las mujeres pueden tener un mayor riesgo.
Para las personas sin EM, la neuralgia del trigémino suele ser el resultado de la presión de un vaso sanguíneo sobre un nervio del cráneo. Si tiene EM, la causa suele ser un daño en la vaina de mielina. Una resonancia magnética puede ayudar a su médico a decidir si la causa de sus problemas es la EM o un tumor.
Síntomas de la neuralgia del trigémino
La neuralgia del trigémino es un dolor crónico que se siente en la cara. Tiene su origen en los nervios del trigémino, que llevan las señales de la cara al cerebro.
Hay un nervio trigémino a cada lado de la cara. Cada nervio se ramifica en tres partes. Puede sentir dolor en una o varias de las ramas del nervio. Es diferente para cada persona.
Puede doler cuando comes o bebes, o durante actividades cotidianas como lavarse los dientes, afeitarse o maquillarse. A veces, hablar, besar, sonreír o mover la cabeza puede desencadenarlo. Otras veces es consecuencia de cosas como el viento, una brisa fresca, el aire acondicionado o la comida caliente, fría o picante.
El dolor puede ser extremo. Puede sentirse como un dolor ardiente o punzante o como una descarga eléctrica. Puede aparecer de repente, sin previo aviso, o en oleadas. El dolor puede durar unos segundos o unos minutos, o puede ser un dolor crónico que no desaparece.
Cómo tratarlo
Aunque la neuralgia del trigémino es una enfermedad de larga duración que no tiene cura, puedes controlar el dolor con tratamiento.
Los analgésicos como la aspirina y el ibuprofeno no suelen ser útiles para la neuralgia del trigémino, por lo que el médico puede recetar otros medicamentos para aliviar el dolor del nervio o relajar los músculos. Entre ellos se encuentran:
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Baclofeno (Lioresal)
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Carbamazepina (Tegretol)
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Gabapentina (Neurontin)
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Lamotrigina (Lamictal)
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Oxcarbazepina (Trileptal)
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Pregabalina (Lyrica)
El médico puede enviarte a un especialista en dolor o a un neurocirujano para discutir otras opciones de tratamiento, como la cirugía.
También puedes probar terapias complementarias y alternativas, como la acupuntura, los masajes, la meditación y el yoga, para controlar el dolor.
Los científicos están buscando más formas de tratar la neuralgia del trigémino.
Qué tipo de médico trata la neuralgia del trigémino?
Si tiene síntomas de neuralgia del trigémino, hable con su neurólogo. El médico puede recetarle medicamentos para aliviar el dolor o remitirle a un especialista.
Otros profesionales médicos pueden ayudarle a gestionar la vida con la neuralgia del trigémino. Un terapeuta ocupacional puede ayudarle en actividades cotidianas como comer y beber. Un especialista en dolor puede recomendar tratamientos específicos. Un terapeuta o psicólogo puede ayudarte a controlar los problemas de sueño, la depresión y los sentimientos de aislamiento, que son habituales en la neuralgia del trigémino.
