Cefalea tensional: Síntomas, causas, tratamiento y prevención

Las cefaleas tensionales son el tipo de dolor de cabeza más común entre los adultos. Aprenda más sobre las cefaleas tensionales, incluidos los síntomas, las causas, el diagnóstico, el tratamiento, la prevención y la diferencia con las migrañas.

Las cefaleas tensionales son un dolor sordo, tensión o presión alrededor de la frente o de la parte posterior de la cabeza y el cuello. Algunas personas dicen que se sienten como una pinza que les aprieta el cráneo. También se denominan cefaleas tensionales y son las más frecuentes en los adultos.

Hay dos tipos:

  • Las cefaleas tensionales episódicas ocurren menos de 15 días al mes.

  • Las cefaleas tensionales crónicas ocurren más de 15 días al mes.

Estas cefaleas pueden durar desde 30 minutos hasta varios días. Las de tipo episódico suelen comenzar lentamente, a menudo en la mitad del día.

Las crónicas aparecen y desaparecen durante un periodo de tiempo más largo. El dolor puede intensificarse o disminuir a lo largo del día, pero casi siempre está presente.

Aunque te duela la cabeza, las cefaleas tensionales no suelen impedirte realizar tus actividades diarias y no afectan a la visión, el equilibrio o la fuerza.

¿Dónde duele?

Este tipo de dolor de cabeza puede:

  • Comenzar en la parte posterior de la cabeza y extenderse hacia adelante

  • Convertirse en una banda de presión sorda o dolor que aprieta alrededor de toda la cabeza

  • Afecta a ambos lados de la cabeza por igual

  • Hacer que los músculos del cuello, los hombros y la mandíbula se sientan tensos y doloridos

Síntomas de la cefalea tensional

Los síntomas más comunes son:

  • Dolor o presión de leve a moderada en la parte frontal, superior o lateral de la cabeza

  • Un dolor de cabeza que comienza más tarde en el día

  • Problemas para dormir

  • Sentirse muy cansado

  • Irritabilidad

  • Problemas para concentrarse

  • Sensibilidad leve a la luz o al ruido

  • Dolores musculares

A diferencia de las migrañas, no tendrás otros síntomas nerviosos, como debilidad muscular o visión borrosa. Además, las cefaleas tensionales no suelen provocar sensibilidad grave a la luz o al ruido, dolor de estómago, náuseas o vómitos.

Causas de la cefalea tensional

No hay una única causa de las cefaleas tensionales. No son hereditarias. Algunas personas las padecen por la tensión de los músculos de la nuca y el cuero cabelludo.

Factores desencadenantes de las cefaleas tensionales

La mayoría de las veces, las cefaleas tensionales se desencadenan por el estrés del trabajo, los estudios, la familia, los amigos u otras relaciones.

Las episódicas suelen desencadenarse por una única situación estresante o por una acumulación de estrés. El estrés diario puede provocar las crónicas.

Los desencadenantes de las cefaleas tensionales pueden ser:

  • No descansar lo suficiente

  • Mala postura

  • Estrés emocional o mental, incluida la depresión

  • Ansiedad

  • Fatiga

  • Hambre

  • Niveles bajos de hierro

  • Alcohol

  • Cafeína

  • Problemas mandibulares o dentales

  • Tensión de los ojos

  • Deshidratación

  • Saltarse las comidas

  • Fumar

  • Un resfriado, la gripe o una infección de los senos nasales

Factores de riesgo de la cefalea tensional

Hasta el 80% de los adultos en Estados Unidos las padecen de vez en cuando. Alrededor del 3% tiene cefaleas tensionales crónicas diarias. Las mujeres tienen el doble de probabilidades de padecerlas que los hombres.

La mayoría de las personas con cefaleas tensionales episódicas no las tienen más de una o dos veces al mes, pero pueden ocurrir con más frecuencia.

Muchas personas con el tipo crónico suelen tenerlas durante más de 60 a 90 días.

Cuándo acudir al médico

Acuda al médico si tiene dolores de cabeza frecuentes o intensos, o si se interponen en su vida cotidiana.

Llame al 911 si el dolor de cabeza es repentino y severo o también hace que su cara se caiga, causa debilidad o entumecimiento, o hace que sea difícil hablar, ver o pensar.

Diagnóstico de la cefalea tensional

Su médico puede diagnosticarle basándose sólo en sus síntomas. Pueden preguntarte cosas como:

  • Dónde te duele la cabeza?

  • Cómo se siente el dolor?

  • Cuándo tiene dolores de cabeza?

  • Cuánto tiempo duran?

  • Sus dolores de cabeza se interponen en su vida diaria?

  • Te impiden dormir?

  • Estás sometido a mucho estrés?

  • Ha tenido una lesión en la cabeza?

  • Ha notado algún cambio en su comportamiento o personalidad?

También pueden hacer pruebas para descartar otras afecciones. Estas incluyen:

  • Análisis de sangre

  • Pruebas de imagen como radiografías, TAC o exámenes de resonancia magnética para realizar imágenes del interior de la cabeza

Tratamiento de la cefalea tensional

Lo mejor es tratar las cefaleas tensionales poco después de que empiecen, cuando los síntomas son todavía leves. El objetivo es aliviar el dolor y evitar que se produzcan más.

Medicamentos

Los analgésicos de venta libre suelen ser los primeros tratamientos para las cefaleas tensionales. Las personas con el tipo crónico pueden utilizar algunos de estos medicamentos para prevenir los dolores de cabeza. Pero si los toman mucho, pueden provocar lo que se denomina un uso excesivo de la medicación o una cefalea de rebote.

Entre los tratamientos habituales de venta libre se encuentran:

  • Acetaminofén (Tylenol)

  • Antiinflamatorios no esteroideos (AINE) como la aspirina, el ibuprofeno (Advil, Motrin) y el naproxeno (Aleve)

Si los analgésicos de venta libre no ayudan, el médico puede recetar un medicamento más fuerte como:

  • Indometacina (Indocin, Indochron E-R)

  • Ketoprofeno (Actron, Orudis, Oruvail)

  • Ketorolaco (Toradol)

  • Naproxeno (Naprelan, Naprosyn)

También podrían recomendar un relajante muscular como:

  • Ciclobenzaprina (Amrix, Fexmid, Flexeril)

  • Metocarbamol (Robaxin)

Algunos otros tipos de medicamentos pueden evitar que tengas una cefalea tensional. Los tomas todos los días, aunque no sientas dolor, de modo que acabas usando menos medicamentos con el tiempo. Su médico puede recetarle:

  • Antidepresivos tricíclicos como la amitriptilina (Elavil) y la protriptilina (Vivactil)

  • Inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS), incluyendo fluoxetina (Prozac), paroxetina (Paxil) o venlafaxina (Effexor)

  • Medicamentos anticonvulsivos como el topiramato (Topamax)

Ten en cuenta que los medicamentos no curan los dolores de cabeza y que, con el tiempo, los analgésicos y otros medicamentos podrían no ayudar tanto como al principio. Además, todos los medicamentos tienen efectos secundarios. Si tomas alguno con regularidad, habla con tu médico sobre los pros y los contras. De todos modos, tendrás que identificar y tratar las cosas que te están causando el dolor de cabeza.

Suplementos

Algunos estudios han descubierto que ciertos suplementos dietéticos son eficaces contra las migrañas. También pueden ayudar a prevenir las cefaleas tensionales. Estos suplementos incluyen:

  • Petasita

  • Matricaria

  • Magnesio

  • Riboflavina

  • Coenzima Q10

Hable con su médico antes de empezar a tomar cualquier suplemento.

Prevención de la cefalea tensional

Pruebe estos tratamientos para hacer que sus dolores de cabeza sean menos severos o menos frecuentes.

Encuentre formas de relajarse y manejar el estrés como:

  • Biorretroalimentación

  • Terapia cognitiva conductual

  • Acupuntura

  • Masaje terapéutico

  • Fisioterapia

  • Respiración profunda

  • Meditación

  • Yoga

  • Hipnoterapia

Los cambios en el estilo de vida también pueden ayudar. Considere estos:

  • Limite el estrés. Intente planificar. Organícese, y manténgase, organizado. Las cosas que le ayudan a relajarse, como los masajes o la meditación, también pueden ayudar.

  • Intenta llevar un ritmo. Haz descansos. Dedica tiempo a hacer cosas que te gusten. Para algunas personas, la atención plena (permanecer en el aquí y el ahora, en lugar de seguir los pensamientos de preocupación y miedo) puede ayudar.

  • Construye tu sistema de apoyo. Pasa tiempo con las personas que quieres. También puedes reservar algunas sesiones con un terapeuta para encontrar soluciones y controlar la ansiedad o la depresión que puedas tener.

  • Haga ejercicio con regularidad. Lo ideal es hacer al menos 30 minutos cinco veces por semana. Alivia el estrés y te mantiene en forma. También ayuda a estirar. Presta mucha atención a tu mandíbula, cuello y hombros. Son zonas en las que solemos mantener mucha tensión.

  • Duerme lo suficiente. Cuando estás bien descansado, es mucho más fácil lidiar con el estrés diario.

  • Mejora tu postura. Una postura firme puede ayudar a evitar que tus músculos se tensen. Cuando estés de pie, mantén los hombros hacia atrás y la cabeza nivelada. Aprieta el vientre y los glúteos. Cuando te sientes, asegúrate de que los muslos estén paralelos al suelo y que la cabeza y el cuello no se desplacen hacia delante.

  • Bebe mucha agua. Si estás deshidratado, es más probable que tengas una cefalea tensional. Bebe varios vasos de agua fresca al día, aunque no tengas sed. También ayuda comer alimentos que son naturalmente ricos en agua, como la mayoría de las frutas y verduras.

  • Come de forma regular y equilibrada. Saltarse una comida puede provocar un dolor de cabeza punzante. Intenta comer a las mismas horas todos los días. Incluye en tu dieta muchas frutas, verduras y cereales integrales.

  • Limite la cafeína y el alcohol. La cafeína está presente en muchos medicamentos de venta libre para el dolor de cabeza, pero también puede desencadenarlos. Bebe menos café y té, y menos bebidas energéticas y refrescos.

  • Limite la cantidad de medicación analgésica que toma. Utiliza la menor dosis posible. No tome analgésicos más de una o dos veces por semana.

  • Mantén el sentido del humor. Reduce la tensión.

  • Utilice un diario de dolores de cabeza. Esto le ayudará a detectar los factores desencadenantes. También ayudará a tu médico a elaborar un plan de tratamiento. Cuando tengas un dolor de cabeza, anota cosas como la fecha, la hora, cualquier señal de advertencia u otros síntomas, el lugar y la intensidad del dolor, lo que estabas haciendo, los medicamentos que has tomado y los alimentos que has ingerido.

Las cefaleas tensionales frente a las migrañas

Cómo distinguirlas?

Las cefaleas tensionales:

  • Cómo se sienten? Un dolor constante, de leve a moderado, que no es punzante. Puede remitir o empeorar en el transcurso del dolor de cabeza.

  • Dónde le duelen? Puede doler en toda la cabeza, pero lo más probable es que sientas una banda de dolor alrededor de la frente o de la parte posterior de la cabeza o alrededor del cuello. El dolor de cabeza no empeora con la actividad. La mandíbula, los hombros, el cuello y la cabeza también pueden estar sensibles.

  • ¿Hay otros síntomas? Este tipo de dolor de cabeza no viene acompañado de las náuseas, los vómitos, la sensibilidad a la luz o el aura que tienen las personas con migrañas.

  • Notas síntomas antes de que empiece el dolor de cabeza? Puede que sientas estrés o tensión.

  • Quién las padece? Sobre todo los adultos.

  • Con qué frecuencia se contagian? Varía.

  • Cuánto tiempo duran? De treinta minutos a siete días.

Migrañas:

  • Cómo se sienten? Aparecen lentamente. El dolor se vuelve intenso. Puede ser moderado o severo. Puede palpitar o pulsar, y empeorará con la actividad física.

  • ¿Dónde le duele? A menudo es sólo un lado de la cabeza. Puede afectar al ojo, a la sien o a la parte posterior de la cabeza.

  • Hay otros síntomas? Algunas personas tienen una alteración visual llamada aura antes de que comience el dolor de cabeza. Durante la cefalea puede ser que estés muy sensible a la luz y al sonido. Puede tener náuseas y vómitos. Algunas personas tienen problemas para moverse o hablar.

  • ¿Quién las padece? A cualquiera. Los niños los tienen más que las niñas antes de la pubertad, pero después las mujeres los tienen más que los hombres.

  • ¿Con qué frecuencia se producen? Varía.

  • Cuánto tiempo duran? Entre 4 y 72 horas.

Hot