Este tipo de terapia utiliza el arte, la música y otras salidas creativas para ayudarle a procesar emociones o recuerdos. Aprenda cómo funciona y qué puede esperar.
Cómo funciona la terapia expresiva
Esta forma de tratamiento utiliza actividades creativas para ayudarte a compartir y procesar sentimientos y recuerdos que pueden ser difíciles de expresar con palabras. También se denomina terapia de artes expresivas, terapia de arte, terapia de artes creativas o terapia experiencial.
Este campo comenzó en los años 40 cuando los psicólogos empezaron a prestar atención a los dibujos de sus pacientes. Los dibujos a veces les decían más sobre lo que una persona pensaba o sentía que lo que aprendían hablando con ese paciente.
En una sesión de terapia expresiva, un terapeuta formado te guía en el proceso de expresarte a través del arte. Suele ser una mezcla de diferentes actividades, pero a veces los terapeutas se centran en una sola. Por ejemplo, escribir o llevar un diario puede ser mejor para alguien que es nuevo en la terapia. Si llevas un tiempo en terapia, puede que te interese más la danza o el teatro. Puedes probar la terapia expresiva por sí sola o junto con la terapia conversacional.
No es necesario que seas bueno en la forma de arte que utilices durante las sesiones. El objetivo de la terapia expresiva es el proceso en sí, no los resultados.
Condiciones que puede tratar
La terapia expresiva es una opción para niños y adultos con diferentes tipos de problemas de salud mental, incluyendo:
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TDAH
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Ansiedad
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Depresión
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Autismo y otras condiciones del desarrollo
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Trastornos de la alimentación
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Altos niveles de estrés
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Lesión cerebral traumática
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Trastorno por estrés postraumático (TEPT)
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Condiciones médicas en curso
Tipos
Existen cuatro tipos principales de terapia expresiva:
La musicoterapia. Este tratamiento consiste en tocar, cantar, escuchar o moverse con música. Las investigaciones han demostrado que puede aliviar la ansiedad. También puede mejorar el estado de ánimo.
Terapia artística. Se utiliza la pintura, el dibujo, la escultura u otra forma de arte para procesar o expresar pensamientos y emociones fuertes. Un estudio sobre mujeres con cáncer reveló que la terapia artística les ayudó a centrarse en las partes más positivas de sus vidas. También aumentó su confianza.
Danzaterapia. Diferentes tipos de danza o movimiento pueden ayudar a aliviar el estrés y la ansiedad. También puede mejorar la salud física. Un estudio descubrió que ayudaba a las supervivientes de cáncer de mama a moverse mejor.
Terapia de escritura. Llevar un diario o escribir poesía son dos formas de practicar esta forma de terapia. Algunos estudios han descubierto que puede ayudar a las personas con el estrés y la depresión que pueden conllevar las enfermedades dolorosas, como la fibromialgia.
Habla con tu médico o terapeuta si quieres probar la terapia de artes expresivas. Ellos pueden ayudarte a decidir qué puede funcionar para ti.
