Existen diferentes opciones para tratar el TDAH en los niños. Infórmese sobre los diferentes medicamentos y terapias que se utilizan para tratar este trastorno en los niños.
Se ha evaluado la seguridad de estas opciones de tratamiento, pero no hay dos niños iguales, y lo que funciona para algunos niños puede no funcionar tan bien para el suyo.
Junto con el médico, desarrollará un plan que satisfaga las necesidades específicas de su hijo. Puede llevar tiempo averiguar qué es lo que mejor funciona. El plan puede incluir medicamentos, terapia conductual o ambos.
Medicamentos
Los principales medicamentos utilizados para tratar el TDAH son estimulantes y no estimulantes. A veces también se utilizan antidepresivos.
Los estimulantes son el tratamiento más común en niños y adolescentes. Suelen ser el tipo de medicación que el médico puede probar en primer lugar. Los estimulantes se han utilizado durante mucho tiempo y están bien probados. Ayudan al cerebro a controlar los impulsos y a controlar el comportamiento y la atención.
Los niños con determinadas enfermedades no deberían tomar estimulantes. Asegúrese de que el médico conoce el historial médico de su hijo antes de recetarle cualquier medicamento.
Los estimulantes incluyen:
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Anfetamina (Adzenys XR-ODT)
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Anfetamina/dextroanfetamina (Adderall, Adderall XR)
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Dexmetilfenidato (Focalin, Focalin XR)
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Dextroanfetamina (Dexedrina)
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Lisdexanfetamina (Vyvanse)
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Metilfenidato (Concerta, Daytrana, Metadate, Methylin, Ritalin, Quillivant XR)
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Serdexmetilfenidato y dexmetilfenidato (Azstarys)
Si el primer medicamento que el médico prescribe no parece ayudar, puede aumentar la dosis, sugerir un medicamento diferente o sugerir que su hijo tome otro medicamento junto con el estimulante.
Los no estimulantes no están tan probados. Funcionan de forma diferente a los estimulantes, pero pueden ayudar a la concentración y al control de los impulsos. Para algunos niños, pueden ser una mejor opción que los estimulantes, pero a menudo se utilizan junto con éstos.
Estos no estimulantes están aprobados por la FDA para el TDAH en niños y adolescentes:
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Atomoxetina (Strattera)
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Clonidina ER (Kapvay)
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Guanfacina ER (Intuniv)
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Viloxazina (Qelbree)
Los antidepresivos no están aprobados para tratar el TDAH, pero pueden ayudar con la falta de atención, la impulsividad y la hiperactividad. Son una opción para los niños a los que no les ha ido bien tomar sólo un estimulante. Tomar un antidepresivo junto con un estimulante parece funcionar bien para los niños que tienen TDAH junto con un trastorno del estado de ánimo como la depresión o la ansiedad.
Existen varios tipos de antidepresivos.
Antidepresivos tricíclicos. Afectan a las sustancias químicas del cerebro.
Algunos ejemplos de antidepresivos tricíclicos son:
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Desipramina (Norpramin, Pertofrane)
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Imipramina (Tofranil)
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Nortriptilina (Aventyl, Pamelor)
Bupropión (Wellbutrin). El médico puede prescribirlo si su hijo no se beneficia de los estimulantes.
Inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS). Son los antidepresivos más recetados para las personas con depresión. Se han probado para el TDAH:
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Escitalopram (Lexapro)
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Sertralina (Zoloft)
Venlafaxina (Effexor). Este fármaco también afecta a las sustancias químicas del cerebro. Ayuda a mejorar el estado de ánimo y la concentración en niños y adolescentes.
Efectos secundarios
Todos estos medicamentos pueden provocar efectos secundarios. Suelen aparecer cuando el niño empieza a tomarlos. Suelen ser leves y desaparecen bastante pronto. Antes de que su hijo empiece a tomar cualquier medicamento nuevo, hable con su médico sobre lo que puede esperar.
Si le preocupan los efectos secundarios mientras su hijo está tomando un medicamento, llame al médico. No haga cambios en el tratamiento sin hablar con ellos.
Los medicamentos no son para todos
Los medicamentos no siempre funcionan para los niños con TDAH. De hecho, no parecen funcionar en absoluto en el 20% o el 30% de los casos. En otros, la mejoría es sólo leve o los efectos secundarios son demasiado graves. Tu equipo médico puede ayudarte a elaborar la combinación de medicación y terapia conductual o la terapia sola que mejor funcione para tu hijo.Para saber qué funciona, puede ser útil hablar primero con tu médico sobre los objetivos del tratamiento. Otra idea es controlar y llevar un registro de los tiempos y la intensidad de los síntomas de tu hijo en un cuaderno de síntomas del TDAH. Luego, usted y su equipo de atención médica pueden revisar el registro para identificar patrones que puedan ayudar a dar forma a un tratamiento más eficaz.
Terapia conductual
Este tipo de terapia utiliza el refuerzo positivo para el buen comportamiento y el refuerzo negativo para los comportamientos no deseados. Un profesional de la salud mental -un psicólogo, un trabajador social o un terapeuta familiar- trabaja con usted y con los profesores de su hijo para establecer un programa que mejore los comportamientos de su hijo.
La terapia conductual suele utilizarse junto con los medicamentos para el TDAH, pero también puede utilizarse sola.
Otros tratamientos
La FDA tiene dos terapias basadas en la tecnología como tratamiento no farmacológico para los niños.
La primera es un dispositivo que se llama Monarch eTNS System y está aprobado para niños de 7 a 12 años. Tiene el tamaño aproximado de un teléfono móvil y funciona mediante la entrega de una estimulación suave a los electrodos fijados a la frente. Esos leves impulsos eléctricos interactúan con la parte del cerebro que se cree responsable del TDAH.
También se ha aprobado un dispositivo terapéutico digital basado en juegos llamado EndeavorRx para pacientes pediátricos con TDAH de entre 8 y 12 años. Este dispositivo, basado en un videojuego, utiliza estímulos sensoriales y retos de habilidad motriz para tratar zonas del cerebro y ayudar a mejorar la concentración y la función cognitiva.
Además, algunos estudios han demostrado que los suplementos de omega-3 pueden ayudar a algunos niños con TDAH.
Algunos niños con TDAH pueden beneficiarse de cambios en la dieta, como no consumir gluten o evitar ciertos colorantes y aditivos alimentarios. Hable con el médico de su hijo sobre las mejores opciones para él.