¿Estás destinado a padecer las enfermedades de tus padres?

En el caso de enfermedades como el cáncer, el Alzheimer, la diabetes y las cardiopatías, los genes no son siempre el destino. Es probable que puedas superar tu herencia y mantenerte libre de enfermedades tomando decisiones de salud más inteligentes.

¿Te han dicho que tienes el color de ojos de tu padre o el pelo rizado de tu madre? Estos rasgos físicos son producto de los genes que has heredado de tus padres. Si tu madre padece una enfermedad cardíaca y tu padre un cáncer de colon, es posible que también hayas heredado una mayor probabilidad de padecer estas enfermedades. Pero no te preocupes, no es algo seguro.

En el caso de enfermedades como el cáncer, el Alzheimer, la diabetes y las cardiopatías, los genes no son siempre el destino. Es probable que puedas superar tu herencia y mantenerte libre de enfermedades tomando decisiones de salud más inteligentes.

Genes y enfermedad

Los genes conducen a la enfermedad de diferentes maneras. "Con algunas enfermedades, es casi seguro que si se hereda ese gen se heredará la enfermedad. Pero en el caso de otras enfermedades se trata de un riesgo mayor", dice el doctor Soren Snitker. Es profesor asociado de medicina en la Facultad de Medicina de la Universidad de Maryland.

Algunas afecciones, como la enfermedad de Huntington, están causadas por un cambio en un solo gen. Si uno de sus progenitores padece esta enfermedad, tiene un 50% de probabilidades de padecerla.

Muchas otras enfermedades, como la diabetes de tipo 2 o el cáncer, están causadas por una combinación de cambios genéticos y hábitos de vida.

"Una persona puede superar gran parte del riesgo heredado con comportamientos muy saludables", afirma el doctor Donald Lloyd-Jones. Es director del departamento de medicina preventiva de la Facultad de Medicina Feinberg de la Universidad Northwestern.

Un buen ejemplo de que el estilo de vida se impone a los genes procede de un estudio sobre los amish realizado por Snitker y otros investigadores. Examinaron un gen llamado FTO, que contribuye a la obesidad. Los amish con el gen que hacían ejercicio no engordaban. Fueron capaces de superar su gen manteniéndose activos.

Supera tus genes

No solo puedes anular tus genes cuidándote bien, sino que incluso podrías cambiar su funcionamiento. Un campo de investigación cada vez más amplio estudia cómo las opciones de estilo de vida afectan a nuestra composición genética.

Los comportamientos no cambian los genes en sí. Cambian el modo en que la información genética se utiliza para fabricar las proteínas que controlan las distintas funciones del cuerpo.

"La idea es que hay diferentes maneras de activar o inactivar los genes en función de lo que se haga en el estilo de vida", dice el doctor Adam Rindfleisch. Es profesor asociado de medicina familiar y director de la beca de medicina integral de la Facultad de Medicina y Salud Pública de la Universidad de Wisconsin.

Sea cual sea tu composición genética, puedes evitar enfermedades como la diabetes, el cáncer y las cardiopatías adoptando algunos hábitos saludables:

  • Lleva una dieta saludable.

  • Haz ejercicio con frecuencia.

  • Controla tu peso.

  • No fumes.

  • Reduzca el estrés.

Debe hacerse la prueba?

Merece la pena hacerse una prueba genética para conocer su riesgo de enfermedad? En algunos casos acudir a un asesor genético y hacerse la prueba puede ser útil.

Un ejemplo es el de las mujeres con un fuerte historial familiar de cáncer de mama. Descubrir que se es portador de una mutación del gen BRCA1 o BRCA2, que aumenta en gran medida el riesgo de cáncer de mama y de ovarios, puede ayudar a tomar medidas para prevenir el cáncer.

En el caso de enfermedades como la diabetes o las cardiopatías, los beneficios de las pruebas genéticas no están tan claros. "Como se deben a tantas causas diferentes, no suele haber genes dominantes para los que podamos hacer pruebas", dice Lloyd-Jones.

Incluso si sabes que tienes riesgo de padecer una enfermedad, puede que no haya mucho que puedas hacer al respecto.

"En muchos de estos casos, conocer los antecedentes genéticos de la enfermedad no va a cambiar la terapia", dice Snitker. Menciona el gen APOE E4 de la enfermedad de Alzheimer. Aunque se sepa que se tiene el gen, no hay ningún tratamiento que pueda utilizarse para prevenir la enfermedad. Eso puede provocar muchas preocupaciones innecesarias.

En el futuro, podríamos tener más control sobre nuestra salud gracias a la medicina personalizada. Esta práctica se basa en la idea de que podemos utilizar nuestros genes para diagnosticar las enfermedades y perfeccionar los tratamientos que tienen más posibilidades de éxito en función de nuestra composición genética única.

Por ahora, su mejor defensa es conocer sus antecedentes familiares y sus propios riesgos de salud. Entonces podrá hacer cambios positivos en su dieta, ejercicio y otros hábitos para mejorar las probabilidades de que la línea de la enfermedad en su familia se detenga con usted.

Hot