El médico explica las pruebas y los exámenes necesarios para confirmar el diagnóstico de la fibrosis pulmonar idiopática (FPI), una enfermedad que provoca cicatrices en los pulmones.
Hágase un chequeo
Si usted o su médico creen que puede tener la enfermedad, pida cita cuanto antes con un neumólogo, un especialista en salud pulmonar.
Le preguntarán por sus antecedentes familiares y por sus problemas médicos anteriores. Querrán saber cosas como:
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Si alguna vez has fumado o consumido drogas
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Qué tipo de trabajo realiza (para ver si algo que respira en su trabajo podría irritar sus pulmones)
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Otros problemas médicos que tenga
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Si alguien más en su familia tiene una enfermedad pulmonar
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Desde cuándo tiene síntomas, como falta de aire o tos
También le harán un examen físico, que incluirá escuchar su respiración a través de un estetoscopio. Si tienes FPI, es posible que escuchen un sonido crepitante en tus pulmones.
Pruebas para detectar la FPI
Su médico puede pedirle que se someta a pruebas que busquen daños en sus pulmones. También pueden ayudar a descartar otras enfermedades.
Algunas las puedes hacer en la consulta de tu médico sin ninguna preparación especial, pero para otras tendrás que ir a un laboratorio u hospital.
Exploración de tórax.
Una radiografía permite a su médico ver las estructuras del interior de su cuerpo. Puede mostrar sombras en sus pulmones que sugieren tejido cicatricial.
También puede necesitar una tomografía computarizada de alta resolución (HRCT). Es un tipo de radiografía más nítida y detallada que puede detectar signos de FPI en una fase más temprana.
Prueba respiratoria.
Su médico puede utilizar un aparato llamado espirómetro para medir el funcionamiento de sus pulmones.
Usted inhala profundamente y luego sopla tan fuerte como puede en un tubo conectado al dispositivo. Llevarás una pinza en la nariz para que sólo puedas inspirar y espirar por la boca.
Oximetría de pulso.
El médico le coloca un pequeño sensor en la punta del dedo o de la oreja. Envía un haz de luz indoloro a través de su piel para comprobar el nivel de oxígeno en sus arterias.
Análisis de sangre.
Se utiliza para comprobar tus niveles de oxígeno y dióxido de carbono.
El médico te extrae sangre de una arteria de la parte interior de la muñeca, el brazo o la ingle. Puede ser ligeramente más doloroso que un análisis de sangre normal, que toma una muestra de las venas.
Es posible que sienta alguna molestia. Tendrá que sentarse tranquilamente y mantener la presión en el punto durante unos minutos después para evitar que sangre.
Prueba cutánea.
La tuberculosis provoca síntomas parecidos a los de la FPI, por lo que es posible que necesite una prueba para descartar esta enfermedad. El médico utiliza una aguja diminuta para inyectar una sustancia bajo la capa superior de la piel del brazo. Esto formará una pequeña burbuja, como una ampolla.
Tendrá que ver a su médico o técnico de laboratorio entre 48 y 72 horas después para ver si hay una reacción, que se verá como un bulto rojo e hinchado.
Prueba de esfuerzo.
Mide lo bien que tus pulmones impulsan el oxígeno a través del torrente sanguíneo mientras te mueves. Es posible que tenga que caminar en una cinta de correr o pedalear en una bicicleta fija mientras está conectado a dispositivos que miden su ritmo cardíaco, la presión arterial y la cantidad de oxígeno en la sangre.
Biopsia de pulmón.
La mejor manera de que su médico diagnostique la FPI es tomar pequeñas muestras de tejido de sus pulmones y examinarlas al microscopio para detectar signos de cicatrización u otra enfermedad.
Hay diferentes formas de hacerlo. Su médico puede introducir una aguja en el pecho o puede introducir un tubo largo y fino por la boca y la garganta.
Para algunas biopsias, sólo necesitará "anestesia local", que es un medicamento que adormece una zona del cuerpo. Para otras, necesitará medicamentos que le hagan dormir mientras se realiza el procedimiento.
Es posible que le pidan que deje de comer durante 8 horas antes de la biopsia. Asegúrese de averiguar si hay alguna otra forma en la que deba prepararse.
Otras pruebas pulmonares.
Es posible que tenga que ir a un hospital para que le hagan otros exámenes. Por ejemplo, podrían hacerle una toracoscopia o broncoscopia asistida por vídeo. El médico introduce un pequeño tubo con una cámara en el extremo a través de un corte en el pecho o en la nariz o la boca.
Para una prueba llamada lavado broncoalveolar, el médico inyecta agua salada en los pulmones para ayudar a recoger muestras de tejido.
Otra opción es la toracotomía. El médico extrae pequeños trozos de tejido pulmonar a través de un corte entre las costillas.
Durante estas pruebas se le administrará un medicamento que le hará dormir. Hable con su médico sobre cómo debe prepararse y qué debe esperar después.