Esto es lo que debe saber sobre los fármacos, terapias y otros procedimientos para tratar la hipertensión pulmonar.
El primer paso de cualquier plan es tratar la causa de su HAP. Por ejemplo, si la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) es la razón por la que la padece, el tratamiento de ese problema también mejorará la hipertensión pulmonar. Pero algunas personas necesitan más ayuda para mejorar su respiración y reducir la presión arterial en sus pulmones.
Para ayudarle a elegir un plan de tratamiento, su médico comprobará la gravedad de sus síntomas y el grado en que su enfermedad le impide ser activo.
Medicamentos para la HAP
Estos actúan de varias maneras. Algunos permiten que la sangre fluya más fácilmente por las arterias de los pulmones, y otros ayudan a que el corazón y los pulmones funcionen mejor. Se pueden tomar en forma de pastillas, medicamentos que se inhalan, fármacos que se administran por vía intravenosa o a través de la piel.
Los antagonistas del calcio son fármacos que reducen la presión arterial al relajar los músculos que controlan las arterias. Antes de que su médico le prescriba estas píldoras, comprobará su eficacia en los vasos sanguíneos mediante un procedimiento denominado prueba vasodilatadora.
La digoxina es una píldora diaria que ayuda a que el corazón lata con más fuerza, lo que puede ayudar si la causa de su HAP es una insuficiencia cardíaca o un ritmo cardíaco irregular. El reto de este fármaco es conseguir la dosis adecuada. Si toma una dosis excesiva, podría tener efectos secundarios como náuseas, cambios en la visión y latidos irregulares.
La warfarina (Coumadin) diluye la sangre para evitar la formación de coágulos, lo que puede empeorar la HAP. Pero también puede hacer que se produzcan hematomas y sangrados con facilidad.
Los medicamentos que eliminan el exceso de líquido del organismo, denominados diuréticos, pueden hacer que el corazón y los pulmones funcionen mejor y aliviar los síntomas de la HAP. Estos medicamentos suelen tomarse una o dos veces al día. Si toma diuréticos, es posible que tenga que hacerse periódicamente análisis de sangre para que su médico pueda controlar la deshidratación, la presión arterial baja, los desequilibrios químicos en la sangre y los problemas renales.
Otras píldoras para la HAP reducen la presión arterial en las arterias pulmonares... manteniendo los vasos sanguíneos abiertos o impidiendo su estrechamiento. Entre ellas se encuentran:
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Ambrisentan (Letairis)
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Bosentan (Tracleer)
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Macitentan (Opsumit)
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Riociguat (Adempas)
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Selexipag (Uptravi)
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Sildenafilo (Revatio, Viagra)
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Tadalafilo (Adcirca, Cialis)
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Treprostinil (Orenitram)
Los fármacos denominados vasodilatadores abren los vasos sanguíneos, pero algunos tienen un efecto en el organismo sólo durante unos minutos. Para administrar... el más común, el epoprostenol (Flolan, Veletri), se necesita una pequeña bomba a pilas para poder obtener una dosis constante. La bomba suministra el medicamento a través de un delgado tubo intravenoso y se lleva en una mochila en el cinturón o en el hombro. Es de esperar que pases unos días en el hospital para que te preparen la bomba y aprendas a usarla... También existe una forma subcutánea (bajo la piel) de estos medicamentos llamada treprostinil (Remodulin).
Otros vasodilatadores son medicamentos que se inhalan, como el iloprost (Ventavis) y el treprostinil (Tyvaso). Van directamente a los pulmones y pueden aliviar rápidamente la falta de aire. Para tomarlos, se necesita un nebulizador, una máquina que vaporiza estos medicamentos y permite inhalarlos. Iloprost puede administrarse de seis a nueve veces al día. Tyvaso puede administrarse cuatro veces al día y también puede administrarse por vía oral, intravenosa o subcutánea.
Algunas personas con HAP necesitan oxigenoterapia para obtener suficiente oxígeno en la sangre. Se respira a través de una máscara facial o de unas cánulas que se colocan en la nariz. Es especialmente útil para las personas que también tienen apnea del sueño o que viven a gran altura. Algunas personas con HAP acaban necesitando oxigenoterapia las 24 horas del día.
Cirugías de HAP
Si tiene una HAP grave o los medicamentos no ayudan a sus síntomas, su médico puede recomendarle uno de los dos tipos de operaciones:
Septostomía auricular: Un cirujano realiza una abertura entre las cámaras superiores de los lados izquierdo y derecho de su corazón para reducir la presión en un lado. Este procedimiento puede tener efectos secundarios graves, por lo que los médicos no suelen recomendarlo.
Trasplantes de pulmón y corazón: Los médicos los recomiendan a personas que han probado sin éxito los fármacos para tratar su enfermedad y cuyo estado empeora.
Un trasplante puede mejorar su vida, pero es una cirugía seria. Puede tardar varios meses en recuperarse por completo. Aunque es posible que no necesite medicamentos para la HAP, tendrá que tomar fármacos para evitar que su cuerpo rechace los nuevos órganos... durante el resto de su vida. Antes de iniciar el tratamiento, es conveniente que hable con su médico sobre los beneficios y los riesgos.
