El médico explica qué es la neumonía andante, cómo se transmite y cómo prevenir el contagio de este tipo infeccioso de neumonía.
Puede parecer un resfriado
Neumonía andante es como algunas personas describen un caso leve de neumonía. El médico puede llamarla neumonía atípica porque no es como los casos más graves.
La causa suele ser una infección pulmonar. Muchas cosas pueden causarla, entre ellas:
-
Bacterias
-
Virus
-
Hongos
-
Productos químicos
-
Alimentos inhalados
La neumonía deambulatoria suele deberse a una bacteria llamada "Mycoplasma pneumoniae".
Probablemente no tengas que quedarte en la cama o en el hospital. Puede que incluso te sientas lo suficientemente bien como para ir a trabajar y seguir con tu rutina, igual que con un... resfriado.
¿Quién la padece?
Cualquiera puede contraerla. La neumonía andante por micoplasma es más frecuente en niños, reclutas militares y adultos menores de 40 años.
Las personas que viven y trabajan en lugares concurridos -como escuelas, dormitorios, cuarteles militares y residencias de ancianos- tienen más probabilidades de entrar en contacto con ella.
El final del verano y el otoño son las épocas del año en las que es más frecuente la neumonía caminante. Pero las infecciones pueden producirse durante todo el año.
¿Es contagiosa?
La neumonía andante se contagia a través de los estornudos o la tos. Pero se propaga lentamente. Si la contraes, puedes ser contagioso (lo que significa que puedes contagiar a otras personas) hasta 10 días.
Los investigadores creen que hace falta un contacto muy estrecho con una persona infectada para que una persona sana se contagie de la neumonía andante. Aun así, hay brotes generalizados cada 4 u 8 años.
Síntomas
Los síntomas suelen comenzar entre 15 y 25 días después de la exposición al micoplasma y empeoran lentamente en un plazo de 2 a 4 días. Usted puede tener:
-
Dolor en el pecho... cuando respira profundamente.
-
Una tos... que puede presentarse con espasmos violentos
-
Síntomas leves?parecidos a los de la gripe, como?fiebre y escalofríos
-
Dolor de garganta
-
Dolor de cabeza
-
Cansancio
-
Debilidad... que puede durar después de que desaparezcan otros síntomas
Algunas personas con neumonía caminante pueden tener también una infección de oído, anemia o una erupción cutánea.
Si tiene una nueva tos, fiebre o dificultad para respirar, llame a su médico para hablar sobre si podría ser COVID-19, la enfermedad causada por el nuevo coronavirus.
Diagnóstico
Los síntomas generalmente comienzan entre 15 y 25 días después de la exposición al micoplasma y empeoran lentamente durante 2 a 4 días. Puedes tener:
-
Dolor en el pecho... cuando se respira profundamente
-
Una tos... que puede presentarse con espasmos violentos
-
Síntomas leves?parecidos a los de la gripe, como?fiebre y escalofríos
-
Dolor de garganta
-
Dolor de cabeza
-
Cansancio
-
Debilidad... que puede durar después de que desaparezcan otros síntomas
Algunas personas con neumonía caminante pueden tener también una infección de oído, anemia o una erupción cutánea.
Si tiene una nueva tos, fiebre o dificultad para respirar, llame a su médico para hablar sobre si podría ser COVID-19, la enfermedad causada por el nuevo coronavirus.
Tratamiento
Muchos medicamentos de venta libre para el resfriado y la gripe pueden no aliviar todos los síntomas.
Su médico puede recetarle antibióticos. Estos deberían hacer que te sientas mejor en pocos días.
Informa a tu médico de cualquier otro medicamento que tomes o pienses tomar. Bebe mucho líquido y descansa durante mucho tiempo.
Puedo contraer la neumonía deambulatoria más de una vez?
Es posible. Es posible que tengas cierta?inmunidad?durante un tiempo, pero no está claro cuánto dura. Si vuelves a contraerla, puede ser más leve que la primera vez.
Prevención
No existe una vacuna para la infección por micoplasma, por lo que no se puede prevenir por completo. Pero puedes tomar algunas medidas para reducir las posibilidades de contraerla:
-
Haz ejercicio, sigue una dieta equilibrada y duerme lo suficiente para que tu cuerpo esté sano y pueda resistir mejor la infección.
-
Lávate las manos... a menudo. Es una de las mejores maneras de evitar que los gérmenes se propaguen.
-
No fumes... Fumar... daña tus pulmones, y los pulmones dañados son más propensos a infectarse.
-
Cúbrete la boca con un pañuelo o con la manga cuando tosas o estornudes. Pide a los demás que hagan lo mismo. La tos y los estornudos son las principales vías de contagio de estas infecciones.