Inmunoterapia para el cáncer de pulmón: ¿Cuáles son sus opciones de tratamiento?
Este tipo de tratamiento, denominado inmunoterapia, ayuda a su sistema inmunitario a combatir el cáncer de forma muy parecida a como lo hace con los resfriados y los virus.
Reforzar el sistema inmunitario
Los glóbulos blancos son la principal respuesta del organismo a los ataques de gérmenes y células anormales como las que causan el cáncer. Otra forma que tiene nuestro cuerpo de luchar contra las enfermedades es atacar a los antígenos. Así se denomina a cualquier sustancia que el organismo no reconoce y contra la que trabaja.
Desde la década de 1970, los investigadores del cáncer han buscado formas de ayudar a nuestro sistema inmunitario a encontrar y combatir el cáncer. Los médicos creen que nuestro cuerpo sabe que las células cancerosas son extrañas y las combate al principio. Pero luego, como los insectos que se hacen resistentes a ciertos pesticidas, las células cancerosas cambian. Hacen que nuestro cuerpo piense que son inofensivas para que nuestro sistema de defensa no las ataque.
El objetivo de la inmunoterapia es conseguir que el organismo vuelva a luchar contra el cáncer y lo elimine por completo. Lo hace de dos maneras:
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Ayuda a que su sistema inmunológico trabaje más.
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Coloca una diana en las células cancerosas para que su sistema inmunitario pueda encontrarlas y destruirlas
Quién puede recibir este tratamiento?
Los médicos pensaron durante mucho tiempo que la inmunoterapia no funcionaría para el cáncer de pulmón no microcítico (CPNM) y el cáncer de pulmón microcítico (CPM), los dos tipos más comunes. Pero en los últimos años se han producido varios avances.
Cuando se diagnostica un cáncer de pulmón, la enfermedad se encuentra en una fase avanzada. Las opciones de tratamiento se limitaban antes a la cirugía, la quimioterapia y la radiación. Su médico puede sugerirle la inmunoterapia si otras opciones no han funcionado o si su tumor tiene restos de ciertas proteínas.
¿Qué tipos de tratamientos están aprobados?
La FDA ha aprobado varios tratamientos de inmunoterapia y otros se están probando en ensayos clínicos. Hay cuatro tipos de tratamientos de inmunoterapia que se están utilizando o probando para el cáncer de pulmón:
Inhibidores del punto de control: El sistema inmunitario normalmente tiene controles y equilibrios para no entrar en una fase de sobrecarga y atacar a las células normales. Los tumores que producen unas proteínas denominadas PD-L1 activan estos puntos de control y ralentizan el sistema inmunitario. Otro objetivo de estos medicamentos es el CTLA-4, una proteína de las células T que normalmente ayuda a mantenerlas bajo control... Los inhibidores de los puntos de control reinician la respuesta del sistema inmunitario para que pueda volver a combatir el cáncer.
Anticuerpos monoclonales. Nuestro cuerpo produce anticuerpos para combatir sustancias extrañas. Estas versiones artificiales actúan como los anticuerpos normales, pero se dirigen a las células cancerosas.
Vacunas: Pueden prevenir o tratar la enfermedad. No existen vacunas aprobadas por la FDA para el tratamiento o la prevención del cáncer de pulmón, pero se están probando algunas.
Terapia celular adoptiva: El médico extrae las células T y las trata con sustancias químicas que combaten el cáncer. Se multiplican en un laboratorio y se vuelven a introducir en el organismo, donde destruyen las células cancerosas. Los ensayos están en curso.
¿Qué fármacos están disponibles actualmente?
La FDA ha aprobado varios inhibidores de puntos de control en los últimos años para tratar el cáncer de pulmón, entre ellos:
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Atezolizumab (Tecentriq)
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Cemiplimab (Libtayo)
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Duryalumab (Imfinzi)
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Ipilimumab (Yervoy)
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Nivolumab (Opdivo)
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Pembrolizumab (Keytruda)
Los anticuerpos monoclonales aprobados por la FDA para el cáncer de pulmón incluyen bevacizumab (Avastin) y ramucirumab (Cyramza). Estos fármacos cortan los nutrientes que ayudan a crear los vasos sanguíneos que alimentan el crecimiento del cáncer. Otros se están probando en ensayos clínicos. También lo son los tratamientos con vacunas y la terapia celular adoptiva.
¿Cómo se toman estos medicamentos?
Probablemente recibirá la medicación por vía intravenosa. El tratamiento puede llevarse a cabo en la consulta del médico o en una clínica ambulatoria del hospital. Los efectos secundarios suelen ser consecuencia del refuerzo del sistema inmunitario. Puede notar:
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Fiebre/escalofríos
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Fatiga
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Erupciones cutáneas
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Diarrea
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Dolores en las articulaciones o en los músculos
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Vómitos/náuseas
A veces, estos fármacos funcionan demasiado bien y su sistema inmunitario se dispara. Eso podría provocar efectos secundarios más graves, como inflamación de los pulmones, el hígado, los riñones o las glándulas tiroides e hipófisis, o trastornos autoinmunes que pueden dañar un órgano o una glándula. Alerta a tu médico desde el principio sobre cualquier problema secundario. Cuanto antes se traten, menos probabilidades habrá de que empeoren.
La inmunoterapia es una de las formas más prometedoras de tratamiento del cáncer de pulmón que han aparecido en décadas. Los numerosos ensayos clínicos actuales y previstos que prueban su eficacia son una prueba evidente. Los médicos esperan que resulte ser un arma eficaz en su lucha constante contra el cáncer de pulmón.
