Si padece un cáncer de pulmón metastásico, puede considerar la posibilidad de recibir inmunoterapia. He aquí cómo saber si es adecuada para usted.
Los científicos siguen investigando las inmunoterapias para el cáncer de pulmón, como los inhibidores de puntos de control, las vacunas terapéuticas y la terapia celular adoptiva. También están estudiando si las combinaciones de estos fármacos pueden ser útiles.
Los siguientes fármacos de inmunoterapia han sido aprobados para su uso en el cáncer de pulmón no microcítico avanzado. Todos ellos son inhibidores del punto de control:
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Atezolizumab (Tecentriq)
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Cemiplimab (Libtayo)
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Durvalumab (Imfinzi)
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Nivolumab (Opdivo)
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Pembrolizumab (Keytruda)
Los puntos de control inmunitarios tienen por objeto frenar las defensas naturales del organismo para que no dañen los tejidos sanos. Los fármacos bloquean las proteínas (PD-1, PD-L1) que impiden que el organismo elimine el tumor.
Pero la inmunoterapia no funciona en todos los tipos de CPNM metastásico y no es adecuada para todas las personas que padecen la enfermedad. ¿Cómo saber si es adecuada para usted?
La inmunoterapia como primer tratamiento
Los científicos saben que los tumores de pulmón con niveles elevados de la proteína PD-L1 tienen más probabilidades de responder al pembrolizumab que a los demás tratamientos aprobados. Aproximadamente un tercio de las personas con CPNM en fase avanzada tienen niveles muy altos de PD-L1.
Si tiene cáncer de pulmón metastásico con PD-L1 en más de la mitad de las células, puede utilizar pembrolizumab de inmediato. No tendrá que probar primero la quimioterapia u otros fármacos... Atezolizumab y pembrolizmab se utilizan a veces en combinación con otros tratamientos.
Si tiene un cambio en sus genes (conocido como mutación) llamado receptor del factor de crecimiento epidérmico (EGFR) o quinasa del linfoma aplásico (ALK), no debe recibir inmunoterapia como primer tratamiento. Otro tipo de tratamiento llamado terapia dirigida reducirá mejor el tumor.
Inmunoterapia como segundo tratamiento
Si tiene un cáncer de pulmón en fase avanzada que no ha respondido a la quimioterapia con platino o que ha empezado a reaparecer después de la quimioterapia u otros tratamientos farmacológicos, su médico puede sugerirle que pruebe un inhibidor del punto de control. Tanto nivolumab como atezolizumab están aprobados para cualquier persona con CPNM avanzado que ya haya probado la quimioterapia, independientemente de los niveles de PD-L1 en los tumores. Incluso si la biopsia de su tumor no muestra PD-L1, la inmunoterapia puede funcionar en su caso.
El pembrolizumab y el durvalumab también se utilizan a veces para tratar el cáncer de pulmón avanzado después de que se hayan administrado otros tratamientos.
¿Quién no debe recibir este tratamiento?
Si usted padece una enfermedad autoinmune -como el lupus, la tiroiditis, la enfermedad de Crohn o la artritis reumatoide- la inmunoterapia puede no ser segura para usted. Su médico también querrá asegurarse de que cualquier infección activa o crónica está bajo control antes de iniciar este tipo de tratamiento.