Un nuevo estudio cuestiona la idea convencional de utilizar esteroides y antiinflamatorios como el ibuprofeno para tratar el dolor lumbar si el ejercicio y otras terapias no farmacológicas no funcionan de inmediato. Según el estudio, esos medicamentos alivian el dolor agudo, pero en realidad pueden aumentar las posibilidades de que la persona desarrolle un dolor crónico.
El uso de antiinflamatorios podría prolongar el dolor de espalda
Por Ralph Ellis
Un nuevo estudio cuestiona la idea convencional de utilizar esteroides y antiinflamatorios como el ibuprofeno para tratar el dolor lumbar si el ejercicio y otras terapias no farmacológicas no funcionan de inmediato.
Estos medicamentos alivian el dolor agudo, pero en realidad pueden aumentar las posibilidades de que la persona desarrolle dolor crónico, según el estudio publicado en Science Translational Medicine. El estudio indica que la inflamación es una parte normal de la recuperación de una lesión dolorosa y que la inhibición de la inflamación puede dar lugar a un dolor crónico más difícil de tratar.
Durante muchas décadas, la práctica médica habitual ha sido tratar el dolor con fármacos antiinflamatorios, afirma Jeffrey Mogil, profesor de psicología de la Universidad McGill, en un comunicado de prensa de la escuela. Pero descubrimos que esta solución a corto plazo podría acarrear problemas a largo plazo".
Los investigadores se fijaron en el dolor lumbar porque es muy común, ya que el 25% de los adultos de EE.UU. dicen haber tenido dolor lumbar en los tres meses anteriores, según los CDC. El dolor de espalda agudo se define como el que dura menos de cuatro semanas, mientras que el crónico dura más de 12 semanas.
Al examinar las muestras de sangre, los investigadores descubrieron que las personas cuyo dolor lumbar se había resuelto presentaban una elevada inflamación impulsada por los neutrófilos, un tipo de glóbulo blanco que ayuda al organismo a combatir las infecciones, según el estudio.
Los neutrófilos dominan las primeras fases de la inflamación y preparan el terreno para la reparación del daño tisular. La inflamación se produce por una razón, y parece que es peligroso interferir en ella, dijo Mogil en el comunicado de prensa.
El equipo de investigación descubrió que el bloqueo de los neutrófilos en ratones prolongaba el dolor en los animales hasta 10 veces. El dolor también se prolongaba cuando los ratones recibían fármacos antiinflamatorios y esteroides, dice el comunicado de prensa.
La Universidad McGill dijo que otros estudios respaldan los hallazgos. La escuela citó un análisis de 500.000 personas en el Reino Unido. El análisis encontró que aquellos que tomaban medicamentos antiinflamatorios para el dolor eran más propensos a tener dolor entre 2 y 10 años después.
Aunque afirmaron que el estudio sugiere que ha llegado el momento de reconsiderar el tratamiento del dolor, los investigadores pidieron que se realicen ensayos clínicos en humanos, y no sólo observaciones de personas con lumbalgia.
Los expertos advirtieron sobre la conveniencia de aceptar los resultados sin una mayor investigación.
El Dr. Steven J. Atlas, director de la Red de Investigación y Mejora de la Calidad de la Atención Primaria del Hospital General de Massachusetts, declaró a The New York Times que el estudio es intrigante, pero requiere más estudios.
