¿Ese dolor agudo en el costado y la dificultad para orinar se deben a un cálculo renal? Una simple prueba de imagen puede permitírselo.
¿Cómo puede saber con seguridad que es un cálculo renal lo que le aqueja?
Conozca sus síntomas
Dado que los cálculos renales pueden afectar a casi todo el mundo, es importante conocer los signos de esta afección común. Estos pueden incluir:
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Dolor en la espalda o en el costado
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Dolor que se traslada a la parte baja del vientre
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Muchas ganas de orinar
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Dolor al orinar
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Orina turbia o de color rosa, rojo o marrón
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Náuseas con dolor de estómago
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Fiebre y escalofríos
Puede tener uno o varios de estos síntomas. Depende del tamaño y la ubicación del cálculo renal.
Diagnóstico
La única manera de saber con seguridad que tiene un cálculo renal es acudir a un médico para que pueda hacer un diagnóstico. Debes pedir cita si:
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No puede estar cómodo de pie, sentado o tumbado
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Tiene náuseas y un dolor grave en el vientre
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Notar sangre en la orina
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Tener dificultades para intentar orinar
Prepárate para describir tus síntomas, incluyendo cuándo empezaron. Es conveniente que los anote, junto con una lista de los medicamentos y vitaminas y suplementos que toma.
También debe intentar llevar un registro de cuánto bebe y orina en un período de 24 horas. Si tu médico cree que puedes tener cálculos renales, es posible que te pida una o varias pruebas.
Pruebas para detectar los cálculos renales
Hay varias formas en las que su médico puede hacer pruebas para detectar cálculos renales. Entre ellas se encuentran:
Pruebas de imagen: Los médicos tienen varias maneras de echar un vistazo dentro de su cuerpo para ver lo que está pasando. Pueden probar:
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Radiografías. Pueden encontrar algunos cálculos, pero los pequeños podrían no aparecer.
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Tomografía computarizada. Un tipo de exploración más profunda se llama tomografía computarizada, o TC. Un TAC es un tipo especial de radiografía. El equipo toma imágenes desde varios ángulos. A continuación, un ordenador reúne todas las radiografías, denominadas cortes, en imágenes más detalladas que las que pueden ofrecer las radiografías normales. La tomografía computarizada se utiliza a menudo en las emergencias, porque proporciona imágenes tan claras y rápidas que ayudan a los médicos a hacer un diagnóstico rápido.
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Ecografía. Esta prueba utiliza ondas sonoras para crear imágenes de su interior.
Si tienes un cálculo renal, estas pruebas pueden ayudar a informar a tu médico del tamaño y la ubicación exacta del mismo.
No es necesario que haga nada para prepararse para una prueba de imagen. Es posible que le digan que beba más líquido para ayudar a expulsar el cálculo.
Análisis de sangre: Pueden ayudar a averiguar si tiene un exceso de ciertas sustancias en la sangre, como el ácido úrico o el calcio, que pueden provocar la formación de cálculos.
Análisis de orina: Permiten detectar en la orina los minerales que forman los cálculos o averiguar si le faltan sustancias que ayudan a impedir su formación. Se puede recoger una muestra de orina a lo largo de uno o dos días.
Después de su diagnóstico
Toda esta información es importante para que su médico decida cuál es el mejor tratamiento.
Si el dolor no es muy fuerte, el médico puede adoptar una actitud de espera, con la esperanza de que usted pueda expulsar el cálculo por sí mismo. Un medicamento llamado tamsulosina (Flomax) relaja el uréter para ayudar a expulsar el cálculo.
En el caso de los cálculos demasiado grandes o de los que causan daños, puede ser necesario un tratamiento con ondas de sonido o una intervención quirúrgica.
Es posible que el médico quiera estudiar el cálculo una vez que haya salido del cuerpo, ya sea mediante una intervención quirúrgica o porque lo haya expulsado al orinar. Saber qué hay en el cálculo puede ayudar a su médico a evitar que le salga otro.