El seguimiento del ciclo de fertilidad mediante la toma de la temperatura, el uso de kits de detección de la ovulación o la comprobación del moco cervical le ayudará a determinar cuándo es más fértil.
A medida que avanza tu ciclo, tu cuerpo da todo tipo de pistas para mostrar cuándo ovulas. Sólo tienes que saber cómo buscarlas.
Por qué molestarse en registrar la fertilidad?
Como parte de la cartografía, necesitará:
-
Hacer pruebas para saber si estás ovulando y cuándo.
-
Tómate la "temperatura corporal basal", es decir, tu temperatura cuando estás en reposo.
-
Examina tu moco cervical.
-
Controla cuándo empieza tu periodo menstrual.
-
Anota cuándo tienes relaciones sexuales.
Conocer esta información puede marcar la diferencia. Aunque la pareja media concibe tras unos 5 o 6 meses de intentos, las personas que saben cómo averiguar si la mujer ovula, o libera un óvulo, y cuándo lo hace, y que mantienen relaciones sexuales con regularidad durante ese tiempo, mejoran sus probabilidades de quedarse embarazadas.
Pruebas y dispositivos para predecir la ovulación
Las pruebas y dispositivos caseros te ofrecen una forma diferente de controlar tu ciclo de fertilidad. Algunas personas los utilizan junto a las técnicas tradicionales, mientras que otras los usan como sustituto.
Kits de predicción de la ovulación (OPK). Puedes encontrarlos en la mayoría de las farmacias, y cuestan entre 20 y 75 dólares al mes. Analizan la cantidad de hormona luteinizante (LH) en la orina.
Los kits pueden indicar cuándo se produce un aumento de los niveles de LH entre 12 y 36 horas antes de la ovulación. Los estudios demuestran que los kits tienen una precisión superior al 90%.
Las OPK más recientes son digitales. Son un poco más caras, pero tienen una pantalla más fácil de leer.
Pruebas de ovulación con progesterona. Puedes encontrarlas en las farmacias o pedirlas por Internet por unos 40 dólares al mes. Analizan el nivel del metabolito de la progesterona en tu orina durante varios días. Los niveles de metabolitos suelen aumentar entre 24 y 36 horas después de la ovulación, por lo que encontrar un metabolito de progesterona en la orina puede significar que has ovulado...
Microscopios de saliva o de ferina. Se trata de pequeños microscopios, a veces diseñados para parecerse a los estuches de pintalabios, que examinan una muestra de tu saliva. A medida que los niveles de estrógeno aumentan a medida que te acercas a la ovulación, los niveles de sal en tu saliva también aumentan. Cuando se observa la saliva bajo el microscopio, la sal crea un patrón parecido al de las hojas de una planta de helecho.
Los fabricantes afirman que este método te permite predecir tu ovulación en 24-72 horas. Cuestan entre 30 y 50 dólares y, a diferencia de otras pruebas, no es necesario comprar suministros adicionales caros. Sin embargo, los estudios no los han considerado tan fiables. No parecen funcionar para todo el mundo, y los resultados pueden ser difíciles de interpretar.
Monitores de fertilidad. Pueden ser caros, pero tienen un beneficio importante. Mientras que la mayoría de los predictores de la ovulación sólo ofrecen una ventana fértil de hasta 2 días, éstos pueden mostrar hasta 6 ó 7 días de fertilidad potencial para cada ciclo.
Los monitores funcionan de diferentes maneras. El monitor de fertilidad Clearblue mide los niveles de LH y de otra hormona, la e3G, en la orina. Los resultados son fáciles de entender y se muestran en una pantalla digital. También se almacenan en la memoria del monitor. Los estudios demuestran que su precisión es superior al 90%. El dispositivo en sí cuesta algo más de 100 dólares, y las varillas de prueba cuestan unos 40 dólares o más al mes.
El monitor de fertilidad OvaCue es un monitor informatizado que utiliza un enfoque diferente. Comprueba los niveles de electrolitos... en la saliva. Es fácil de usar (sólo hay que introducir un sensor en la boca), almacena los datos y muestra los resultados con claridad. Un sensor vaginal puede confirmar la ovulación. Pero los estudios tienen resultados contradictorios sobre la eficacia de este método. El monitor cuesta 269 dólares, y no necesitas ningún otro material.
Aunque todas estas pruebas y dispositivos pueden ser útiles, ten en cuenta que no son perfectos. Si tienes una afección médica como el síndrome de ovario poliquístico (SOP) o tomas medicamentos, es posible que no den resultados precisos. Dado que existen tantos tests y monitores de ovulación, siempre es una buena idea preguntar a tu médico cuál deberías probar.
Cómo tomar la temperatura
Comprobar tu temperatura corporal basal es una forma de predecir cuándo ovulas, y ha ayudado a las mujeres a quedarse embarazadas. Pero investigaciones recientes han demostrado que puede no funcionar tan bien como los expertos pensaban anteriormente.
Antes de la ovulación, la temperatura corporal basal suele ser de 97 a 97,5 F, aunque estas cifras pueden variar de una persona a otra.
Durante la ovulación, el cuerpo libera la hormona progesterona, que provoca un ligero aumento de la temperatura uno o dos días después, normalmente de 0,5 grados. Su temperatura probablemente se mantendrá alta hasta que comience su siguiente ciclo. Si te quedas embarazada durante ese ciclo, tu temperatura se mantendrá alta más allá.
Ese medio grado de diferencia puede no parecer mucho, pero cuenta. Además, ten en cuenta que el cambio de temperatura se produce después de la ovulación, lo que significa que una vez que sube, probablemente ya has perdido la oportunidad de quedarte embarazada en ese ciclo. Sin embargo, al registrar tu temperatura cada día durante varios ciclos, puedes empezar a ver un patrón que te permita predecir cuándo eres más fértil.
Consejos para tomar y entender tu temperatura corporal basal
Comience a tomarse la temperatura el primer día de su periodo. Necesitará un termómetro que mida por décimas de grado.
Asegúrate de tomarla más o menos a la misma hora todos los días, preferiblemente antes de levantarte de la cama por la mañana.
No haga nada -comer, beber, fumar o incluso moverse- antes de tomarse la temperatura.
Puedes tomarte la temperatura como quieras, por vía oral, rectal o vaginal, pero asegúrate de utilizar la misma técnica cada vez.
Anota tu temperatura cada día en tu tabla de fertilidad. Puedes hacer un gráfico, con cada día de tu ciclo en la parte inferior y las temperaturas a la izquierda, conectando los puntos a medida que avanzas.
Ten en cuenta que es probable que tengas algunas lecturas extrañas ocasionales -temperaturas altas o bajas- que no encajen en el patrón general. Si no ocurren con frecuencia, no se preocupe por ellas.
Al cabo de unos meses, es posible que empiece a ver un patrón que muestre cuándo suele ovular. Es posible que quieras que tu médico vea el gráfico para que te ayude a interpretarlo.
Aunque el uso de gráficos está muy extendido, no es infalible. Algunas mujeres pueden no ver surgir un patrón claro en su temperatura. Dado que la ovulación puede producirse en distintos momentos del ciclo de un mes a otro, es posible que tu gráfico no prediga cuándo vas a ovular.
El moco cervical y la ovulación
Aunque puede llevar un poco de trabajo de detective -y puede ser un poco desagradable para algunos-, aprender a detectar los cambios en tu moco cervical es una forma fácil y eficaz de predecir cuándo ovulas. Un estudio afirma que es más preciso que el registro de la temperatura corporal basal, aunque también se puede utilizar al mismo tiempo.
Así es como funciona: El moco que libera el cuello uterino, un cuello de tejido que conecta la vagina y el útero, tiene diferentes propósitos. Cuando no estás ovulando o te acercas a la ovulación, el moco cervical impide que los espermatozoides entren en el útero cuando no podrías quedarte embarazada de todos modos.
Cuando te acercas a la ovulación, tu cuello uterino libera más mucosidad. Cuando eres más fértil, el moco cervical es elástico y transparente, como la clara del huevo. En este momento, protege a los espermatozoides y les ayuda en su viaje hacia el óvulo.
En el caso de las mujeres con un ciclo de 28 días, el patrón de cambios en su moco cervical podría ser algo así:
-
Días 1-5: Se produce la menstruación.
-
Días 6-9: La vagina está seca con poca o ninguna mucosidad.
-
Días 10-12: Aparece un moco pegajoso y espeso, que gradualmente se vuelve menos espeso y más blanco.
-
Días 13-15: El moco se vuelve fino, resbaladizo, elástico y claro -como la clara del huevo-. Esta es la etapa más fértil.
-
Días 16-21: El moco vuelve a ser pegajoso y espeso.
-
Días 22-28: La vagina se vuelve seca.
Pero tu ciclo podría ser muy diferente a este patrón, por lo que es útil marcar los cambios en tu propia tabla de fertilidad.
Lo ideal es que compruebes tu moco cervical todos los días, posiblemente cada vez que vayas al baño. Si frotas un poco de papel higiénico o tus dedos -después de lavarte las manos- sobre la abertura de tu vagina, deberías poder encontrar moco cervical. Examina el color y la consistencia entre tus dedos, y anota lo que encuentres.
Posición cervical y ovulación
Otra forma de saber en qué momento del ciclo de fertilidad te encuentras es comprobar la posición del cuello del útero. Si introduces dos dedos en la vagina, deberías sentir el cuello del útero al final. Antes de la ovulación, debe sentirse duro y seco, como la punta de la nariz.
Durante la ovulación, deberías notar que parece haberse desplazado hacia arriba y que se siente más suave y húmedo. Pero siempre debes asegurarte de que tus manos están limpias antes de empezar a hurgar. Y como puede ser difícil saber exactamente qué es lo que estás buscando, tal vez quieras hablar primero con tu médico.