Conozca algunas de las últimas herramientas que puede utilizar para controlar su insuficiencia cardíaca, desde dispositivos médicos hasta aplicaciones y mensajes de texto.
Tecnología innovadora para ayudar a controlar la insuficiencia cardíaca
Por el doctor Wai Hong Wilson Tang, en declaraciones a Hallie Levine
Aunque hemos avanzado mucho en el tratamiento y la gestión de la insuficiencia cardíaca, todavía podemos hacerlo mejor. En 2030, más de 8 millones de adultos padecerán insuficiencia cardíaca, lo que supone un aumento del 50% respecto a casi dos décadas antes. Tenemos que hacer todo lo posible para dar a estas personas lo que necesitan para prosperar después de su diagnóstico.
Ahí es donde entran en juego la salud y las tecnologías digitales. Hay estudios que demuestran que pueden ayudar tanto a los médicos como a los pacientes a gestionar la insuficiencia cardíaca y mejorar la vida con esta enfermedad. Esto es lo que me parece más prometedor.
La monitorización a distancia. Aunque ya está disponible desde hace varios años, se puso realmente en práctica durante la pandemia de COVID-19, cuando muchas personas con insuficiencia cardíaca optaron por aislarse en casa para protegerse. Normalmente, controlamos la actividad cardíaca de los pacientes con un monitor Holter, un dispositivo que se coloca en la consulta del médico. Esto nos permite comprobar que el plan de tratamiento de la persona está funcionando. Pero eso se hizo más difícil durante la pandemia. En lugar de ello, a menudo recurrimos a un dispositivo conocido como parche Zio, un pequeño parche resistente al agua que se coloca en el pecho y que los proveedores pueden enviar directamente a los pacientes. Se lo ponían durante dos semanas y luego lo devolvían a la empresa para poder analizar sus datos cardíacos.
Dispositivos implantables. Ahora podemos llevar la monitorización a distancia un paso más allá e implantar dispositivos que permiten seguir la salud del corazón en casa. Uno de los nuevos es el sistema CardioMEMS HF. Se trata de un diminuto aparato que detecta la presión y que el médico introduce en la arteria pulmonar durante la intervención quirúrgica. A continuación, se utiliza una unidad electrónica doméstica para tomar lecturas diarias de la presión arterial pulmonar en casa, y esos datos se envían al equipo médico de insuficiencia cardíaca para su revisión. Un estudio conocido como ensayo CHAMPION descubrió que el uso de este tipo de dispositivos implantables reduce las hospitalizaciones por insuficiencia cardíaca en un 28%. Tiene sentido: si su médico consigue controlar la presión arterial pulmonar, debería evitar que la insuficiencia cardíaca empeore.
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Varias apps. Tanto Apple como Fitbit tienen apps similares a un ECG que puedes utilizar para comprobar el ritmo de tu corazón. (Un electrocardiograma, o ECG, es una prueba que suele hacerse en la consulta del médico y que mide la actividad eléctrica del corazón). Pueden detectar un latido irregular o un aumento de la frecuencia cardíaca, lo que puede ayudar a diagnosticar y tratar la insuficiencia cardíaca. El otro día conocí a una nueva paciente con insuficiencia cardíaca que me dijo que le habían diagnosticado después de que su reloj Apple se diera cuenta de que su frecuencia cardíaca se disparaba. Afortunadamente, su enfermedad se detectó en las primeras fases. Pero sin él, quizá no se le hubiera diagnosticado hasta mucho más tarde, porque no tenía ningún otro síntoma de insuficiencia cardíaca, como sensación de falta de aire, hinchazón de tobillos o piernas, o agotamiento...
Las aplicaciones también pueden ayudarle a gestionar los aspectos cotidianos de su vida. Una aplicación, Health Failure Storylines, desarrollada por la Sociedad Americana de Insuficiencia Cardíaca, permite registrar las constantes vitales diarias, como el peso, la tensión arterial y la frecuencia cardíaca, así como la medicación, la actividad física e incluso el estado de ánimo. También cuenta con un rastreador de síntomas, que puede ser útil para averiguar cómo está funcionando una medicación, así como si está causando algún efecto secundario.
Mensajes de texto. Una parte importante del tratamiento de la insuficiencia cardíaca es asegurarse de tomar los medicamentos con regularidad, seguir una dieta sana y hacer ejercicio con regularidad. Aquí es donde pueden ser útiles los mensajes de texto de su médico o centro de tratamiento. Un pequeño estudio realizado con 60 personas con insuficiencia cardíaca descubrió que al inscribirlas en un programa de recordatorio por mensaje de texto, junto con un programa de control remoto de la presión arterial y el peso, era un 50% menos probable que acabaran hospitalizadas. Otras investigaciones demuestran que los mensajes de texto mejoran el cumplimiento de la medicación en todo tipo de enfermedades, incluidas las cardíacas.
¿En resumen? Los estudios demuestran que este tipo de tecnologías y programas pueden reducir las probabilidades de ser ingresado en un hospital o de morir por insuficiencia cardíaca. Pero, aunque todos ellos son útiles, no pueden sustituir a la visita en persona al médico. Sigue siendo necesario un cuidadoso equilibrio entre el contacto electrónico y el humano. Cuando vemos a los pacientes cara a cara, somos capaces de establecer una verdadera relación, algo que no siempre podemos hacer a través de un texto o de Internet. Pero si se utilizan conjuntamente, tienen el potencial de revolucionar la atención al paciente.