Consejos para controlar el insomnio a medida que se envejece

El insomnio es un trastorno del sueño común, especialmente entre los adultos mayores. Averigüe qué puede esperar y cuándo debe acudir a su médico.

¿Qué es el insomnio?

Una persona con insomnio tiene dificultades para conciliar el sueño y permanecer dormida. No dormir lo suficiente por la noche puede provocar somnolencia diurna e interferir en sus actividades diarias.

Qué cambios esperar con el sueño a medida que se envejece

A medida que envejecemos, nuestro cuerpo experimenta muchos cambios. Algunos de estos cambios afectan significativamente a nuestra calidad y patrones de sueño.? Algunos de los desafíos más comunes con el sueño a medida que envejecemos incluyen:

  • Despertarse temprano por la mañana

  • Cansarse más temprano por la noche

  • Despertarse múltiples veces en medio de la noche

  • Tener insomnio

A medida que envejecemos, nuestro cuerpo no puede procesar tan bien los sistemas de sueño y vigilia. Esto se debe a los cambios en las hormonas. Por ejemplo, los adultos que envejecen producen menos cantidad de una hormona llamada melatonina. Esto es importante porque la melatonina regula nuestro sueño. Cuando tenemos menos cantidad de esta hormona, no dormimos tan bien.

Nuestros ciclos de sueño también cambian a medida que envejecemos. Un ciclo de sueño típico se divide en cuatro etapas: dos etapas de sueño ligero de movimientos oculares no rápidos (NREM), una etapa de sueño de ondas lentas o sueño NREM pesado, y una etapa final de sueño de movimientos oculares rápidos (REM) antes de que el ciclo comience de nuevo.

Las personas mayores suelen pasar menos tiempo en la fase NREM de "ondas lentas". Esto puede hacer que sean más propensas a despertarse a lo largo de la noche, dejándolas cansadas por la mañana. Muchas personas lo describen como una sensación de no haber descansado nunca lo suficiente por mucho que lo intenten, lo que les deja aturdidos y perezosos durante el día.

Síntomas del insomnio

Además de tener un sueño más ligero a medida que envejecemos, es habitual querer dormirse antes por la noche y despertarse antes por la mañana. También puede sentir la necesidad de dormir más tiempo por la noche o de hacer siestas a lo largo del día.

En la mayoría de los casos, estos cambios en el sueño son normales y no indican un problema de sueño. Sin embargo, si experimenta alguno de los siguientes síntomas con regularidad, es posible que se trate de un trastorno del sueño como el insomnio:

  • Tiene problemas para conciliar el sueño aunque se sienta cansado

  • Tiene problemas para volver a dormirse cuando se despierta

  • No se siente renovado después de una noche de sueño

  • Se siente irritable o con sueño durante el día

  • Tiene dificultad para mantenerse despierto cuando está sentado, viendo la televisión o conduciendo

  • Tener dificultad para concentrarse durante el día

  • Recurrir a los somníferos o al alcohol para conciliar el sueño

  • Tiene problemas para controlar sus emociones

Causas del insomnio

Muchas cosas pueden causar insomnio en los adultos mayores, incluyendo:

  • Cambios normales en los patrones de sueño que ocurren con la edad

  • Medicamentos, incluidos los antidepresivos, los medicamentos para tratar la presión arterial alta o los descongestionantes nasales

  • Otros trastornos del sueño, como la apnea del sueño o el síndrome de las piernas inquietas

  • Otras condiciones de salud, como demencia, Alzheimer, dolor crónico, diabetes o enfermedades respiratorias

  • Enfermedades mentales, incluidas la depresión y la ansiedad

  • Hábitos de vida, como la siesta o la falta de actividad física

  • Cafeína o alcohol cuando se consumen antes de acostarse

  • Fumar, especialmente antes de acostarse

  • Estrés crónico o que se prolonga durante mucho tiempo

Tratamiento del insomnio

Una de las primeras cosas que puede recomendar su médico es crear un entorno de dormitorio lo más acogedor y tranquilo posible. Lo ideal es que su dormitorio sea tranquilo, oscuro y con una temperatura inferior a los 75 grados Fahrenheit (unos 23 grados Celsius).

Debe utilizar la cama sólo para dormir. Intente evitar mirar el teléfono móvil, trabajar, jugar a videojuegos o ver la televisión en la cama. Su médico también puede recomendarle lo siguiente para ayudarle a dormir bien por la noche:

  • Haz ejercicio y come alimentos nutritivos.

  • Evita el tabaco y la cafeína.

  • Acuéstese sólo cuando esté cansado. Estar despierto en la cama puede ser perjudicial para un buen descanso nocturno. Si estás despierto en la cama durante 20 minutos sin sentir sueño, debes levantarte y mantenerte ocupado en otra habitación hasta que vuelvas a sentirte cansado.

  • Comprométase a levantarse a la misma hora cada mañana y evite las siestas durante el día.

  • Lleva un diario de sueño. Registra el tiempo que pasas dormido y despierto, el tiempo que tardas en dormirte cada noche y otros patrones importantes. Basándose en las notas de su diario de sueño, el médico puede decirle que restrinja su tiempo en la cama cada noche hasta que su sueño mejore. Una vez que pueda dormir al menos el 90% del tiempo que pasa en la cama, podrá empezar a dormirse más temprano.

Si estos tratamientos no son eficaces, el médico puede considerar la posibilidad de recetar medicamentos para el sueño.

La elección de la medicación adecuada para el insomnio en los adultos mayores requiere mucha consideración y cuidado. Algunos de estos medicamentos pueden provocar dependencia y riesgo de abstinencia. Siempre debe hablar con su médico antes de tomar cualquier medicamento para el insomnio.

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