Una práctica de yoga en silla proporciona muchos de los beneficios del yoga practicado en la esterilla y puede ser una opción si tienes problemas de movilidad o de salud.
Posturas de yoga en silla
Por Jodi Helmer
Las redes sociales están repletas de fotos de modelos de fitness que se retuercen en posturas que requieren fuerza, flexibilidad y equilibrio extremos, lo que puede hacerte pensar que el yoga no es para mí.
La doctora Nadine Kelly, fundadora de Yogi MD, quiere hacerte cambiar de opinión.
Tendemos a pensar que el yoga es un esfuerzo atlético que tiene que hacerse en una esterilla, dice Kelly. La práctica del yoga es mucho más que las [poses] físicas; la práctica incluye habilidades como la respiración, la regulación de tus emociones y la práctica del autocuidado.
¿Qué es el yoga en silla?
El yoga en silla, una forma suave de yoga que se realiza sentado o utilizando una silla para mantener el equilibrio, hace que la práctica sea más accesible. En el yoga en silla, es posible realizar posturas como la del gato/vaca, el guerrero, el saludo al sol y los pliegues hacia delante, todo ello sentado.
Kelly cree que la cita de Arthur Ashe, "Empieza donde estás, usa lo que tienes, haz lo que puedas", es perfecta para el yoga en silla.
Estás allí para trabajar y desafiarte a ti mismo, pero se trata de saber qué es lo correcto para ti, dice. Creo que las posturas de yoga se adaptan al cuerpo del alumno y no al revés.
Tanto si el yoga se practica en una silla como en la esterilla, la práctica sigue centrándose en los mismos principios básicos: centrarse en la respiración, prestar atención a los pensamientos y permanecer en el momento.
Los beneficios del yoga en silla
Las investigaciones demuestran que el yoga está relacionado con la disminución de los niveles de estrés, ansiedad y depresión, la reducción del colesterol y la presión arterial, la mejora de la energía, una mejor calidad del sueño, menos dolor y la reducción del índice de masa corporal. Matt Minard PT, DPT, fisioterapeuta de Atrium Health en Charlotte, NC, cree que esos beneficios se extienden al yoga en silla.
El yoga en silla es también un entrenamiento bueno y seguro para los principiantes.
Es una gran manera de trabajar su núcleo, explorar los diferentes rangos de movimiento de las articulaciones y dar prioridad al movimiento, dice Minard. Cuando te sientas o utilizas una silla para mantener el equilibrio, el factor de seguridad aumenta.
¿Quién debería probar el yoga en silla?
Aunque el yoga en silla suele promocionarse como una práctica para aquellos que pueden tener dificultades con la práctica en esterilla, cualquiera puede beneficiarse de este tipo de ejercicio suave.
Continuación
Kelly dice que el yoga en silla es especialmente adecuado para las personas que utilizan sillas de ruedas y las que se están rehabilitando después de cirugías, que viven con enfermedades crónicas o que tienen problemas de equilibrio que les dificultan bajarse a una esterilla de yoga. También es perfecto para un entrenamiento rápido durante la jornada laboral o mientras se viaja.
No se trata del resultado. No se trata de conseguir la postura perfecta, dice Kelly. Tanto si el yoga se imparte en la esterilla como en una silla, se trata de estar sano.
El yoga en silla también es ideal para los principiantes que podrían sentirse intimidados por una práctica tradicional en la esterilla, ya que ofrece una forma segura de aprender las posturas, añade Minard.
Dónde encontrar clases de yoga en silla
Puedes encontrar clases de yoga en silla en centros comunitarios, gimnasios y estudios de yoga. También hay muchas opciones en línea. En este video, Kelly proporciona instrucciones detalladas para una práctica corta de yoga en silla que es adecuada para todos los niveles.
Cómo empezar
Para practicar en casa, utiliza una silla robusta (una silla de oficina con ruedas o un sillón demasiado mullido no son apropiados para el yoga en silla). Minard sugiere una silla que coloque de forma natural las caderas ligeramente más altas que las rodillas y que permita poner los dos pies planos en el suelo.
Si los pies no están apoyados en el suelo, todo el peso recae en la columna vertebral, y si la silla es demasiado baja y las rodillas están por encima de las caderas, se produce un mayor impacto en las caderas, dice Minard. Lo que quieres es poder hacer movimientos lentos y controlados sin poner una tensión extra en la espalda o las caderas.
Asegúrate de que la silla está sobre una superficie estable, como una alfombra o una esterilla de yoga, para evitar que se deslice. También puedes colocar el respaldo de la silla contra una pared para conseguir más estabilidad, añade Minard.
Los accesorios de yoga como bloques, correas y bandas de resistencia que son comunes en las prácticas de estera no son necesarios para el yoga de la silla - a menos que desee un desafío adicional.
El yoga en silla es un buen punto de partida para utilizar los músculos que no has usado en un tiempo sin los riesgos potenciales de sobrecarga [de tus músculos y articulaciones] o de caída, dice Minard. Si la resistencia del peso de tu cuerpo no es suficiente desafío, puedes añadir a tu práctica de yoga en silla unas ligeras pesas de mano, unas pesas de tobillo o unas bandas de resistencia.
