El médico explica cómo tratar las rodillas despellejadas, los dedos rebanados y otros cortes y abrasiones.
Acude inmediatamente al médico si la herida es profunda, sangra mucho o tiene algo incrustado. Si se trata de un corte o raspón menor, esto es lo que debes hacer:
Limpiar el corte
Primero lávate las manos con agua y jabón.
A continuación, aclara el corte o el raspado con agua fría para eliminar la suciedad y los residuos. Mantén la zona bajo el grifo o vierte agua limpia sobre ella desde un vaso.?
No es necesario utilizar soluciones de limpieza más fuertes -como el peróxido de hidrógeno, el yodo o el alcohol de quemar- para tratar cortes y rasguños menores, ya que pueden irritar la herida. El agua fría y limpia debería ser suficiente para limpiar la herida.
Detener la hemorragia
Una pequeña cantidad de sangre puede ayudar a limpiar la herida. Los cortes y abrasiones más pequeños suelen dejar de sangrar por sí solos. Un corte en la cabeza o en la mano puede sangrar más porque esas zonas tienen muchos vasos sanguíneos.
Para detener la hemorragia, aplica una presión firme y directa con un paño limpio o una gasa. Sigue manteniendo la presión de forma constante.
No levantes el paño o la gasa para ver cómo está la herida, porque eso podría hacer que empezara a sangrar de nuevo. Si la sangre se filtra a través del apósito, pon más encima y sigue aplicando presión.
Si el corte está en la mano o el brazo, puedes ayudar a frenar la hemorragia levantándolo por encima de la cabeza.
Si el corte chorrea sangre o si no deja de sangrar, busca ayuda médica de inmediato.
Cuándo llamar al médico
La mayoría de los cortes y abrasiones menores no necesitan atención médica. Pero llame a su médico si:
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La herida está en la cara.
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Los bordes del corte son irregulares o se abren, el corte es profundo (1/4 de pulgada o más), o puedes ver grasa o músculo. Estos son signos de que puede necesitar puntos de sutura.
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No puedes sacar toda la suciedad o los restos de la herida, o la herida fue causada por algo muy sucio u oxidado.
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Tiene una herida punzante o un corte y no se ha vacunado contra el tétanos en los últimos 5 años.
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La herida es de una mordedura animal o humana.
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La zona lesionada se siente adormecida.
Cubrir el corte o la raspadura
Una vez que la hemorragia se ha detenido y la herida está limpia, debes cubrirla con una venda o gasa estéril y esparadrapo.
Si el corte es pequeño y está en una zona que no se ensucie ni se roce con la ropa, puedes decidir dejarlo al descubierto. Pero para la mayoría de las heridas, es una buena idea cubrirlas para ayudar a prevenir la infección o la reapertura de la herida.
Cambia el apósito o vendaje cada día o más a menudo si se ensucia.
La pomada antibiótica puede hacer que la infección sea menos probable. El uso de una fina capa de pomada antibiótica antes de aplicar el vendaje o el apósito de gasa ayudará a mantener los cortes y rasguños limpios y húmedos, y ayudará a frenar las cicatrices.
Esté atento a los signos de infección
Si la herida no está cicatrizando o notas alguno de estos signos de infección, llama a tu médico de inmediato:
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Enrojecimiento, hinchazón y calor
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Aumento del dolor
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Pus o drenaje del corte
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Fiebre
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Vetas rojas alrededor de la herida
Cuando la herida empieza a cicatrizar
Los pequeños cortes y rasguños formarán una costra y se curarán en pocos días. La costra ayuda a proteger la herida de la suciedad y los gérmenes mientras crece piel nueva debajo. Una vez que se ha formado la costra, es posible que ya no necesites usar un vendaje.
Aunque una herida o costra en proceso de cicatrización pica, es mejor no rascarse ni rascarse las costras. La costra se caerá por sí sola sin tu ayuda, dejando al descubierto la nueva piel que hay debajo.