Una de las pruebas para detectar la epilepsia es la punción lumbar, que puede medir la presión en el cerebro, la presencia de células anormales o bacterias y los niveles de glucosa. médico explica por qué y cómo se realiza el procedimiento.
Una de las pruebas para detectar la epilepsia es la punción espinal, también llamada punción lumbar, que se realiza extrayendo el líquido que rodea la médula espinal (llamado líquido cefalorraquídeo o LCR) y examinándolo en un laboratorio.
Por qué se realiza una punción lumbar?
Este procedimiento puede realizarse para:
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Diagnosticar afecciones del cerebro como infecciones o inflamaciones
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Medir la presión alrededor del cerebro y la médula espinal
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Aliviar la presión en la cabeza
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Administrar anestesia espinal
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Inyectar un tinte para una prueba de rayos X
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Inyectar medicamentos (como el baclofeno)
El análisis del LCR puede ayudar en el diagnóstico de los trastornos del sistema nervioso central que pueden afectar al cerebro, la médula espinal o sus cubiertas (llamadas meninges). El LCR contiene glucosa (azúcar), proteínas y otras sustancias que se encuentran en la sangre. Cuando se examina el LCR en el laboratorio, se evalúa lo siguiente:
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El número y los tipos de glóbulos blancos
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El nivel de glucosa
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Los tipos y niveles de proteínas
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La presencia de bacterias, hongos o células anormales
También puede haber pruebas especializadas realizadas en el LCR para comprobar cosas como proteínas anormales y anticuerpos autoinmunes.
NOTA:
El análisis del LCR puede no ser necesario si el procedimiento de punción lumbar se realiza para inyectar un fármaco.
Qué se puede esperar de una punción lumbar
Preparación para una punción lumbar
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Mantén tu horario habitual de comidas. No hay restricciones dietéticas o de líquidos antes de la prueba.
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Pida a su médico pautas específicas sobre la interrupción del consumo de alcohol, productos de aspirina y medicamentos anticoagulantes antes del procedimiento.
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Informe a su médico si es alérgico al látex o a algún medicamento.
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Haga arreglos para el transporte, ya que no debe conducir inmediatamente después de la prueba.
Descripción de una punción lumbar
Durante una punción lumbar, por lo general, se acostará de lado con las rodillas acercadas al pecho lo más posible y la barbilla hacia el pecho, lo que se denomina posición fetal, o se sentará con los brazos y la cabeza apoyados en una mesa. En ocasiones, un radiólogo intervencionista también puede realizar una punción lumbar con una máquina de rayos X. Si se utiliza este procedimiento, usted se acostará boca abajo.
Tras limpiarle la espalda con un antiséptico, se le colocarán paños estériles (llamados paños) alrededor de la zona. Se le inyectará un anestésico local (medicamento para aliviar el dolor) en la zona de la espalda. Puede sentir una ligera sensación de ardor.
Cuando la zona está adormecida, se introduce una aguja en la parte baja de la espalda, entre dos vértebras lumbares. Se evita la médula espinal, y sólo se accede al saco de líquido entre las vértebras.Esta aguja hueca suele incluir un estilete en su interior que permite al médico acceder a la zona sin quitar ninguna piel ni tejido. Una vez que se ha accedido a la zona en busca de líquido, se retira el estilete, dejando una aguja hueca para recoger el LCR. Esto a veces provoca presión. Se penetra en el canal espinal y se recoge el líquido o se inyecta la medicación. La médula espinal no es tocada por la aguja durante la prueba. Es posible que sienta alguna molestia o un pequeño dolor de cabeza. La aguja se retira una vez que se ha inyectado la medicación o se ha extraído el líquido. La zona se cubrirá con un pequeño vendaje.
También se puede tomar una muestra de sangre de una vena del brazo y analizarla, junto con el líquido cefalorraquídeo, en el laboratorio. Si la punción lumbar se hizo para inyectar un medicamento, es posible que no se tome una muestra de sangre.
Efectos secundarios y riesgos de una punción lumbar
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Aproximadamente entre el 10% y el 20% de las personas desarrollan una cefalea espinal (que empeora al sentarse o ponerse de pie).
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El riesgo de infección es extremadamente bajo.
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En ocasiones, se perfora un pequeño vaso sanguíneo, lo que provoca una secreción sanguinolenta. No es necesario ningún tratamiento.
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El procedimiento no suele ser doloroso, pero pueden sentirse punzadas momentáneas de dolor si la aguja roza el tejido nervioso.
Cuidados después de una punción lumbar
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Una vez finalizada la punción lumbar, se le indicará que se tumbe. El tiempo que pase en posición horizontal después de la punción variará en función de la razón por la que haya recibido el procedimiento.
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Evite el ejercicio extenuante o vigoroso durante aproximadamente un día después de la punción lumbar.
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Si tiene dolor de cabeza, acuéstese lo más posible y beba mucho líquido. Contacte con su médico si el dolor de cabeza persiste.
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Manténgase hidratado y beba mucho líquido el día de la punción lumbar y el día siguiente (independientemente del dolor de cabeza).
Cuándo contactar con el médico después de una punción lumbar
Después de una punción lumbar, llame a su médico local inmediatamente si:
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Observa cualquier drenaje inusual, incluyendo una secreción sanguinolenta, en el lugar de la punción
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Desarrolla fiebre
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Su dolor de cabeza persiste, especialmente si el dolor de cabeza empeora al sentarse o ponerse de pie
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Sus síntomas de dolor empeoran
Si el dolor de cabeza empeora, es posible que necesites un parche de sangre en el lugar donde te hicieron la punción lumbar. Esto implica volver al mismo lugar donde te hicieron la punción lumbar e inyectar un poco de tu propia sangre en la zona. Esto suele suponer un alivio inmediato.
Después de la punción lumbar
Se le controlará durante unas horas después del procedimiento de punción lumbar. En ese momento, la enfermera le comentará las instrucciones posteriores al procedimiento. Se le proporcionará un formulario escrito con estas instrucciones para que las siga en casa.
Los resultados de su punción lumbar se discutirán en un plazo de 24 horas con el médico que la ordenó, aunque algunas pruebas pueden tardar hasta una semana en completarse.