Dolor de oídos: Tratamientos y remedios caseros para el dolor de oídos

Es útil saber cómo tratar el dolor de oído en casa. Aprende algunos métodos naturales para que te sientas mejor.

Es posible que pienses que las infecciones de oído son algo que sólo tienen los niños. Las infecciones de oído son menos comunes en los niños grandes y en los adultos, pero aún pueden ocurrir.

Las infecciones de oído suelen desaparecer por sí solas y no necesitan atención médica. Hay cosas que puedes probar para aliviar el dolor de oído en casa.

Cuidados caseros para aliviar el dolor de oído

Si tiene dolor de oídos, es conveniente que hable con su médico al respecto.

Hay pocas investigaciones que digan si los cuidados caseros funcionan o no, pero la mayoría de los médicos están de acuerdo en que estos tratamientos son seguros para probarlos usted mismo:

Compresas frías o calientes. Empapa un paño en agua fría o tibia, escúrrelo y ponlo sobre el oído que te molesta. Prueba ambas temperaturas para ver si una te ayuda más que la otra.

Una almohadilla térmica: Coloca la oreja que te duele sobre una almohadilla térmica tibia, no caliente.

Gotas para el oído de venta libre con analgésicos. Si te ayudan, es por poco tiempo. No debes usar estas gotas si tu tímpano tiene un desgarro o un agujero, así que consulta primero con tu médico.

Analgésicos. El paracetamol, el ibuprofeno o el naproxeno suelen aliviar el dolor de oído. Pregunta a tu médico cuál es el más adecuado para ti.

Masticar chicle. Si estás en un avión o conduciendo a gran altura y el dolor de oídos se debe al cambio de presión atmosférica, mastica un chicle. Puede ayudar a reducir esa presión y aliviar los síntomas.

Duerme erguido. Aunque pueda parecer extraño, descansar o dormir sentado en lugar de tumbado puede favorecer el drenaje del líquido del oído. Esto podría aliviar la presión y el dolor en el oído medio. Apóyate en la cama con un montón de almohadas o duerme en un sillón un poco reclinado.

Cuándo llamar al médico

El dolor de oído suele mejorar en 2 o 3 días por sí solo o con cuidados en casa. A menudo lo único que hay que hacer es tomar un analgésico y estar atento a los síntomas que empeoran. Dicho esto, es importante saber cuándo sus molestias pueden ser un signo de algo más grave.

Llame a su médico si:

  • Notas que te sale líquido (como pus o sangre) del oído.

  • Tiene fiebre alta, dolor de cabeza o está mareado.

  • Cree que tiene un objeto atascado en el oído.

  • Ve una hinchazón detrás de la oreja, especialmente si ese lado de la cara se siente débil o no puede mover los músculos allí.

  • Has tenido un fuerte dolor de oído y de repente deja de producirse (lo que podría significar una rotura de tímpano).

  • Tus síntomas no mejoran (o empeoran) en 24 o 48 horas.

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