Los estudios demuestran que las personas con diabetes tipo 2 tienen un mayor riesgo de padecer la enfermedad de Alzheimer, según un experto. La experta explica a Doctor Magazine lo que se puede hacer para reducir ese riesgo.
Preguntas y respuestas con la doctora Elizabeth Seaquist, profesora de medicina de la División de Diabetes, Endocrinología y Metabolismo de la Facultad de Medicina de la Universidad de Minnesota.
Q.
Cómo afecta la diabetes tipo 2 a la memoria?
A.
Los estudios demuestran que las personas con diabetes tipo 2 tienen un mayor riesgo de padecer la enfermedad de Alzheimer. También son más propensos a padecer demencia vascular, es decir, pérdida de memoria causada por el daño de los vasos sanguíneos y la mala circulación de la sangre en el cerebro. Además, corren un mayor riesgo de padecer deterioro cognitivo leve, problemas de memoria que a veces pueden desembocar en la enfermedad de Alzheimer. Sin embargo, no sabemos exactamente por qué las personas con diabetes son más propensas a desarrollar pérdidas de memoria.
Lo que sí sabemos es que la diabetes daña los vasos sanguíneos y aumenta el riesgo de sufrir un ictus, lo que puede aumentar las probabilidades de padecer demencia vascular. La conexión también podría tener que ver con la resistencia a la insulina. En las personas con diabetes, el cuerpo no responde bien a la hormona insulina, que normalmente traslada el azúcar del torrente sanguíneo a las células. Algunos científicos creen que las personas con diabetes también pueden tener resistencia a la insulina en su cerebro. Necesitamos la insulina para mantener sanas nuestras células cerebrales, y la resistencia a la insulina podría dañar las células cerebrales lo suficiente como para provocar una pérdida de memoria. De hecho, los investigadores están estudiando si un spray nasal de insulina podría ayudar a evitar la demencia.
Si tiene diabetes, mantenga el azúcar en sangre bajo control para proteger los vasos sanguíneos y evitar complicaciones como daños en los nervios, enfermedades renales y pérdida de visión. Sin embargo, no debe corregirla en exceso. Un nivel de azúcar en sangre muy bajo también puede dañar su memoria y su función mental. Trabaje con su médico para mantener su nivel de azúcar en sangre dentro de un rango saludable.
También debe controlar los riesgos de enfermedades cardiovasculares, ya que los problemas de corazón y vasos sanguíneos pueden contribuir a la pérdida de memoria. Vigile su presión arterial y asegúrese de que su colesterol está bien controlado.
Y manténgase activo. Soy un gran convencido de que el ejercicio es bueno para la salud en general, y algunos estudios sobre personas con riesgo de padecer Alzheimer demuestran que puede ralentizar la progresión de la enfermedad. Intente caminar al menos 30 minutos al día o hacer otro tipo de ejercicio de intensidad moderada.
Por último, mantenga su cuerpo delgado. Pido a mis pacientes con sobrepeso y diabetes de tipo 2 que pierdan el exceso de peso y lo mantengan. Algunos estudios demuestran que la obesidad en la mediana edad aumenta el riesgo de pérdida de memoria en el futuro. Perder sólo entre el 5% y el 10% del peso corporal puede prevenir la diabetes, controlar los factores de riesgo cardiovascular y, potencialmente, preservar la memoria. Perder peso haciendo ejercicio y comiendo de forma equilibrada es un paso realista que puede dar para mejorar su función cerebral a medida que envejece.
Encuentre más artículos, navegue por los números anteriores y lea el número actual de "doctor Magazine"...