Los expertos coinciden en que tener una mascota puede ayudar a mejorar la depresión leve o moderada en muchas personas, además de proporcionar otros beneficios, como un mejor sueño y una mejor salud en general.
Avigayil Brown ha sido una amante de los animales toda su vida. "Crecí teniendo muchas mascotas: perros, gatos, conejos, peces, pájaros y un caballo", dice Brown, que tiene 24 años y vive en Brooklyn, Nueva York.
Lleva lidiando con la depresión desde los 12 años, pero no fue hasta que se enfrentó a una ronda muy dura de síntomas que empezó a entender cómo las mascotas la ayudaban a sentirse bien.
Cuando Brown se mudó a su propio apartamento, estaba deprimida y tenía problemas para dormir. Después de adoptar dos gatitos rescatados, empezó a dormir mejor, y a sentirse mejor también.
"Cuando estaba tumbada en mi cama, mis gatos venían y se acostaban conmigo. Si me levantaba de la cama para ir al baño, mis gatos me seguían. Era muy tranquilizador", dice.
Brown no es la única. En una encuesta reciente del Instituto de Investigación del Vínculo Humano-Animal, el 74% de los propietarios de animales de compañía afirmaron que tener una mascota mejoraba su salud mental.
Los estudios respaldan esta afirmación y demuestran que las actividades con animales ayudan a combatir los síntomas de la depresión.
Lo que las mascotas pueden ofrecerte si estás deprimido
Consuelo, compañía y amor. Si la depresión te hace sentir solo, las mascotas pueden romper el ciclo.
"Una mascota puede recordarte que no estás solo", dice Desiree Wiercyski, entrenadora de vida en Fort Wayne, IN. "Las mascotas ofrecen un amor incondicional, que puede ser extraordinariamente calmante cuando te sientes aislado".
Wiercyski, que también vive con depresión, dice que su perro la ayuda a sacudirse los sentimientos de inutilidad. "Mi cachorro ha estado a mi lado ofreciéndome consuelo y amor, recordándome que las cosas no son tan malas".
Brown cree que hay algo especial en el amor y la atención que le dan sus mascotas. "Los animales están muy conectados de un modo que las personas no tienen", dice.
La psicóloga clínica Perpetua Neo, PhD, está de acuerdo. "Los animales captan cuando sus dueños están angustiados", dice. Cuando perciben que no te sientes bien, te ofrecen consuelo".
Un horario regular. Saber que tienes que alimentar, pasear o cuidar a tu mascota puede darte una sensación de propósito y rutina.
"Incluso cuando no tengo ganas de salir de la cama o de la casa, sé que ellos dependen de mí", dice Courtney Sparkman, de 29 años, que vive en Tulsa, OK, y tiene dos caniches miniatura. "Me ayuda a superar el día".
Una sensación de calma. Las mascotas tienen un efecto relajante. Acariciar a un animal puede mejorar tu estado de ánimo. "El tacto ayuda a aumentar los niveles de oxitocina y reduce el cortisol, la infame hormona relacionada con el estrés", dice Wiercyski. Incluso el sonido del ronroneo de un gato puede ser relajante.
Los estudios realizados con perros de terapia sugieren que incluso las interacciones breves alivian la ansiedad y el miedo, afirma Sandra Barker, profesora de psiquiatría y directora del Centro de Interacción Humano-Animal de la Virginia Commonwealth University. En una encuesta reciente, las personas con depresión grave se sintieron más relajadas, menos solas y con menos dolor tras breves visitas a un perro de terapia.
Actividad física. Los dueños de mascotas tienden a hacer más ejercicio que las personas que no las tienen. Si tienes un perro, por ejemplo, es más probable que salgas a pasear. El ejercicio es bueno para controlar la depresión.
Wiercyski dice que la depresión a menudo la mantiene encerrada en casa. Pero saber que su perro necesita salir la hace salir. "Incluso ese par de minutos al aire libre me levanta el ánimo y me hace sentir que soy capaz de hacer algo productivo", dice.
Tiempo social. La depresión puede hacer que quieras evitar a otras personas, pero las mascotas pueden abrir tu mundo.
Los estudios sugieren que las mascotas te ayudan a conocer a la gente, a entablar amistades y a construir tu red de apoyo.
"Los perros y los bebés son las cosas que conectan a los extraños. Cuando paseas a tu perro, te sientes inclinado a hablar con completos desconocidos", dice Neo. Eso es algo bueno. "La conexión social es un antídoto contra la depresión".
Qué hacer con tu mascota
Prueba estos consejos para obtener los mayores beneficios para tu salud mental de tener una mascota.
Elige la mascota adecuada. Antes de elegir una, decide cuánto tiempo, energía y dinero tienes para ella.
Los perros son buenos compañeros, dice Neo, pero requieren un mantenimiento relativamente alto. Si tienes poco tiempo o problemas físicos, un animal mayor o más independiente puede ser más adecuado.
Los gatos suelen requerir menos mantenimiento. Un animal pequeño, como un hámster, ocupa poco espacio y puede seguir siendo alegre.
Interactúa a menudo. Juegue con su animal. Acarícialo y dale un masaje. Cuanto más lo haga, mejor se sentirá. "El acto de dar puede ser muy consciente y muy terapéutico", dice Neo.
Levántate y vete. Manténgase activo con su mascota. Saque a pasear a su perro. Lleve a su mascota a reunirse con otras personas. "El simple hecho de hacer más cosas puede aliviar los síntomas depresivos", dice Neo.
Si no tiene una mascota, involúcrese con los animales de otras personas. Ofrézcase a cuidar del perro de un amigo. Juega con el gato de un vecino. Esto también ayuda a mantener el contacto con otras personas, lo cual es un beneficio adicional.
Una mascota no hará que los síntomas desaparezcan, pero puede darte un impulso saludable.