Los gérmenes viven y prosperan en el lugar de trabajo. Descubra los puntos calientes de los gérmenes, cuándo la contaminación es peor y cómo protegerse.
En el trabajo se cobra algo más que un sueldo: Cada vez que toca su escritorio, el teclado o el teléfono, recoge gérmenes. En un escritorio típico de oficina hay más de 10 millones de bacterias, 400 veces más de las que se encuentran en el asiento medio del inodoro, lo que significa que escribir un correo electrónico o hacer una llamada te pone en riesgo de contraer enfermedades.
La razón es muy sencilla. "Tocamos un montón de superficies diferentes que otros cientos de personas podrían estar tocando", dice Kelly Reynolds PhD, profesor y microbiólogo ambiental de la Universidad de Arizona. "Los gérmenes se propagan rápidamente".
Incluso cuando los limpiadores profesionales hacen todo lo posible, los gérmenes persisten. Los recuentos de bacterias son más bajos al principio de la jornada laboral (porque las oficinas suelen limpiarse durante la noche), pero los gérmenes no tardan en aparecer también en el trabajo.
"A medida que la jornada aumenta y más personas tocan más superficies, el riesgo de entrar en contacto con las bacterias aumenta. Los niveles de contaminación alcanzan su punto máximo alrededor del almuerzo", afirma Reynolds.
En un estudio, los investigadores pidieron a voluntarios que se les inoculara artificialmente un virus benigno para comprobar la rapidez con la que se propagaba. Comprobaron que los compañeros "infectados" propagaban el virus al 50% de las superficies del lugar de trabajo en las cuatro horas siguientes a su llegada al trabajo; gracias al contacto compartido con esas superficies, la mitad de sus compañeros también dieron positivo en las pruebas del virus.
Para mantener los gérmenes a raya y evitar enfermedades, limpia tu espacio de trabajo. Limpia el escritorio, el monitor, el teclado, el ratón del ordenador y el teléfono al menos una vez al día, pero evita el agua y el jabón y opta por algo más fuerte.
"Las bacterias y los virus sobreviven muy bien en las superficies", dice Reynolds. "El agua y el jabón no son suficientes para matarlos; hay que utilizar un producto con desinfectante".
Otros puntos importantes para los gérmenes son los pomos de las puertas, los botones de los ascensores, los botones de las máquinas expendedoras, las cafeteras, los microondas y las neveras de la sala de descanso. No es práctico limpiar todas las superficies que se tocan, pero lavarse las manos y utilizar un desinfectante para manos puede ayudar a eliminar las bacterias que se adquieren durante la jornada laboral.
Una investigación publicada en Archives of Environmental & Occupational Health descubrió que el lavado de manos elimina las bacterias y reduce el riesgo de infección por dos virus comunes hasta en un 77%.
Reynolds aconseja lavarse las manos después de ir al baño y antes de comer: "Cuando se trata de evitar los gérmenes, incluidos los que se encuentran en el trabajo, la mejor intervención de salud pública sigue siendo el lavado de manos."
Según las cifras
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260.000 millones de dólares: Coste anual de las bajas laborales y la pérdida de productividad por enfermedad.
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1 a 6: Número de días de trabajo al año perdidos por enfermedad.
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92%: Teléfonos contaminados con bacterias como estafilococos y E. coli.
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Hasta el 100%: Reducción de bacterias tras limpiar un teclado con una toallita antibacteriana.
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