Pérdida de peso repentina e inexplicable en los gatos

El médico explica la gama de condiciones médicas que pueden estar causando la pérdida de peso inexplicable de sus gatos - y qué tratamientos están disponibles.

Dependiendo de la razón de la pérdida de peso de su gato, puede notar que su apetito se ha reducido o ha desaparecido por completo, una condición conocida como anorexia. Esto es peligroso para los gatos, porque son propensos a algo llamado lipidosis hepática, o síndrome del hígado graso, una afección potencialmente mortal que puede desarrollarse cuando el hígado debe procesar grandes cantidades de grasa almacenada para proporcionar energía al organismo.

Pero hay otras situaciones médicas que harán que su gato pierda peso, aunque siga comiendo su cantidad normal de comida.

Tanto si su gato come como si no, si nota que está perdiendo peso, es importante que consulte a su veterinario. Si no está seguro de cuál debería ser el peso ideal de su gato, su veterinario podrá orientarle y sugerirle un régimen de alimentación que satisfaga sus necesidades nutricionales.

Causas de la pérdida de peso del gato

Ansiedad, estrés o depresión.

Los gatos sometidos a estrés psicológico pueden dejar de comer, lo que puede provocar una pérdida de peso. Las situaciones que pueden alterar a su gato son el ruido excesivo, la presencia de otros animales en la zona de alimentación, los platos de comida sucios o la proximidad del plato de comida a la caja de arena. Los gatos también pueden alterarse por la desaparición de otra mascota o por un cambio en la rutina.

Cáncer.

Aunque no toda la pérdida de peso del gato está causada por el cáncer, es un culpable relativamente común. Otros síntomas que suelen aparecer son la pérdida de apetito, el letargo y el ocultamiento.

Diabetes.

Esta enfermedad, que puede estar causada por un fallo en la producción de la hormona insulina o por una capacidad deteriorada para responder a ella, suele causar pérdida de peso en los gatos, a menudo con un cambio en el apetito. Los gatos con diabetes también pueden beber cantidades excesivas de agua, orinar más de lo habitual, actuar con lentitud, desarrollar infecciones del tracto urinario y tener un aliento dulzón.

Peritonitis infecciosa felina.

Este virus, que se da con mayor frecuencia en gatos criados en criaderos, es conocido por causar emaciación. Los gatos con PIF parecerán enfermos, a menudo con fiebre que no responde a los antibióticos.

Problemas gastrointestinales.

Hay una variedad de condiciones diferentes en el tracto gastrointestinal que pueden causar la pérdida de peso del gato. Cuando este es el caso, otros síntomas pueden incluir diarrea, falta de apetito y vómitos. Los problemas gastrointestinales más comunes que producen pérdida de peso en los gatos incluyen la enfermedad inflamatoria intestinal, las alergias alimentarias o ciertas infecciones.

Parásitos intestinales.

También conocidos como gusanos, los parásitos intestinales pueden ser la causa de la pérdida de peso involuntaria de tus gatos. Aunque los síntomas no siempre están presentes, estos parásitos también pueden causar diarrea, hinchazón, vómitos y problemas para respirar.

Fallo de los órganos.

Muchos gatos de edad avanzada muestran pérdida de peso, y puede ser difícil determinar la causa precisa del problema, especialmente porque el metabolismo cambia con la edad. Afecciones como la enfermedad renal se vuelven más comunes a medida que los gatos envejecen. Su veterinario puede identificar estos problemas con sencillos análisis de sangre y orina.

Hipertiroidismo. Su gato puede tener buen apetito; de hecho, puede estar comiendo más de lo habitual pero sigue perdiendo peso. El hipertiroidismo es el resultado de un tumor benigno productor de hormonas en la glándula tiroides que eleva los niveles de la hormona tiroidea. Además de la pérdida de peso, el hipertiroidismo puede provocar un aumento de la bebida y de la orina, un incremento de la actividad, vómitos, diarrea y pérdida de masa muscular. En etapas posteriores, puede incluso provocar problemas cardíacos o la muerte. Los gatos mayores también son particularmente propensos a desarrollar esta condición.

Dolor de muelas.

Si su gato deja de comer repentinamente y empieza a perder peso, pero parece estar sano por lo demás, podría ser algo tan simple como un diente dolorido lo que causara el problema. El babeo y el manoseo de la boca pueden ser otros signos de un problema dental. Las úlceras bucales o la gingivitis grave también pueden contribuir al problema.

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Tratamiento y cuidados caseros para gatos con bajo peso

Para determinar cuál es la causa de la pérdida de peso de su gato y diseñar el mejor plan de tratamiento para usted y su mascota, su veterinario probablemente realizará un examen físico completo, análisis de sangre y de orina.

Dependiendo de la razón de la pérdida de peso de su gato, pueden prescribirse diversos tratamientos y cambios dietéticos para tratar la enfermedad subyacente y recuperar el peso. Afortunadamente, incluso en los gatos mayores, la pérdida de peso puede tratarse, si no curarse.

La pérdida de peso causada por ciertas afecciones del tracto gastrointestinal puede tratarse, ya sea sólo o en parte, realizando los cambios adecuados en la dieta de su gato. Si su gato padece una enfermedad intestinal inflamatoria u otras afecciones que dificultan la absorción de los alimentos, puede recomendarse una dieta de fácil digestión. Los gatos que pierden peso debido a las alergias alimentarias pueden recuperarse por completo cuando se eliminan los alimentos perjudiciales de su dieta.

En situaciones en las que la falta de apetito contribuye a la pérdida de peso, pueden utilizarse medicamentos que estimulan el apetito o sondas de alimentación para mantener una nutrición adecuada mientras se aborda la causa de la anorexia.

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