Infecciones oculares de los gatitos: Remedios caseros para probar

Conozca los remedios caseros y los tratamientos médicos para ayudar a aliviar los síntomas de la infección ocular de su gatito y acelerar su recuperación.

Remedios para las infecciones oculares de los gatitos

Los gatos y gatitos pueden contraer una infección ocular conocida como conjuntivitis. En las personas, esta condición se conoce comúnmente como ojo rosado y tiene una variedad de causas.

En los gatos, suele estar causada por virus como el de la rinotraqueítis viral felina, un virus del herpes que sólo tienen los gatos. Otras causas son:

  • Bacterias

  • Irritación de la córnea debido a las características de la raza

  • Alergias

  • Hongos

  • Tumores oculares

Aunque las infecciones primarias suelen ser víricas, a veces los gatos contraen infecciones bacterianas secundarias que también requieren tratamiento.

Los síntomas de una infección ocular del gatito incluyen:

  • Ojos rojos o rosados

  • Ojos hinchados

  • Ojos llorosos, con costras o con lágrimas.

  • Parpadeo, guiño de ojos o estrabismo.

  • Cerrar los dos ojos o un ojo más de lo habitual

  • Frotarse los ojos

  • Comer menos alimentos o actuar de forma letárgica

Las infecciones oculares víricas leves de los gatos pueden no necesitar ningún tratamiento, pero hay cosas que puede hacer para que su gato esté más cómodo. Las infecciones oculares más graves pueden requerir una visita al veterinario para que las evalúe o le administre antibióticos.

Remedios y tratamientos para las infecciones oculares de los gatitos

Suplementos de lisina

La lisina es un aminoácido esencial un compuesto orgánico que ayuda a formar proteínas que pueden ayudar tanto a los gatos como a los humanos que tienen virus del herpes a evitar los brotes y a curarse de ellos más rápidamente. Utilice los suplementos de lisina como tratamiento para la prevención y el control de los brotes en los gatos.

La lisina está disponible para los gatos en las siguientes formas:

  • Gel oral

  • Golosinas para gatos

  • Polvo

  • Tintura líquida

Exámenes oculares en casa para identificar problemas

Mirar los ojos de su gato con regularidad puede ayudarle a identificar problemas antes de que sean moderados o graves. Para examinar a su gato, mire su cara en una habitación bien iluminada. Baje el párpado de su gato con los dedos. Asegúrese de que el revestimiento es rosa y tiene un aspecto saludable. No debe estar hinchado. Un color rojo o blanco es señal de un problema.

Asegúrese de que los globos oculares tienen un aspecto saludable. Comprueba si el globo ocular está turbio o nublado, lo que podría ser un signo de infección. Asegúrese de que las pupilas de su gato son del mismo tamaño y que la zona que rodea al globo ocular es blanca.

Limpie los ojos de su gato

Limpie cualquier secreción de los ojos de su gato. Utilice una bola de algodón humedecida en agua para limpiar suavemente las esquinas de los ojos. Utilice un algodón diferente para cada ojo.

Si su gato tiene pelos largos que puedan pincharle los ojos, córtelos para evitar arañazos que puedan provocar infecciones. Siempre es más seguro pedir a un profesional que lo haga para no dañar el ojo.

Continuación

Cuándo acudir al médico

Las infecciones oculares menores de los gatitos debidas al herpes pueden desaparecer por sí solas, sin tratamiento. Sin embargo, si no está seguro de lo que puede estar mal en su gato, siempre es una buena idea llevarlo al veterinario, especialmente cuando tiene problemas oculares. Cuando los problemas oculares no se tratan, pueden provocar problemas de visión o incluso ceguera.

El veterinario examinará a su gato y le recetará el tratamiento adecuado con antibióticos o esteroides, en función del diagnóstico. El médico también puede mostrarle cómo administrar la medicación para que pueda hacerlo en casa.

Si su gato tiene el virus del herpes, probablemente tendrá otra infección ocular en el futuro. Sin embargo, si sólo se trata de una infección bacteriana, no debería reaparecer. La infección ocular de su gato debería empezar a mejorar tras unos días de tratamiento. Si no lo hace, hágaselo saber a su veterinario, pero no interrumpa el tratamiento hasta que éste se lo indique.

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