¿Necesita tomar medicamentos recetados o de venta libre durante las horas de trabajo? Puede que necesites una ayuda extra para organizar, almacenar y recordar todos los detalles durante tu ajetreada jornada. Sin embargo, es superimportante, ya que seguir el horario correcto le ayudará a mantener su enfermedad bajo control. Y las investigaciones demuestran que cuanto más fácil sea tomar la medicación en el trabajo, más probable será que la mantengas.
¿Necesitas ayuda? Aquí tienes unos sencillos consejos.
Mantén tus medicamentos a salvo
Está tu lugar de trabajo sin cerrar? Eso puede ser una invitación abierta a los ladrones. Si no puedes mantener tus medicamentos seguros, mételos en tu bolso, maletín, mochila o bolsillo.
Ni demasiado calor, ni demasiado frío
La mayoría de los medicamentos están bien almacenados a temperatura ambiente, fuera de la luz solar directa. Pero si su lugar de trabajo es caluroso, húmedo o frío, o si contiene productos químicos, podría ser un problema. Es posible que tus medicamentos no funcionen tan bien, o peor aún, que te causen algunos efectos secundarios no deseados.
Lee el prospecto que acompaña a tu receta y habla con tu farmacéutico. Averigua si tus medicamentos deben conservarse en un frigorífico. Si es así, asegúrate de que el de la sala de descanso es seguro, o lleva una bolsa aislante para el almuerzo.
Comprueba tus provisiones
Lleva suficiente medicación para el día que tienes por delante, por supuesto, pero ten también algo extra a mano. Esto te servirá de ayuda en caso de emergencia y te tranquilizará saber que tienes suficientes medicamentos mientras estás fuera de casa.
Sé discreto
Si tomas pastillas, probablemente puedas tragarlas en casi cualquier sitio sin llamar la atención. Sin embargo, si te inyectas insulina u otro medicamento, necesitarás un lugar seguro y privado.
Si utilizas oxígeno, asegúrate de que tu oficina, cubículo o área de trabajo es un lugar seguro para utilizarlo y es lo suficientemente grande para manejar tu equipo.
Hable con su jefe
Es posible que quieras decirle a un supervisor o a un compañero de trabajo que tomas medicamentos, especialmente si son para una enfermedad que pone en peligro la vida. Saber es poder. Tus compañeros pueden estar atentos a los efectos secundarios o a los signos de que la medicación no está funcionando.
Esto depende enteramente de ti. Según la Ley de Estadounidenses con Discapacidades (ADA), no estás obligado a revelar ningún medicamento recetado a menos que suponga una amenaza para la seguridad.
Planifique su horario
Ponga los medicamentos en su lista de tareas para ayudarle a mantenerse en el camino. Si es posible, programe el "tiempo de medicación" cuando sepa que va a estar libre, como durante el almuerzo o un descanso.
Si tu jornada laboral es imprevisible, pon una alarma en tu reloj, teléfono u ordenador. Si tomas varias medicinas, es posible que necesites varias alarmas, pero no te preocupes. Tus compañeros pensarán que esos pings son recordatorios de reuniones o mensajes.
Encuentre una farmacia conveniente
Elige una farmacia con una sucursal cerca de tu lugar de trabajo. Puede ser una gran ayuda. Si te olvidas de tus medicamentos, la farmacia puede buscar tu receta y darte un suministro de emergencia para seguir adelante.
Empezar nuevos medicamentos en los fines de semana
Probar un nuevo medicamento? Hazlo en uno de tus días libres del trabajo. Así tendrás más posibilidades de observar los efectos secundarios, como la somnolencia o la irritabilidad, antes de volver al trabajo.
Si un medicamento te produce somnolencia, pregunta a tu médico por una alternativa o habla con tu supervisor sobre cómo afectará a tu rendimiento. Y recuerda que incluso los medicamentos de venta libre, como los antihistamínicos, pueden hacerte estar menos alerta.
Comunicar
Le resulta difícil cumplir con los horarios? Habla con tu médico sobre la posibilidad de sustituir las píldoras que se toman 3 o 4 veces al día por versiones de liberación prolongada que sólo necesitas una o dos veces al día. De este modo, es posible que puedas tomar todos tus medicamentos en casa.