Fístula traqueoesofágica frente a atresia esofágica: Diferencias, similitudes y tratamientos

La fístula traqueoesofágica y la atresia esofágica son defectos de nacimiento que se producen en la tráquea y el esófago, que son los conductos de la garganta. Aunque se trata de dos defectos diferentes, a menudo ocurren juntos.

Qué es la fístula traqueoesofágica?

En el interior de la garganta hay dos tubos musculares: el esófago, el tubo que va de la boca al estómago, y la tráquea, el tubo que lleva a los pulmones. Cuando los bebés se están desarrollando en el útero, estos tubos comienzan a desarrollarse como uno solo y luego se separan más adelante. 

La fístula traqueoesofágica se produce cuando el esófago y la tráquea no se separan como se supone que deben hacerlo. Cuando se produce este defecto, los dos tubos están abiertos el uno al otro, lo que puede provocar problemas para comer y respirar. Esto también puede provocar una neumonía. Los bebés que nacen con fístula traqueoesofágica suelen tener también atresia esofágica.

Síntomas de la fístula traqueoesofágica

En el caso de un bebé que nace con una fístula traqueoesofágica pero no con atresia esofágica, sus síntomas pueden no aparecer inmediatamente después del nacimiento. Los síntomas más comunes de la fístula traqueoesofágica son la tos al alimentarse y las infecciones pulmonares.

Por desgracia, la fístula traqueoesofágica no aparece en las exploraciones prenatales, por lo que el diagnóstico no es posible hasta después del nacimiento, normalmente cuando los síntomas son perceptibles. Para diagnosticar una fístula traqueoesofágica, el médico de tu bebé puede recomendar opciones como:

• Radiografías para observar el pecho y el abdomen del bebé

• Una endoscopia, que consiste en deslizar un tubo fino con una cámara en el extremo por el esófago para diagnosticar problemas en el sistema digestivo superior

• Una broncoscopia, un procedimiento similar a una endoscopia, excepto que el tubo pasa por la tráquea hasta los pulmones

Tratamiento de la fístula traqueoesofágica

La fístula traqueoesofágica se trata mediante cirugía. Los métodos quirúrgicos exactos dependerán de cuántas fístulas traqueoesofágicas -o conexiones individuales entre el esófago y la tráquea- estén presentes, de su gravedad, de sus localizaciones y de si también está presente alguna otra afección, como la atresia esofágica. El tratamiento también puede depender del estado de salud del bebé y de la opinión de los cirujanos y otros médicos.

La cirugía suele consistir en hacer una pequeña incisión en el cuello o la espalda, cerrar la conexión entre el esófago y la tráquea y realizar las reparaciones necesarias.

Qué es la atresia esofágica?

La atresia esofágica es una enfermedad en la que el esófago no se forma correctamente o no se forma del todo. A menudo se produce con una fístula traqueoesofágica. Existen cuatro tipos diferentes de atresia esofágica:

• Tipo A: En la atresia esofágica de tipo A, las partes superior e inferior del esófago no se conectan, y cada parte tiene un extremo cerrado.

• Tipo B: El tipo B es un tipo raro que se produce junto con una fístula traqueoesofágica. En el tipo B, la parte superior del esófago está conectada a la tráquea, pero el extremo inferior no está conectado y tiene un extremo cerrado.

• Tipo C: Es el tipo más común de atresia esofágica. También se presenta con una fístula traqueoesofágica. El tipo C ocurre cuando la parte superior del esófago está cerrada y el extremo inferior está unido a la tráquea.

• Tipo D: El tipo D es el más grave pero también el más raro de los tipos de atresia esofágica. En el tipo D, las partes superior e inferior del esófago están conectadas cada una por separado a la tráquea en lugar de estarlo entre sí.

Aproximadamente 1 de cada 4.100 bebés nace con atresia esofágica en EE.UU. Los investigadores aún no conocen la causa exacta de la atresia esofágica, pero a menudo aparece con otros defectos de nacimiento, como:

• Trisomía 13, trisomía 18 o trisomía 21

• Médula espinal anclada

• Otros problemas del aparato digestivo

• Problemas renales y del tracto urinario

• Problemas del corazón

• Problemas musculares o esqueléticos

Síntomas de la atresia esofágica

Los síntomas exactos de la atresia esofágica pueden variar en función del tipo de afección que tenga su bebé. Los síntomas comunes de la atresia esofágica incluyen:

• Tos y atragantamiento al alimentarse

• Dificultad para respirar

• Burbujas blancas y espumosas en la boca del bebé

• Piel azulada

En ocasiones, la atresia esofágica puede identificarse antes del nacimiento. De lo contrario, los síntomas de la atresia esofágica aparecen mucho antes que los de la fístula traqueoesofágica, normalmente poco después del nacimiento, cuando el bebé intenta alimentarse. El diagnóstico suele confirmarse mediante una radiografía.

Tratamiento de la atresia esofágica

Hay varias opciones disponibles para tratar la atresia esofágica, y algunas son más invasivas que otras. Las opciones actuales de tratamiento incluyen:

• El proceso de Foker: Una nueva y revolucionaria técnica que funciona estimulando los extremos del esófago, haciendo que crezcan, y uniendo ambos una vez que han crecido lo suficiente.

• Tracción interna: Tanto la tracción interna estática como la tracción interna dinámica son métodos adicionales para el crecimiento del esófago.

• Interposición yeyunal: Esta técnica utiliza un segmento del intestino delgado para sustituir la longitud que falta del esófago.

• Anastomosis primaria: Este procedimiento cierra las brechas esofágicas en los niños con brechas más pequeñas.

Pronóstico de las fístulas traqueoesofágicas y de la atresia esofágica

Cuando las fístulas traqueoesofágicas y la atresia esofágica se detectan pronto en los bebés, y cuando el tratamiento no se complica por otros factores, la recuperación puede ser rápida. El bebé tendrá que permanecer en el hospital y ser alimentado a través de una sonda intravenosa o estomacal hasta que pueda tragar correctamente. Después del tratamiento, muchos bebés pueden tener también traqueomalacia, que es una tráquea débil y flácida.

Los efectos a largo plazo de las fístulas traqueoesofágicas y la atresia esofágica pueden incluir la enfermedad por reflujo gastroesofágico, también llamada ERGE, así como tejido cicatricial que puede necesitar una futura cirugía.

Fístula traqueoesofágica frente a atresia esofágica

Las fístulas traqueoesofágicas y la atresia esofágica son problemas que pueden afectar a la tráquea y al esófago, y suelen aparecer juntos. En resumen:

• La fístula traqueoesofágica es una abertura entre la tráquea y el esófago, mientras que la atresia esofágica es cuando los dos extremos del esófago no se unen, lo que a veces da lugar a una fístula traqueoesofágica.

• Los síntomas de la fístula traqueoesofágica pueden no aparecer inmediatamente después del parto, pero los de la atresia esofágica suelen ser evidentes la primera vez que el bebé intenta alimentarse. Ambos pueden diagnosticarse mediante una radiografía. Las fístulas traqueoesofágicas también pueden requerir una endoscopia o broncoscopia para su diagnóstico. La atresia esofágica puede diagnosticarse durante el embarazo.

• El tratamiento de la fístula traqueoesofágica pretende reparar cualquier agujero entre los dos tubos, mientras que el tratamiento de la atresia esofágica consiste en unir los dos extremos del esófago y reparar cualquier agujero causado por la fístula traqueoesofágica.