Prolapso rectal: Síntomas, causas, tratamiento y cirugía

Qué es el prolapso rectal?

El prolapso es cuando cualquier parte del cuerpo se desliza o cae de su posición normal. El prolapso rectal se produce cuando el recto, la última sección del intestino grueso, cae o se desliza fuera del ano. Aunque pueda parecer aterrador, normalmente no se considera una urgencia médica. Sin embargo, cuanto más tiempo se padezca la afección, peor puede ser. Vivir con un prolapso rectal puede causar vergüenza y afectar a tu calidad de vida.

Si sientes que algo no va bien cuando vas al baño o intentas hacer caca, no debes ignorarlo ni restarle importancia. Tu médico puede diagnosticar el prolapso rectal y sugerir un tratamiento para solucionarlo.

Tipos de prolapso rectal

Existen tres tipos de prolapso:

  • Prolapso externo: Todo el recto sobresale del ano.

  • Prolapso de la mucosa: Parte del revestimiento del recto asoma por el ano.

  • Prolapso interno: El recto ha comenzado a descender pero aún no sobresale del ano.

Síntomas del prolapso rectal

Si sientes que estás sentada en una bola después de hacer caca, o si notas que tienes algo que sobresale de la abertura (el ano) donde haces caca, podrías tener un prolapso rectal.

Normalmente, la primera vez que experimentas un prolapso rectal es después de defecar. La primera vez, o las primeras veces, el recto puede volver a entrar por sí solo. Más adelante, es posible que sienta que algo se ha salido de su cuerpo, o que simplemente sienta algo ahí abajo que no es normal. En esos casos, es posible que pueda empujar el recto hacia dentro por sí mismo.

Otros síntomas del prolapso rectal pueden ser:

  • Sentir un bulto fuera del ano

  • Ver una masa roja fuera de su orificio anal

  • Dolor en el ano o en el recto

  • Sangrado por el recto

  • Pérdida de sangre, caca o mucosidad por el ano

Al principio, el prolapso rectal puede parecerse a las hemorroides que se deslizan por el orificio anal, pero se trata de dos afecciones diferentes. Las hemorroides son vasos sanguíneos inflamados en el ano o en la parte inferior del recto que pueden causar picor, dolor y sangre en el papel higiénico cuando te limpias después de hacer caca. Su médico puede diagnosticar si tiene prolapso rectal o hemorroides.

Causas del prolapso rectal

Una variedad de cosas pueden causar la condición, incluyendo:

  • Historial a largo plazo de diarrea o estreñimiento

  • Antecedentes a largo plazo de tener que esforzarse al hacer caca

  • La edad avanzada, que debilita los músculos y ligamentos de la zona rectal

  • Lesión previa en la zona anal o de la cadera

  • Daños nerviosos que afectan a la capacidad de los músculos para tensarse y aflojarse, que podrían ser causados por el embarazo, complicaciones del parto vaginal, parálisis del esfínter anal o lesiones en la columna vertebral o la espalda

  • Problemas neurológicos, como enfermedad de la médula espinal o transección de la médula espinal

Factores de riesgo del prolapso rectal

Son más las mujeres que desarrollan un prolapso rectal que los hombres, especialmente las mayores de 50 años. En general, las personas mayores que han tenido un historial de estreñimiento o problemas con su suelo pélvico tienen una mayor probabilidad de tener el problema.

Cualquiera de estas condiciones de salud podría ponerle en mayor riesgo de prolapso rectal:

  • Estreñimiento crónico

  • Tener que hacer siempre un esfuerzo para hacer caca

  • Lesión en la parte baja de la espalda o enfermedad discal

  • Debilidad muscular en el ano o en el suelo pélvico

  • Alguien de su familia también tuvo prolapso rectal

  • Infecciones parasitarias como la esquistosomiasis

  • Trastorno pulmonar obstructivo crónico (EPOC)

  • Hipertrofia prostática benigna

  • Cualquier lesión o problemas con los ligamentos que mantienen el recto unido a la pared intestinal

  • Trastornos intestinales congénitos como la enfermedad de Hirschsprung o la displasia intestinal neuronal

Diagnóstico del prolapso rectal

Su médico puede hacer un examen rectal. Aunque usted puede dudar en hacerlo, su médico puede pedirle que se siente en un inodoro y haga caca o al menos intente hacerlo. Esto es útil porque permite a su médico ver el prolapso.

Es posible que necesite algunas otras pruebas más avanzadas para diagnosticar el prolapso rectal, especialmente si tiene otras afecciones relacionadas:

  • Electromiografía anal (EMG):Esta prueba comprueba si el daño nervioso está causando sus problemas del esfínter anal.

  • Manometría anal: Se introduce un tubo fino en el recto para comprobar la fuerza muscular.

  • Ecografía anal: Se introduce una sonda en el ano y el recto para examinar los músculos y los tejidos.

  • Prueba de latencia motora terminal del nervio pudendo: Comprueba tus nervios pudendos, que utilizas para controlar los movimientos intestinales.

  • Proctografía:Los vídeos de rayos X de su recto durante una caca muestran lo bien que retiene y libera las heces.

  • Colonoscopia: Un tubo largo introducido en el recto con una cámara diminuta en el extremo puede mostrar el interior de los intestinos y buscar cualquier problema que pueda estar causando el prolapso.

  • Proctosigmoidoscopia:Esta prueba también utiliza un tubo largo con una cámara en el extremo. Se inserta profundamente en los intestinos para buscar inflamación, cicatrices o un tumor.

  • RESONANCIA MAGNÉTICA: La exploración por imagen examina todos los órganos de la zona pélvica.

Tratamiento del prolapso rectal

El tratamiento más común para el prolapso rectal es la cirugía para volver a colocar el recto en su sitio, y hay varios tipos. El tipo de cirugía que le recomiende su médico dependerá de factores como su estado de salud general, su edad y la gravedad de su enfermedad. Los dos tipos de cirugía más comunes:

  • Abdominal: Este tipo de cirugía puede realizarse con una gran incisión o mediante laparoscopia, que utiliza pequeños cortes y una cámara unida a un instrumento para que el cirujano pueda ver lo que hay que hacer y si hay algún problema adicional que deba solucionarse.

  • Perineal: También llamada reparación rectal, este enfoque puede utilizarse si eres mayor o tienes otros problemas médicos. Este tipo de cirugía puede involucrar el revestimiento interno del recto o la porción del recto que se extiende fuera del ano.

Si el prolapso rectal es muy leve y se detecta a tiempo, es posible que el médico te indique que lo trates tomando ablandadores de heces para que te resulte más fácil ir al baño y empujando el tejido del recto de nuevo hacia el ano con la mano. Pero, por lo general, al final tendrás que operarte para solucionar el prolapso rectal.

Prevención del prolapso rectal

Para prevenir el prolapso rectal, intenta no hacer esfuerzos cuando hagas caca. Pruebe estos consejos para aliviar o prevenir el estreñimiento que provoca el esfuerzo:

  • Consigue más fibra en tu dieta. Intenta tomar al menos cinco raciones de frutas y verduras al día.

  • Bebe de 6 a 8 vasos de agua al día.

  • Haz ejercicio físico con regularidad.

  • Mantenga su peso en un nivel saludable o pierda peso si lo necesita.

  • Si tiene estreñimiento a menudo, hable con su médico. Puede que le indiquen que tome un ablandador de heces o un laxante.

Evite levantar objetos pesados, ya que esto podría ejercer presión sobre los músculos del intestino.

Complicaciones del prolapso rectal

El prolapso rectal, si no se trata, podría provocar estas complicaciones:

  • Daños rectales como la ulceración o la hemorragia.

  • Su recto no puede ser empujado manualmente hacia su interior

  • Estrangulamiento, o el suministro de sangre en su recto se reduce

  • Gangrena, o el tejido rectal estrangulado se descompone y muere

Hot