Qué es la insuficiencia de convergencia?
Para ver los objetos de cerca, los ojos deben juntarse para apuntar hacia dentro y así poder enfocar lo que se está mirando. Es una acción llamada convergencia. Permite a tu cerebro fusionar las imágenes de ambos ojos para procesar lo que ves. Cuando los ojos no pueden alinearse de este modo, tienes insuficiencia de convergencia (IC).
Esto significa que te puede resultar difícil enfocar los ojos cuando lees, juegas a videojuegos o trabajas con dispositivos digitales como teléfonos inteligentes y ordenadores portátiles. A diferencia de otros problemas de visión, como la miopía o la hipermetropía, la forma del ojo no es la causa de la insuficiencia de convergencia. En cambio, se debe a un problema en la forma en que tus ojos trabajan juntos.
Síntomas de la insuficiencia de convergencia
Cuando intentas enfocar algo cercano a tus ojos, puedes tener:
-
Ojos cansados
-
Visión doble
-
Visión borrosa
-
Mareo o vértigo por el movimiento (vértigo)
-
Dolor de cabeza
También puede notar problemas de rendimiento cuando lee, como:
-
Ritmo lento
-
Cansancio
-
Problemas de concentración
-
Problemas para mantenerse en su sitio
Otras personas pueden notar que uno de tus ojos se vuelve hacia afuera cuando lees, o que parece que entrecierras o cierras uno de tus ojos.
Causas de la insuficiencia de convergencia
En la insuficiencia de convergencia, los movimientos de un ojo no se alinean exactamente con los del otro. Los músculos oculares de las personas con IC funcionan normalmente. Así que el problema parece estar en el cerebro o en los nervios que envían señales a esos músculos.
No está claro cómo o por qué ocurre, aunque los genes pueden influir. Además, algunas otras condiciones parecen hacer más probable la insuficiencia de convergencia:
-
Lesión en la cabeza
-
Enfermedad de Alzheimer
-
Enfermedad de Graves
-
Miastenia gravis
-
Enfermedad de Parkinson
Diagnóstico de la insuficiencia de convergencia
Su oftalmólogo le preguntará sobre sus síntomas y su historial de salud y le hará un examen ocular completo. Esto les ayudará a descartar otras causas de tus síntomas, como la miopía, la hipermetropía o los problemas musculares del ojo.
Para diagnosticar la insuficiencia de convergencia, los médicos realizan algunas pruebas sencillas e indoloras para medir:
-
Lo bien que funcionan tus nervios y músculos para mover los ojos hacia dentro de la nariz.
-
Qué tan cerca de tu cara puedes enfocar antes de que un ojo comience a moverse hacia afuera. Para las personas con IC, ese punto suele estar a más de 6 centímetros de distancia.
-
La rapidez con la que puedes cambiar tu enfoque de los objetos lejanos a los cercanos.
-
Cuánto se desvían tus ojos hacia afuera mientras miras cosas de cerca y de lejos.
Tratamiento de la insuficiencia de convergencia
Los ejercicios especiales que su médico puede llamar "terapia visual" son el principal tratamiento para la insuficiencia de convergencia. Lo normal es que practiques el enfoque de las cosas a distintas distancias. Puedes hacer estos ejercicios con un oftalmólogo en su consulta, pero también puedes hacerlos en casa, a veces con la ayuda de un programa informático.
El tratamiento suele funcionar bien. La mayoría de los niños que hicieron terapia con un especialista tuvieron una visión normal o mucho mejor después de 12 semanas de visitas regulares.
Si tus síntomas no mejoran con la terapia visual, es posible que necesites unas "gafas de prisma" especiales para leer o realizar otras actividades de cerca.