El desodorante y el antitranspirante son dos productos cosméticos muy utilizados tanto por hombres como por mujeres. Muchas personas utilizan estos productos todos los días, pero ¿cuál es la diferencia entre ambos?
Cómo entender el desodorante y el antitranspirante
El antitranspirante y el desodorante tienen algunas diferencias clave.
El desodorante enmascara el olor, mientras que el antitranspirante reduce la cantidad de sudor. Ambos productos actúan en el lugar del cuerpo donde se aplican, normalmente en las axilas. Muchas veces, el desodorante y el antitranspirante se combinan en un solo producto.
Los desodorantes se consideran cosméticos, pero los antitranspirantes están clasificados como medicamentos. Por ello, los antitranspirantes están regulados por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA). Esto significa que están sujetos a políticas y procedimientos y pueden tener fechas de caducidad en las etiquetas.
Los desodorantes ofrecen dos formas de protección contra el olor. La primera son las propiedades antimicrobianas que reducen el número de bacterias que producen el olor. La segunda es una fragancia que enmascara el olor que se produce.
Los antitranspirantes, por su parte, bloquean las glándulas ecrinas del cuerpo, que producen el sudor. Esto suele hacerse con un ingrediente a base de aluminio.
Tanto los antitranspirantes como los desodorantes están aprobados como productos seguros para el uso diario sin que supongan un riesgo de efectos secundarios perjudiciales. Aun así, con ingredientes como el aluminio y los parabenos, ha aumentado la oferta de alternativas con ingredientes más naturales. Es importante tener en cuenta que tanto la FDA como el Instituto Nacional del Cáncer publicaron declaraciones en las que se afirma que los desodorantes y antitranspirantes no están vinculados a un mayor riesgo de cáncer.
Beneficios del desodorante y el antitranspirante
Beneficios del desodorante. La sudoración es la respuesta natural de tu cuerpo. Incluso si puedes superar la visión del sudor, el olor que produce puede avergonzarte. El desodorante ayuda a enmascarar este olor e incluso puede hacer que huelas mejor dependiendo de la fragancia de tu producto desodorante.
Y lo que es mejor, el desodorante puede ayudarte a sentirte más seguro y menos cohibido. Si hace ejercicio en el gimnasio o participa en un deporte de competición, puede ser más eficaz si no piensa en su olor corporal.
Beneficios del antitranspirante. El antitranspirante puede tener la ventaja añadida de actuar como desodorante debido a cómo funciona el producto. Cuando el antitranspirante bloquea las glándulas sudoríparas, también bloquea la salida del olor, lo que reduce la intensidad del olor cuando se suda.
Tenga en cuenta que estos beneficios son temporales y que puede ser necesario volver a aplicar el producto para que siga siendo eficaz. Al bañarse o lavarse el cuerpo se elimina el antitranspirante y se recupera la capacidad de liberar el sudor de las glándulas afectadas.
Riesgos del desodorante y del antitranspirante
Existen diferentes riesgos al sopesar el antitranspirante frente al desodorante. Dado que las preocupaciones sobre los riesgos de cáncer han sido investigadas y tratadas, no son una preocupación importante a la hora de elegir un desodorante o un antitranspirante. Sin embargo, si tienes alguna alergia a las fragancias, asegúrate de leer bien las etiquetas.
El uso de desodorantes o antitranspirantes con fragancias añadidas le hace correr el riesgo de desarrollar una dermatitis alérgica de contacto (DAC). Un estudio demostró que los desodorantes y antitranspirantes se encuentran entre los primeros de la lista de productos cosméticos que provocan reacciones alérgicas en la piel.
Ten en cuenta que no se trata de los desodorantes y antitranspirantes en su conjunto, sino de los ingredientes que utilizan. La lectura de las etiquetas es la mejor manera de saber si vas a tener una reacción alérgica o riesgos añadidos para la salud al utilizar un antitranspirante o desodorante.
Triclosán. Este producto químico antibacteriano se utiliza en los antitranspirantes y desodorantes para eliminar los gérmenes de la piel que causan el mal olor. Sin embargo, es un disruptor endocrino, por lo que también puede actuar como las hormonas que su cuerpo produce de forma natural e interferir con la señalización hormonal de su cuerpo.
El triclosán también está relacionado con un mayor riesgo de cáncer de mama. La FDA prohibió su uso en los jabones de manos, pero todavía puede ser un ingrediente de tu desodorante o antitranspirante, así que lee las etiquetas con atención.
Ftalatos. Son comunes en todo tipo de productos cosméticos y de cuidado de la piel, incluidos los desodorantes y antitranspirantes. Se trata de una sustancia química que permite que otros ingredientes sean flexibles y también prolonga la vida de cualquier fragancia añadida.
Los ftalatos son preocupantes porque pueden alterar el sistema endocrino, especialmente en los hombres. Los ftalatos también pueden adelantar el inicio de la pubertad en las mujeres jóvenes, lo que aumenta el riesgo de cáncer de mama en el futuro.
Parabenos. Estos conservantes ayudan a que el antitranspirante y el desodorante se conserven durante más tiempo. Sin embargo, la piel absorbe fácilmente los parabenos y pueden imitar al estrógeno en el cuerpo. Un exceso de parabenos aumenta el riesgo de cáncer de mama.
Fragancia. Una sola fragancia puede tener cientos de ingredientes microscópicos que se suman a un solo olor. Debido a que a menudo se consideran exclusivos o secretos, todos los ingredientes no aparecen en las etiquetas. Si tiendes a tener reacciones a las fragancias añadidas, es mejor que te mantengas alejado de ellas.
Dietanolamina. También puede aparecer como DEA en las etiquetas y se considera un producto cancerígeno. Aumenta el riesgo de cáncer.
Butano e Isobutano. Son gases que ayudan a impulsar los desodorantes en aerosol desde sus botes. Están restringidos en el Reino Unido y Canadá porque están relacionados con el cáncer y la toxicidad reproductiva. Si estos gases le preocupan, asegúrese de buscarlos en las etiquetas antes de comprarlos o elija un desodorante sin spray.
Aluminio. Este metal se utiliza habitualmente para tapar los conductos sudoríparos y evitar que el sudor salga de las glándulas. Sin embargo, el aluminio puede aumentar la probabilidad de que los genes muten a nivel celular, aumentando el riesgo de tumores.