Fotos de Cómo cuidar la piel después de un melamoma

Tu piel necesita un cuidado extra

1/11

Ser un superviviente de un melanoma te hace más propenso a desarrollar un segundo melanoma no relacionado. Por eso es muy importante que cuides tu piel de la cabeza a los pies. Aquí tienes algunos consejos para mantenerte seguro y sentirte bien después del tratamiento.

Utiliza protección solar durante todo el año

2/11

La radiación ultravioleta de los rayos solares es un importante factor de riesgo de melanoma. Pero usar un protector solar de amplio espectro todos los días puede reducir ese riesgo. Elija uno con un factor de protección solar (FPS) de al menos 30. Póngalo en todas las zonas de la piel expuestas todos los días, durante todo el año. Si está al aire libre, aplíquelo en cualquier parte que no esté cubierta. Vuelva a aplicarlo cada dos horas, o más a menudo si está sudando o en el agua.

Revísate mensualmente

3/11

Inspeccione su piel una vez al mes para detectar nuevos lunares o cambios que puedan ser signos de un nuevo cáncer. Hágalo después de un baño o una ducha, y utilice espejos para poder ver todo su cuerpo. Pídele a alguien que te revise también los lugares difíciles de ver, como el cuero cabelludo y detrás de las orejas. Si encuentras algo, díselo a tu médico de inmediato.

Busca la sombra cuando el sol esté alto

4/11

No hace falta que te quedes siempre dentro, pero es conveniente que evites el sol desde las 10 de la mañana hasta las 4 de la tarde, cuando los rayos UV son más fuertes. Si estás al aire libre durante este tiempo, lleva una sombrilla y no te tumbes bajo la luz directa del sol. Lleva también protección solar. Los rayos UV pueden atravesar los tejidos o reflejarse en las superficies cercanas, aunque estés a la sombra.

Lleva un sombrero

5/11

La cabeza, sobre todo la nariz y las orejas, es un punto popular para el melanoma. Así que cuando estés al sol, lleva un sombrero. Escoge uno de ala ancha, de al menos 5 centímetros en todos los lados, para dar sombra a tu cuello y orejas. Un sombrero no le protegerá totalmente. Pero combinado con otras estrategias inteligentes, puede ser de gran ayuda.

Protege tu piel

6/11

Puedes llevar manga larga y falda o pantalones largos cuando salgas al sol. Pero recuerda que los rayos UV pueden atravesar algunos tejidos, sobre todo los sueltos. Elige ropa con un factor de protección ultravioleta (UPF) de 50 o más. Muchas de ellas están diseñadas para ser usadas en el calor o en el agua, por lo que pueden ser más transpirables y ligeras.

Cuida tu cicatriz

7/11

Los melanomas detectados a tiempo tienen pocas posibilidades de volver a aparecer en el mismo sitio. Pero es importante que vigiles de cerca tu cicatriz y que avises a tu médico si detectas algún cambio de color o de forma. Diles también si te pica o te duele. Puede que te recomiende una inyección de esteroides o una crema. Utiliza protección solar en la cicatriz y mantenla cubierta cuando te dé el sol. Es más sensible que tu piel normal.

Ten cuidado en el coche

8/11

Aunque estés en el coche con las ventanillas subidas, los rayos UV pueden atravesar el cristal y dañar tu piel. Tienes más probabilidades de sufrir un melanoma en el lado izquierdo, donde el sol incide cuando conduces. Ponte protección solar en la cara y en otras partes expuestas, como los brazos y las manos, mientras conduces. O bien opta por ir de copiloto. También puedes conseguir una película transparente de protección contra los rayos UV para tus ventanas.

Nunca Fake Bake

9/11

Una sola sesión en una cama o cabina de bronceado puede hacer que tengas un 20% más de posibilidades de padecer un melanoma. Es aún más arriesgado si ya has tenido la enfermedad.

Conoce a tu médico de la piel

10/11

Todos los adultos deben acudir al dermatólogo una vez al año para una revisión de la piel. Pero eso no es suficiente si ya has tenido un melanoma. Durante los dos años siguientes al diagnóstico -cuando es más probable que el cáncer reaparezca- debe acudir cada tres meses. Después de eso, es probable que tenga que visitar cada 6 meses.

Abastécete de cremas hidratantes

11/11

Durante y poco después del tratamiento, la piel puede resecarse y picar. Para darle el cuidado que necesita, aplique una crema o pomada dos veces al día. Utiliza jabones y detergentes sin perfume. Los productos perfumados pueden irritar la piel. Dúchate poco y con agua tibia. Así evitarás que se te reseque.

Hot