De los archivos del médico
Más de dos años después de sufrir un ictus (del que se habla aquí públicamente por primera vez con el médico), y casi 10 años después de que le diagnosticaran diabetes, Tonye Patano, de 45 años, sigue luchando por controlar su peso. La situación no es nada fácil si se tiene en cuenta que el actor acaba de recorrer el país, coprotagonizando la reposición de la obra de teatro Legends junto a las divas de Dinastía, Joan Collins y Linda Evans.
"Mi cuerpo no está en su punto óptimo", reconoce Patano. "Los Ángeles es el lugar donde la neoyorquina rueda Weeds, la serie de Showtime en la que su personaje, Heylia, suministra marihuana a la repentina viuda ama de casa convertida en traficante de Mary-Louise Parker. (La tercera temporada se estrena en agosto).
Parte de la formidable presencia del personaje se debe a su tamaño, lo que pone a Patano en una situación difícil. Si pierde peso, es probable que los síntomas de la diabetes mejoren drásticamente. Pero a Patano le preocupa que una Heylia más ligera pueda tener una presencia menos poderosa en la pantalla. "No puedo separar mi vida de actriz de la vida real", dice. "La vida real es más importante". Por suerte, los productores apoyan al personaje, sea pesado o delgado.
El derrame cerebral de Patano se produjo justo después de terminar el rodaje de la primera temporada en 2005. "Les dije a mis amigos: 'Siento que algo está empezando a pasar'". Justo cuando pronunció esas palabras, se desplomó sobre su lado derecho.
Como había visto ataques de apoplejía en otras personas, Patano pidió a los médicos que estudiaran la posibilidad de un ataque de apoplejía, aunque su edad relativamente joven y el hecho de que pudiera comunicarse con claridad hacían improbable un ataque de apoplejía. Sin embargo, unos 700.000 estadounidenses sufren accidentes cerebrovasculares cada año, y es la tercera causa de muerte más común, que se cobra unas 163.000 vidas al año en Estados Unidos. Los coágulos causan la mayoría de los accidentes cerebrovasculares, y el resto se deben a hemorragias.
Tras un año tomando anticoagulantes, Patano ha dejado de tomar medicamentos para el ictus. Sigue comiendo la mayor cantidad posible de frutas y verduras, evita el azúcar y practica el senderismo y la danza para hacer ejercicio. "Mi nuevo reto es ir más allá de los 50 años", dice Patano. "Tengo cinco años para brillar con luz propia".