¿No es magnífico ser padre?

Padres de repente

De los archivos del médico

4 de junio de 2001 -- Hace unas semanas, Ryan Butts, de 3 años, celebró un gran logro: Se preparó un sándwich de mantequilla de cacahuete él solo, sin la ayuda de "mamá", que lo observaba a un brazo de distancia en su cocina de Mountain Home, Arkansas. Geri Butts, de 54 años, dice que presenciar esa hazaña culinaria fue un momento especial que se habría perdido si ella y su marido David, de 49 años, no hubieran decidido ser padres de su nieto, Ryan.

Según la Oficina del Censo de EE.UU., unos 3,9 millones de niños estadounidenses menores de 18 años viven en 2,5 millones de hogares encabezados por abuelos. Para aproximadamente 1,4 millones de esos niños, la única figura parental es un abuelo.

No obstante, Butts afirma que muchos abuelos que se encuentran "de repente como padres" están "todavía en el armario". No quieren hablar de la situación", dice.

Muchos de estos abuelos siguen lidiando con problemas relacionados con sus propios hijos, dice Butts. En su caso, dice simplemente que la madre de Ryan "no era lo suficientemente madura para asumir las responsabilidades de ser madre." Geri y David han criado a Ryan desde que tenía dos meses y tienen la custodia legal del niño.

Hay recursos disponibles

Butts dice que ella y otros "abuelos" locales se reúnen ahora en un grupo de apoyo formado por el Centro de Recursos Familiares del Condado de Baxter. Entre los beneficios que ofrece el grupo de apoyo está el intercambio de información sobre cómo calificar para programas como WIC o Medicaid, que pueden ayudar con los costos de alimentación y atención médica.

Probablemente uno de los mejores recursos para los abuelos que crían a sus nietos es el Centro de Información para Abuelos de la AARP. Puesto en marcha en 1993, el centro está dirigido por Margaret Hollidge, que se describe a sí misma como "una abuela que "se quedó atrapada" con el nieto más dulce e inteligente durante 5 años."

En el caso de Hollidge, estaba al frente de un hogar multigeneracional. "Mi hija de 22 años estaba embarazada y me encontré con que me convertía en copadre de su hijo", dice.

La hija y el nieto de Hollidge están ahora solos, dice, "pero seguimos estando muy unidos y cuando mi nieto viene a visitarme un fin de semana, me dice: 'Abuela, qué bien se está en casa'. "

Temas difíciles de tratar

La hermana Elizabeth Mullane, directora de servicios de cuidados positivos y servicios médicos de los Servicios de San Vicente en Nueva York, suele lidiar con los aspectos más difíciles de los abuelos como padres.

Muchas veces un abuelo asume la crianza cuando "los padres no pueden asumir su responsabilidad por un problema de abuso de sustancias o porque [están] en la cárcel", dice. Y en esos casos, es muy probable que los abuelos se sientan abrumados.

"Probablemente el servicio más importante que podemos ofrecer entonces tanto al abuelo como al nieto es el cuidado de relevo", dice, es decir, el cuidado temporal y a corto plazo del niño para dar al abuelo un descanso de la rutina diaria de los cuidados. "Incluso hacerse cargo durante unas horas puede ser un alivio bienvenido y esencial", dice.

Incluso en las mejores circunstancias, no es fácil para los abuelos volver a ser padres", dice Hollidge. Un aspecto especialmente difícil es lidiar con los aspectos legales.

"Los abuelos siempre son reacios a establecer acuerdos formales", dice. "En muchos estados significa tener que llevar a su propio hijo a los tribunales para que lo declaren padre incapaz".

Algunos estados, como California y Delaware, han aprobado leyes de educación y consentimiento médico que permiten a los abuelos que puedan presentar una declaración jurada de residencia y parentesco inscribir a los nietos en la escuela y firmar consentimientos para la atención médica. Pero la legislación varía mucho de un estado a otro, según la AARP.

Descubrir cómo han cambiado las cosas

Según la AARP, la edad media de los primeros abuelos -cuando nace su primer nieto- es de 47 años, lo que difiere mucho de la imagen de los abuelos canosos y en mecedora de generaciones anteriores, dice Mullane. Sin embargo, dice, incluso a esta edad relativamente joven, "sigue siendo cierto que las cosas han cambiado desde que estos abuelos fueron padres por primera vez."

Los pediatras pueden ayudar educando a los abuelos sobre algunos de esos cambios, dice la doctora Andrea McCoy, directora de atención primaria del Centro Médico Infantil de la Universidad de Temple, en Filadelfia. Por ejemplo, la campaña "Back to Sleep" es un esfuerzo reciente para prevenir el síndrome de muerte súbita del lactante, o SMSL. Hay que explicar a los abuelos que hay que acostar a los bebés boca arriba, no boca abajo, dice McCoy, un consejo que va en contra de lo que muchos de ellos hicieron con sus propios hijos. "Pero ahora sabemos que al poner al bebé boca arriba reducimos el riesgo de SMSL", afirma.

Y aunque muchos abuelos sí utilizaban sillas de coche para sus propios hijos, la tecnología y la práctica han cambiado en los últimos años.

"Los abuelos deben saber que los bebés deben ir en sillas de coche orientadas hacia atrás, en el asiento trasero, hasta que tengan un año y pesen 6 kilos", dice McCoy. Además, todos los niños deben viajar "en el asiento trasero hasta los 12 años".

Las recomendaciones nutricionales también han cambiado en los últimos años.

Muchos abuelos recordarán que se les instó a "dar a sus bebés alimentos sólidos" lo antes posible, dice McCoy, pero hoy en día se insiste menos en ello. Dado que los abuelos no tienen la opción de la leche materna, una buena nutrición infantil significa sólo leche de fórmula durante al menos cuatro meses, dice. A partir de entonces, se puede empezar a dar cereales, pero el bebé debe seguir tomando leche artificial hasta que cumpla al menos un año, dice.

"Los bebés no deben tomar leche [de vaca] hasta que tengan al menos un año", dice McCoy. Cuando se introducen los alimentos, McCoy dice que hay que hacerlo dando "la misma verdura o fruta durante al menos tres días. Esto nos ayuda a identificar los alimentos que pueden causar una reacción alérgica."

Y durante el primer año no se debe dar a los bebés agua, miel, mantequilla de cacahuete o chocolate. McCoy dice que desaconseja el agua porque sólo "llena al bebé sin darle ninguna nutrición."

También ha habido algunos cambios en los tipos de vacunas que se administran a los niños, dice McCoy.

"Los bebés necesitan 20 vacunas durante los dos primeros años de vida", dice. Entre ellas están las vacunas más antiguas, como la del sarampión, las paperas y la rubeola, y las más recientes, como la de la varicela, la de la hepatitis B y la Prevnar, que previene las infecciones que causan neumonía y meningitis.

Si los abuelos criaban a sus hijos hace más de 20 años, es posible que no sean conscientes del peligro que conlleva el uso de aspirinas infantiles para la fiebre, dice McCoy. Dar una aspirina para bebés a un niño con fiebre puede causar una enfermedad grave llamada síndrome de Reye. "El paracetamol [Tylenol] se recomienda ahora para tratar la fiebre en los niños", dice.

Ahora se sabe que algunos otros remedios caseros son peligrosos, dice McCoy. Por ejemplo, poner alcohol en las encías de un bebé para adormecer el dolor de la dentición es "realmente venenoso", dice. "Nunca se debe frotar whisky en las encías de un bebé".

Algo que no ha cambiado con el paso de las generaciones son los beneficios que pueden derivarse de exponer a los niños tanto a la lectura como a la música a una edad temprana. McCoy dice que anima a todos sus padres y abuelos a leer a los niños desde que nacen. A nivel personal, también "cree que escuchar música clásica puede realmente ayudar a los niños a aprender más tarde."

Por último, McCoy dice que los abuelos que están criando a sus nietos deben considerar a sus pediatras como recursos. "Cuando tengan dudas, pregunten al médico", dice.

Se puede contactar con el Centro de Información para Abuelos de la AARP en el 202-434-2296. Otra organización, Generations United, en el 202-638-1263, también es una buena fuente de información sobre crianza para los abuelos.