Mermeladas y jaleas caseras: Fáciles y sabrosas

No hay nada como una buena mermelada. Los sándwiches de mantequilla de cacahuete y mermelada, la mermelada en las tostadas o los pasteles rellenos de mermelada son algunos de los deliciosos usos de este dulce.

Hacer jaleas, mermeladas y otros productos para untar es fácil. Puedes aprender a hacer variedades únicas para uso personal, para vender y para regalar.

Equipo que necesitará

Además de los utensilios de cocina habituales, como tazas de medir, cuchillos, cuencos, cucharas y guantes de cocina, necesitarás los siguientes utensilios para hacer tus mermeladas y jaleas:

  • Cacerola de 8 a 10 cuartos de galón

  • Bolsa de gelatina y soporte

  • Termómetro para gelatina o caramelos

  • Frascos de cristal preferentemente con tapa

  • Conservador (alternativamente, una olla profunda con tapa que pueda contener suficiente agua para cubrir los tarros por 2 pulgadas)

Ingredientes que necesitarás

Los ingredientes de tu jalea variarán. Las jaleas, mermeladas y confituras tienen cuatro componentes principales: fruta, pectina, azúcar y ácido. 

La fruta. Las frutas determinan el sabor y el color de la mermelada. Lo ideal son las frutas frescas. Puedes utilizar fruta congelada o enlatada si está en zumo, pero tendrás que añadir pectina.

Antes de ponerte a experimentar con las frutas, sigue algunas recetas tradicionales para dominar el proceso.

Pectina. La fruta produce esta fibra, que se convierte en un gel cuando se combina con ácido y azúcar. Cuanto más madura está una fruta, menos pectina tiene. Se puede utilizar pectina manufacturada, pero esto requiere más azúcar.

Ácido. El ácido es vital para crear la consistencia de la gelatina. Las frutas con poca acidez necesitarán que se les añada ácido adicional a partir de zumo de limón u otros ingredientes ácidos. 

Azúcar. El azúcar es esencial para la consistencia de la gelatina, para conservar la mermelada y para endulzar la mezcla. Se puede sustituir el azúcar granulado por jarabe de maíz o miel, pero esto cambiará la textura de la mermelada. Un exceso de edulcorante añadido también arruinará los sabores afrutados.

Si le preocupa el azúcar, hay variedades de pectina para untar con poco azúcar. Sin embargo, el simple hecho de alterar el azúcar en una receta no es suficiente para que su jalea sea más saludable. 

Cómo hacer mermelada para untar

Revisa tus frascos. Asegúrate de que tus tarros no tienen grietas ni daños. Luego, límpialos con agua y jabón, hiérvelos durante 10 minutos para esterilizarlos completamente y mantén los tarros calientes.

Prepara la fruta. Después de enjuagar la fruta, retira los tallos, las semillas, los huesos y la piel que no sean comestibles. Pica y tritura la fruta. Lo mejor es empezar con lotes pequeños, como indica la receta.

Cocine la mezcla de frutas. Añade la mezcla de frutas a la cacerola y cocínala a fuego lento. Remueve hasta que el azúcar se disuelva.

Lleve rápidamente la mezcla de frutas a ebullición y cocine hasta que se espese. Remueva con frecuencia para evitar que se pegue y se queme.

Determine el grado de cocción. Cocine durante menos tiempo para obtener una pasta más suave. Aumente el tiempo de cocción para obtener un producto más firme y espeso. Si utiliza pectina añadida, puede cambiar la cantidad de zumo de fruta según su gusto, pero no añada más o menos de 1/2 taza de lo que pide su receta.

Añadir la gelatina o la mermelada a los tarros. Quite la espuma que se haya formado y vierta la mezcla de frutas en los tarros calientes. Deje un espacio de 1/4 de pulgada en la parte superior del tarro.

Procesar los tarros. Con las tapas puestas, pon los tarros en agua hirviendo en tu olla de conservas. Su receta especificará el tiempo necesario. Si no es así, cuece de 5 a 10 minutos.

Deje que se enfríen. Deje que los tarros en el agua se enfríen durante al menos 12 horas. Una vez hechos, límpielos y guárdelos en un lugar oscuro y fresco.

Qué esperar después

Si se dejan sin abrir, las mermeladas y jaleas pueden durar hasta un año en un lugar oscuro, seco y fresco. Las mermeladas pueden formar fácilmente moho o levadura si no se almacenan adecuadamente. Lamentablemente, si esto ocurre, la fruta para untar debe ser desechada. 

Cómo hacer mermelada en el congelador

Al hacer mermeladas utilizando el método tradicional de enlatado, es fácil cometer errores durante los pasos de calentamiento, enfriamiento y desinfección. Como resultado, puedes acabar con un tarro de conservas plagado de bacterias. 

La mermelada para congelar no requiere cocción y en su lugar se opta por congelar la receta, lo que reduce el riesgo de contaminación. La mermelada para congelar también puede servir como práctica para las prácticas tradicionales de enlatado. 

La principal diferencia entre la mermelada para congelar y la tradicional es la pectina. La mermelada para congelar requiere pectina adicional hecha para la congelación. Dado que la mayoría de la pectina comprada en las tiendas se activa con el calor, asegúrese de buscar una marca que esté pensada para usar sin cocinar.

Hacer mermelada para congelar. Sigue el mismo proceso que para la mermelada tradicional, pero detente antes de cocinar la mezcla de frutas. A continuación, según el envase de la pectina, añada la cantidad especificada de pectina, azúcar (se recomienda azúcar superfino) y ácido.  

Mezcle bien durante al menos 3 minutos para que la mermelada alcance la consistencia ideal. A continuación, llene los tarros con la mezcla, dejando 3/4 de pulgada de espacio en el tarro.

Por último, congele la mermelada hasta 6 meses. Los tarros de mermelada pueden conservarse en el frigorífico hasta una semana. 

Hot